Llego al instituto justo a la hora del recreo, pero ni siquiera me da tiempo a entrar, pues las chicas vienen casi corriendo hacia a mi, y se ríen nerviosamente, no entiendo porque se emocionan tanto de escaparse algunas veces a esta hora, a fin de cuentas, solo hay que mirar a tu alrededor para ver que muchos, incluso los de la ESO, que lo hacen. En cuanto llegan a mi me saludan con besos, después de preguntarme por mi padre, se hace un pequeño silencio incomodo, ellas saben lo bien que me llevo yo con él y, como es de esperar, nunca se sabe que decir en algo a si, así que terminan rompiendo el silencio con un "no te vas a creer lo que paso...".
Realmente, no me importa para nada que 'a Belén le han puesto los cuernos" o que 'María estaba súper borracha el sábado' o que 'el domingo iré al concierto de Coldplay'. Que envidia con lo último le tengo a Niki, con lo que me gustan a mi. Antes hubiera escuchado con atención, o peor aún, hubiese sido yo la que les cuente a ellas. Pero ahora tengo otras muchas cosas en la cabeza y no sé ni por donde comenzar:
Primero: Mi padre esta en coma. Y no se si algún día despertará.
Segundo: No tenemos dinero. Y tenemos que mudarnos de casa ya, lo que me recuerda que hoy en la noche tengo que acompañar a mi madre a ver un pequeño piso que consiguió cerca de aquí, supuestamente muy económico.
Tercero: Estoy más que colada por Adam
Levine. Un chico que fuma Marihuana... y esnifa Cocaína, que falta a clases, que ha tenido que ser hospitalizado por una herida y a saber cual es la razón que esta incluso metida la policía. Un chico en él que nunca creí que me fijaría.
Cuarto: Me he metido en problemas con gente peligrosa, que no dudarían darme una paliza entre cinco, sé que no me dejaran tranquila hasta que les pague sus 1OO€.
Quinto: se acercan los exámenes. Y es en lo que menos estoy pensando. Yo puedo darme el disgusto de repetir, pues no lo he hecho nunca, pero eso no es razón para comenzar a hacerlo ahora y eso, definitivamente podría cerrarme algunas puertas.
- Tierra llamando a Jiménez- grita Mónica en mi oído yo respingo y la fulmino con la mirada mientras ellas ríen.
- ¿En que mundo andabas, eh?- me pregunta Lorena- ¿pasa algo?
- Nada, es que tengo muchas cosas en las que pensar...
- Oh, venga, ___* , no te pongas mal, ya veras como todo se soluciona- me anima Marta- la semana que viene, nos vamos todas a mi pueblo, estábamos pensando que quizás te haría bien venir, para despejarte un poco y tal- me dice mordiéndose el labio inferior.
- ¿La semana que viene no hay clases?- pregunto confusa, pues ninguna son de largase una semana entera sin tener en cuanta los estudios
- ¡Pero en que mundo tienes la cabeza!- me dice Niki con su acento italiano - es Semana Santa, ______ - me dice dándome un leve empujón en broma.
- Lo había olvidado- digo mordiéndome el labio inferior
- Entonces, ¿te vienes?- me pregunta mirándome con emoción Lorena
- No puedo dejar a mi mama sola. Tenemos muchas cosas que hacer, no puedo ir, lo siento
- Pero ___* ... si es por el dinero no te preocupes, nosotras...
- No es por el dinero- la interrumpo molesta- pero tengo cosas más importantes que hacer que irme a tu pueblo, ¿vale?- intento mantener el tono normal, pero se nota bastante que me siento molesta y frustrada, ¡todo parece ser el dinero! Ella permanecen en silencio
- Oye, tampoco es como para que te ponga así, nosotras solo estamos siendo amables- dice Niki molesta- no tienes que ser borde- y me fulmina con la mirada, la miro de arriba a abajo y me marcho.
Sexto: Mis amigas se enojan conmigo.
