Mi primo & 4 idiotas

Capítulo 17

EMMA

Me encuentro en un parque que ni se cual es y lo peor de todo es que empezó a llover, es de noche, hace frió y para completar no traje ni chaqueta ni mi celular, bien lo mio, igual no pienso volver a casa por lo menos por esta noche.

Ya que no se a donde ir decido sentarme en una banca, es mi única opción. Mis lagrimas empiezan a aparecer cuando recuerdo la conversación con Luke y cuando lo vi en esa fiesta, y de James aun no puedo creer todo esto ¡¡Porque a mi!! Estaba tan concentrada en mis pensamientos que no me percate de que alguien se había sentado junto ami hasta que por fin hablo:

—¿Estas bien?— Me dice aquel chico moreno.

—Si, solo que mis cachetes estaban un poco secos y los regué— Dije sarcásticamente y escucho un pequeña risa de parte de el.

— Bueno chica agresiva— Sonríe — Soy Liam.

Me tiende la mano y yo la acepto dudosa.

— Emma— Dije no muy convencida.

— ¿Segura?— Dice riendo a carcajadas— No pareces muy segura de tu propio nombre.

— Es que se me hace raro, que alguien se acerque de hablarle a otra persona de la nada.

— Te vi mal y te quise ayudar ¿Esta mal?

— Supongo que no.

— Te invito un café para sacarte una sonrisa al menos— ¿No se cansa de sonreír?

— Esto es todavía más raro, pero acepto porque tengo frío y porque vas a pagar vos.

Encontramos una cafetería a unas cuatro cuadras, parecía muy acogedora. Y cuando entramos comprobé que no me equivoqué. Estuvimos una hora hablando de temas triviales hasta que salió el tema de porque me encontró en el estado que estaba.

Yo aprovechando que había encontrado alguien para descargarme, que no viviera en mi misma casa y que no sea amigo de los dos chicos que en este momento odio, le conté todo lo que había pasado. Desde que me había mudado acá hasta la fiesta y posteriormente mi conversación con Luke.

El me aconsejó pasar la noche en su departamento, sin segundas intenciones, me dijo que tenía una pieza con una cama aparte, así que no era el típico cliché que porque llueve yo voy a tener miedo y vamos a dormir juntos. Es más amo las tormentas.

Yo acepté la oferta porque lo que menos quería era estar en mi casa y esta opción sonaba muy tentadora para rechazarla. Después de que Liam pagará los café, cosa que traté de evitar porque estaba claro que bromeaba cuando se lo pedí en la plaza. Fuimos caminando hasta su casa.

Por fuera el pent-house se veía muy lujoso, aunque eso ya lo había deducido cuando me informo que vivía en uno. Me pregunto de dónde sacará el dinero, si me dijo que vivía solo hace más de dos años. Y esquivaba el tema de su trabajo, como si fuera un secreto o se avergonzara de él.

Al entrar me sorprendí mucho de que era muy ordenado, no había ropa tirada, ni muchas cervezas en la heladera, lo único que pegaba con su imagen de chico malo era que había un cenicero en el medio de una mesa ratona con al menos diez colillas de cigarrillos.

Me prestó una remera que me cubría lo justo y lo necesario, pero como mi shorts no se había mojado casi nada, estaba cubierta. Me ofreció hacer unas hamburguesas completas afirmando que ese era su "Menú especial".

Yo por mi parte apagué mi celular cuando vi que tenía 21 llamadas perdidas de Logan, 13 de James, algunas de los otros chicos, pero ninguna de Luke.