doce

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-¿Has visto lo que Josh Dun hizo, cierto?.-preguntó mi amigo emocionado. Yo negué.-¿Cómo que no?, tendrías que haber visto la cara de esos niños, ¡no lo podían creer!.

-Me fui antes de que pasara.-dije sentándome en mi banco, Daniel hizo lo mismo y sacó su carpeta colorida.- ¿Qué hizo?.-pregunté tratando de parecer ajeno a lo que pasó, cuando toda la escuela hablaba solo de eso.

-Se enfrentó a todos sus amigos.-dijo muy emocionado.- Les dijo que no sería más su marioneta, ¿puedes creerlo?. Además que ya no tiene más amigos, ¿qué hará?.-preguntó de manera ansiosa. Como siempre lo hacía. Yo me encogí de hombros, la verdad no me importaba que haría de su vida, claramente no lo hizo por mí.- Antes hablo contigo, ¿qué te dijo?.

-Nada...-susurre, creyendo que Daniel dejaría el tema ahí. Pero es imposible complacerlo así que siguió esperando.- Solo quiso que salgamos a comer o no se, cosas gay.-conté sin darle importancia al tema.- Propuso que "nos conozcamos de nuevo" y le dije que no era capaz ni de enfrentarse a sus amigos.-Daniel soltó un grito inesperado.- ¿Y eso?.

-Lo hizo por ti, tonto.-dijo entusiasmado. Yo negué- Claro que si, ¿por qué más lo haría?.

-Tal vez quiere ser mejor persona.- la verdad, me costaba creer que Josh hizo eso por mí, en realidad me costaba creer que alguien podía hacer algo por mí.

-Por ti.-volvió a afirmar. Hice una sonrisa sin mostrar los dientes.- Ves, te agrada la idea.

-Cállate, Daniel.- dije y el quiso reprochar como un niño pero el profesor de álgebra entro al salón y empezó a escribir. Daniel lo siguió y como siempre yo hice cualquier cosa menos prestar atención.

-Hay una fiesta hoy.-dijo en voz baja Daniel.- Ven conmigo, por favor.-me rogó.

-Sabes lo que opino de esas cosas.- dije en el mismo tono. No quise ver el rostro de perrito abandonado que seguro tiene.

-Necesito que me acompañes.-susurro en un tono triste.- ¿Recuerdas a Ethan?.-asentí, claro que lo recordaba otro hijo de puta del cual Daniel se enamoro.- El irá, y quiere hablar conmigo. Tengo miedo de lo que puede pasar y quiero saber que cualquier cosa tú estarás ahí.-rogó. Era imposible no aceptar si alguien como él te lo pedí- con ese tono.- Por favor Tyler, es lo único que te pediré en toda la vida.

-Esta bien.- Daniel soltó un gritito de emoción.

-Gracias Tyler.-susurro.- ¿Te pasó a buscar?.-preguntó, negué rápidamente.-Esta bien, tú pasas por mi.-asentí y el volvió a prestar atención a la clase.

No puedo creer que acepte ir a una fiesta en donde literalmente todos me caen mal y todo porque Daniel quiere hablar con el simio de su ex novio. Desvíe mi mirada del pizarrón y mire a cada uno de mis compañeros y volví a afirmar que todos me caen mal excepto Daniel,claro.  No preste atencion a nada de lo que el profesor dijo en toda la clase, normalmente nunca lo hago. 

Escuche el timbre de salida y rápidamente guarde mis cosas para salir de ahi. Me despedi de Daniel y el me hizo prometer que pasaría por su casa para ir a la fiesta, asenti. No le iba a fallar, claro que no. Y por eso estoy seguro que sera una larga noche.

Llegue a casa sin animo alguno. Mi padre estaba en el sillon y una chica desnuda se encontraba arriba de el, negue repetidas veces y subí antes de que el notara mi presencia, no queria lidiar con el y sus comentarios de tarde. Pase por la habitación de mi hermana y me sorprendi al ver todas las prendas de ropa en el piso y ella llorando entre unos vestidos, me acerque rapido y la abrace, sus brazos delgados se envolvieron en mi cintura,  no queria abrazarla muy fuerte, sentia que si lo hacia podia llegar a romperla.

brøke;jøshlerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora