I don't wanna lose her, again. - One Shot [Camren]

51.7K 1.3K 94
                                    

i don’t wanna lose her, again.

Sigo sentada en el balcón del cuarto de hotel en el que nos hospedamos esta noche. Las estrellas brillan a lo alto, las luces de la ciudad alumbran todo alrededor. Suspiro con nostalgia, como quisiera que esa pequeña señorita de larga cabellera negra y ojos marrones estuviera aquí conmigo, si tan solo hubiera abierto los ojos desde el principio nada de esto estaría pasando. Vuelvo a suspirar, una lágrima muda corre por mi mejilla.

Agradezco el estar sola esta noche, mi madre se regresó a casa hace un día, me dolió no estar con ella en su cumpleaños, pero necesitaba un respiro, siento su presión cada que nos acompaña. No me deja ni siquiera estar junto a Camila.

Otra lágrima cae, pero en mi otra mejilla. Respiro profundo y las limpio. De nada me vale llorar ahora, las chicas habían salido de compras, según ellas querían llevarse un recuerdo de esta ciudad, lo mismo hacían con las demás. Creo que no les basta con todos los obsequios que nos dan nuestros harmonizers.

Hubiera salido con ellas, pero mi estado de ánimo decayó en el M&G, cuando una chica antes de salir, volteo a vernos por última vez y digo vernos me refiero a Camila y a mí. Nos observó y en su rostro había una sonrisa triste y susurro un “Ojala todo fuera como antes” y salió.

Después de eso, el camino de regreso al hotel por mi parte fue silencioso, solo quería llegar, darme una ducha y quedarme sola un rato para pensar las cosas, para buscar el punto exacto en donde todo cambio.

Ahora ya era un poco más de 8:30 pm y las chicas no regresaban, me sentía aliviada en cierto modo. Sé que notan la tensión que existe entre Mila y yo, por más que lo intentemos disimular, o que lo habláramos antes.

No, eso no fue hablar.

Flash back.

-Hey Camz… ¿Podemos hablar? –le susurre para que nadie más escuchara.

-Claro Lolo, ¿Qué ocurre? –me dijo de la manera más dulce, mi corazón se contrajo.

-¿Podemos hacerlo en otro lado? –baje la cabeza con vergüenza.

-¡Oh! Está bien –hablo un poco contrariada, pero inmediatamente su rostro tenía una sonrisa.

Caminamos en silencio hasta el pasillo, donde no se encontraba nadie, estaba completamente desolado. Me hubiera dado miedo, de no ser por esa sonrisa que tenía frente a mí, sonrisa que desgarraba mi corazón.

-Ahora sí, ¿Qué ocurre? –Comencé a temblar, ella lo noto –Hey Lolo, me estas asustando -Su rostro mostraba un poco de preocupación.

-Ya no podemos ser tan cariñosas en público –susurre sin levantar el rostro –A mi madre no le agrada la idea de que digan que somos lesbianas, cree que no es buena imagen para el grupo, que apenas vamos comenzando, que esto nos puede afectar –saque valor que realmente no tenia y observe su rostro.

-¿Qué? –Estaba confundida -¿De qué hablas?

-Quiere que dejemos el tema de “camren” en paz –apreté la mandíbula. Sus ojos se llenaron de lágrimas y mi corazón se rompió.

-No sé porque tienen tanto miedo, tu y yo no somos nada, solo mejores amigas que se querían mucho –esas palabras fueron como puñales para mi corazón –Y si alguna vez pudo haber algo, después de hoy, no más –dejo caer las lágrimas por sus mejillas, se dio la media vuelta –Te quiero Lauren, y no te preocupes, por mi parte no habrá más “camren” para que estés tranquila –y sin más entro a la habitación.

Entro y me dejo sola en ese pasillo desolado, sola con mi corazón roto y lágrimas cayendo por mis mejillas.

Al día siguiente, las cosas cambiaron. Camila ya no era ni la mitad de lo que era conmigo, puede que siga hablándome normal, pero ahora sus cariños o sus abrazos o esas sonrisas tontas se las da a las demás, conmigo solo hay formalidad. Esas sonrisas llenas de cariño, ya no están. Al menos no para mí.

Flash back.

Si, ese fue el día en que todo cambio. Me dolió que dejara de ser así conmigo. Sus abrazos, o esas miradas confidentes ya no eran para mí. Y me di cuenta demasiado tarde de que no me dolía porque había perdido a una amiga, me dolía porque estaba perdiendo al amor de mi vida.

¿Por qué no me di cuenta antes? ¿Por qué no note las señales que ella me mandaba? ¿Por qué? Si, en su momento note que Camila me miraba cuando cantaba o cuando hablaba, pero nunca me di cuenta de la mirada que tenía hacia mí.

¿Por qué nunca note que le dolió cuando le conté que saldría con Keaton? Admito que me gustaba tener su atención, que me sentía bien el saber que era su “crush” como ella lo menciono en el “Text, Tweet, Telephone”.

Sonreí al recordar eso, ojala pudiera regresar el tiempo, armarme de valor y estar con ella. Pero las cosas no siempre son como uno quiere, mi papá tuvo que abrirme los ojos. ¡Por Dios! ¡Incluso él se dio cuenta antes que yo!

Flash back.

-¿Qué tienes Lolo? –pregunto mi papá al otro lado del teléfono.

-Nada, es solo que te extraño –una lágrima recorrió mi mejilla.

-Mi vida, te conozco perfecto y sé que me extrañas, porque yo también te extraño –hizo una pausa –pero podría apostarte lo que quisieras a que esa melancolía que tienes no es por mí, sino por cierta niña que se cae al caminar, ¿Cierto? –logro hacerme reír, pero las lágrimas ya corrían libremente por mis mejillas.

-Papi… -fue lo único que pude decir.

-Tu madre me conto lo que paso –no sabía que responder a eso –no tienes que decir nada. Ahora hablare yo, ¿Ok? –su voz era calmada, comenzaba a darme miedo –Desde el primer momento en que te vi interactuar con esa niña, supe que nada sería igual. Cada vez que te miraba, era como si solo existieras tú para ella. Su manera de tratarte, el cariño con el que te hablaba y como te portabas tú con ella. Admito que en un principio fue shockeante para mí, plantearme la idea de que tal vez tú también sintieras lo mismo que ella, pero luego me di cuenta de lo feliz que te hacia y eso es lo único que realmente me importa. Que tú seas feliz, sea con quien sea –Simplemente lloraba, mi papá acababa de decirme que no le importaría si ella y yo estuviéramos juntas

…Sé que tu madre tuvo que ver con que su relación cambiara. Y sé también que tú debiste tener mucho miedo, después de lo que te dijo, pero quiero decirte algo. Es tu felicidad mi vida, eres tu quien va a vivir con cada acción que hagas, y si en su momento decides que ella es tu felicidad, que nada ni nadie más importa, por mi está bien. –podía sentir como sonreía a través del teléfono.

-A mamá no le gustaría –solloce.

-Tu mamá también ya lo entendió. Hable con ella y se dio cuenta de su error –sus palabras me dejaron helada.

No dije nada, sabía que en cierta forma mi mamá había tenido parte de la culpa, por meterme ese miedo de que si nos llamaban lesbianas, el grupo se vería afectado. Pero más grande fue mi culpa por simplemente aceptar eso.

Y ahora me había dado cuenta de que no era una simple amiga, de que lo que sentía por ella era mucho más grande. Que de verdad la quería, que inclusive podría decir que la amaba. Creo que muy tarde me di cuenta, me enamore de esos ojos color chocolate.

-Es tarde… ella solo me trata como una amiga más –mi corazón volvió a romperse por millonésima vez –ni siquiera como mejor amiga, una simple amiga y ya.

-Nadie dijo que el amor era fácil, mi cielo –podía sentir las cálidas palabras de mi padre llegar en lo más profundo de mi –Si realmente la quieres, lucha por ella.

Flash back.

Después de esa llamada, muchas veces intente hablar con Camila sobre nosotras, pero siempre me daba largas, o se hacia la tonta. ¿Dónde había quedado ese amor que me tenía? ¿Dónde estaba de la que me enamore? Necesitaba hablar con alguien, desahogarme.

Recordé que Alexa estaba de vacaciones con su familia en no sé dónde, por lo tanto no podía hablar con ella. Así que sin dudarlo más, marque.

Un tono… dos tonos… “¿Por qué no contesta?” me pregunte mentalmente.

-¡Oh por dios! Una súper estrella me está llamando –escuche la voz de mi querida Vero al otro lado de la línea -¿No estoy soñando verdad? –me hizo sonreír.

-No, no estas soñando –susurre, intentando que mi voz no sonara apagada –te he extrañado mi Vero.

Silencio. Ella se había dado cuenta de mi estado.

-¿Qué tienes mi vida? ¿Qué te hicieron? –pude notar su preocupación.

Alexa, Vero y yo siempre fuimos las mejores amigas. Nos conocíamos a la perfección y en estos momentos necesitaba de su contención porque estaba a punto de derrumbarme.

-La amo –susurre con mi voz quebrada y miles de lágrimas cayendo por mi rostro.

-Por fin lo admitiste –susurro, sentí que sonreía, lo sabía aunque no la estuviera viendo.

-¿Ya lo sabias? –pregunte aun sabiendo la respuesta.

-Mi amor, todo el mundo sabe que Lauren Jauregui está enamorada de Camila Cabello –sonreí como tonta.

-Pero Camila Cabello no ama a Lauren Jauregui –complete su frase.

-¿Cómo de que no? ¡Lauren esa niña se muere por ti! –exclamo emocionada.

-Al parecer, no estas enterada de las nuevas –suspire cansada.

-¿De qué? ¿De qué tu mamá te metió miedo, que papá J hablo con ella para hacerla entender de que no era malo y que te abrió los ojos a ti? No bebé, eso es historia pasada –Ok, debía admitir que estaba sorprendida –Taylor me conto –debí suponerlo.

-¿Qué acaso una no puede tener vida privada? –intente bromear.

-No corazón, no cuando se trata de la felicidad de mi mejor amiga –volví a llorar.

-La perdí Vero, no me di cuenta de que la amaba desde antes, le rompí el corazón cuando le dije lo que mi mamá me dijo, ahora ella ya no siente anda por mí –solloce, esto estaba matándome por dentro.

-Camila te ama, eso hasta un ciego lo puede ver. Si, te tardaste en darte cuenta de tus sentimientos, y casi te cago a palos cuando saliste con Keaton –guardo silencio, ¿ella también se había dado cuenta desde antes? –pero ahora lo admitiste, ahora sabes que ella es tu felicidad, no te rindas mi vida, no la dejes ir. Lucha por ella.

-La amo Vero, no tienes una idea de cuánto la amo –suspire mientras las lágrimas caían sin control –creo que la amo desde el primer momento en que la vi. Y si, no me di cuenta antes de que esto que siento por ella, me deje llevar por lo que dijo mi mamá, pero ahora… ahora no puedo vivir así. No sabes lo difícil que es pasar las veinticuatro horas del día y sentir como si me ignorara. Tenerla cerca y a la vez tan lejos, no poder sujetar su mano. Que sea cariñosa con Ally, Normani o Dinah y que a mí solo me sonría porque estamos en el mismo grupo.

…Extraño sus abrazos sinceros, o el que me mire a mí. Extraño sentirla cerca. ¿Sabes? Cuando habla, siempre observo sus labios. Nunca la bese y muero por hacerlo. Muero por sentir sus labios, probarlos y reclamarlos como míos. Muero por ser su primer beso, su primer amor. Muero por tenerla entre mis brazos y decirle “Te amo Camz” –ya no podía más, prácticamente lloraba sin control.

-Yo también te amo Lolo –Mi cuerpo se congelo, mi respiración se corto.

Todo mi cuerpo tembló, me levante rápidamente de donde estaba sentada para encarar a la dueña de esa voz. Esa voz que me quita el sueño. Lentamente subí la mirada hasta su rostro, sus ojos estaban llenos de lágrimas y sonreía. Después de tanto tiempo volvía a sonreírme de esa manera que me volvía loca.

Aventé mi teléfono a la silla, ni siquiera recuerdo haber cortado la llamada, camine directamente a ella y la abrace fuerte. Necesitaba sentirla entre mis brazos. La necesitaba con todas mis fuerzas. En cuanto nuestros cuerpos se juntaron sentir una corriente eléctrica recorrer toda mi espina dorsal. Mi corazón se inflo de alegría, sentía que en cualquier momento se me saldría del pecho.

Camila escondió su rostro en mi cuello, mientras yo me llenaba con el dulce aroma de su cabello. Realmente la amaba. Lentamente nos separamos, necesitaba decirle todo lo que siento.

-Te amo Camila, te amo tal vez desde la primera vez que te vi y realmente me siento como una idiota por no haberme dado cuenta antes, por hacerte sufrir, por hacer que nos alejáramos… -puso su dedo en mis labios haciendo que me callara.

-Hablas mucho –sonreí aun con su dedo en mi boca –escuche lo que le dijiste a… ¿Vero? –Pregunto mientras se sonrojaba un poco, solo asentí –No era mi intención espiarte, pero las chicas me enviaron para preguntarte si querías cenar, porque te marcaron y sonaba ocupado –tomo aire, a veces hablaba como Rachel Berry –entre justo cuando dijiste que “la habías perdido…”No sé porque pero en cuanto escuche eso, me congele, necesitaba saber de quién estabas hablando, mi corazón comenzó a latir muy rápido y a la vez dolía como si me enterraran miles de puñales. Creer que amabas a otra chica me estaba matando –acaricie su mejilla.

-Te amo a ti Camz –junte mi frente con la suya.

-Lo sé, y yo también te amo –mis ojos comenzaron a llenarse de lágrimas –Sé que he sido muy fría contigo estos últimos meses, pero no soporte lo que habías dicho, quería sacarte de mi corazón, quería dejar de amarte –sentí como se encogía mi corazón con tan solo escuchar eso –pero un día de la nada, comenzaste a tratarme diferente, a mirarme de la misma manera en la que yo te miraba a ti, y esa barrera que había puesto era más y más difícil de sostener –no podía dejar de mirar sus labios mientras hablaba.

-Quiero ser tu amor, quiero mostrarte lo que es amar… -pase mi pulgar lentamente por sus labios carnosos –déjame demostraste que te amo… -susurre mientras mis ojos se conectaban con ese mar de chocolate.

Cerré mis ojos y lentamente me acerque hasta juntar sus labios con los míos, un simple y delicado roce. Era su primer beso, nuestro primer beso, debía ser especial. Poco a poco moví mis labios sobre los de ella, creando una perfecta sincronía, como si nuestros labios se conocieran de toda la vida.

Nos separamos lentamente, junte mi frente con la de ella –Karla Camila Cabello Estrabao, ¿Me harías el extraordinario honor de ser mi novia? –me separe para ver sus ojos, brillaban como nunca antes.

No recibí respuesta verbal, simplemente pude sentir otra vez sus labios sobre los míos.

Puede que tengamos que mantener nuestra relación en secreto por un tiempo, puede que tengamos altas y bajas, pero estoy completamente segura, que mientras tenga a Camila a mi lado, luchare contra todo lo que se nos presente… porque la amo y no pienso perderla de nuevo.

One Shots. [Camren]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora