MIEDO AMAR !!PORTIÑON¡¡ ♥

Cap. 10

 En cuanto entré en casa les di las buenas noches a mis hermanos y me fui directamente a mi habitación, estaba exhausta, necesitaba dormir..
Cuando entré, empecé a desvestirme, cuando ya estaba en ropa interior me di cuenta de que mi ventana estaba abierta, me pareció un poco raro porque la había dejado cerrada cuando me fui.. pero no continué pensando en eso, seguro que mi madre la abriría.. fui a cerrarla y después cogí mi pijama, me quedé pensando un momento, y decidí no ponérmelo.. ese verano era muy caluroso y se dormía mucho más cómoda.. deshice la cama, solo me tapé con una manta y apagué la luz.. en menos de 5 minutos ya me había quedado dormida..
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De repente abrí los ojos, había escuchado un ruido.. miré el reloj y eran las 3 de la mañana.. me quedé quieta en la cama para ver de donde provenía, fuera lo que fuese, parecía que estaba dentro de mi cuarto.. esperé por unos momentos y ya no volví a escuchar nada.. seguro que había sido algún pájaro en la calle.. me di la vuelta y cerré los ojos para seguir durmiendo, cuando volví a escuchar un ruido.. ya si que me senté en la cama y encendí la lámpara que había en mi mesa auxiliar.. me dolía mucho la cabeza y no podía ver bien, siempre me pasaba lo mismo cuando me despertaba de madrugada..
Otra vez esta chica.. Yo no me asusté.. por alguna extraña razón me sentía segura cuando ella estaba alrededor.. otra vez el mismo sueño de anoche?? Me estaba empezando a obsesionar con esta chica..
Ella se acercó a mi despacio, parecía que dudaba.. no me quitaba la mirada de encima.. parecía un poco.. acelerada?? yo aún estaba aturdida, me costaba mucho mantenerme sentada.. todavía no recordaba que estaba en ropa interior..
-Qu-quien eres?? Qu-que haces aquí??-Dije sin poder pronunciar bien, el dolor de cabeza me mataba..
-Anahi qué te pasa?? Estás bien??-Dijo con una voz un tanto preocupada..
Por fin pude oír bien su voz.. era un poco ronca, pero muy dulce..
No respondí.. quería que siguiera hablando, me encantaba su voz.. me tranquilizaba y a la vez.. me excitaba.. me sonrojé un poco con este pensamiento..
Me dolía demasiado la cabeza.. estaba muy mareada, quería mantener los ojos abiertos pero me fue imposible.. cerré los ojos, ella se acercó a mí y puso sus manos en mi cabeza y mi espalda, me recostó sobre la cama. Lo último que recuerdo es su voz, llamándome en voz baja..
-Dul.. no te vayas..
A la mañana siguiente me desperté a las 12 de la mañana y el dolor de cabeza seguía.. con ese sueño no había podido dormir muy bien..
Me levanté, y fui a darme una ducha.. necesitaba despejarme..
Después de esto, bajé a desayunar con mi familia, y me llevé una grata sorpresa al encontrar allí a Claudia conversando con mis padres..
-Ey dormilona, ya es hora de que despertaras.. llevo un buen rato esperandote.. –Dijo Claudia con una sonrisa..
-Hola Clau, perdón pero no estoy acostumbrada a salir por la noche, y perdón por hacerte esperar, no sabía que ibas a venir a esta hora..
-No pasa nada, estaba aquí entretenida hablando con tus padres..
Después de esto desayuné rápido y Claudia y yo salimos a la calle.. ella me llevó a varios lugares para que me volviera a acostumbrar al ambiente de L.A, me llevó con antiguas amigas que teníamos en común y me presentó a las nuevas.. decidimos ir a comer para así poder conversar más tiempo, por el camino nos encontramos con Poncho y unos amigos suyos, él hizo las presentaciones e invitamos a los chicos a comer con nosotras, ellos aceptaron encantados..
Poncho en todo el tiempo no se había separado de mi, haciéndome bromas y jugando conmigo, pero siempre con su coqueteo natural.. me divertí mucho con él..
En el restaurante Claudia se sentó a un lado y seguimos hablando de diversas cosas, también aproveché para descansar un poco de Poncho.. es muy divertido, pero seguirle todas las bromas puede llegar a ser agotador
Yo estaba deseando de preguntarle a Claudia sobre Dulce, pero no me atrevía, tenía miedo de saber que ya se había olvidado de que existo o que ni siquiera viviera en L.A.. así que no la nombré..
Pasamos el resto de la tarde todos juntos divirtiéndonos, después Poncho se ofreció a llevarme a mi casa y yo acepté, realmente ese chico me caía muy bien, y me hacía olvidarme de los sentimientos que me atormentaban cuando estaba con el..