Pasadas unas horas Jane decidió salir. No escuchó ruido alguno así que Jane buscó a Victor en la sala quien se encontraba de pie recargado en un muro observando hacia la ventana con un vaso de whiskey en la mano
Jane se lo imaginaba aún tumbado en el piso mirando hacia la nada, en la misma posición en la que lo había dejado su padre, o tal vez volviendo a concentrarse en los planos del hombre y tratando de esconder sus sentimientos como era ya costumbre, pero no. Aunque no estaba del todo errada.
Jane paso por el dibujo del que sería el "hombre" y observó los planos
-Asi que...¿Que es esto?- preguntó
-El proyecto Finnegan...¡mi hombre!- dijo aún mirando a la ventana mientras Jane seguía mirando el modelo del suelo -Iba a ser el Prometeo moderno- Victor comenzó a reírse de sí mismo - Estúpido....estúpido....estúpido- susurró muy audible
-Victor, esto no tiene el tamaño adecuado- dijo mirando los planos
-Si...¿que?- preguntó aturdido por efecto del alcohol
-Gordon era veloz y fuerte pero la carga que recibió era mucha y al final no pudo respirar-
-¿Respi...rar?- preguntó y empezó a golpear su cabeza con el muro -Agh Embolias, Embolias en los pulmones, claro. Que estupidez-
-Victor si queremos que algo viva y se mantenga vivo necesitaremos más energía y estoy hablando de mucha más-
-Jane ¿de donde sacaremos tanta ene...?- volteo y al ver a Jane hablaron al unísono -un rayo...- Victor le sonrió y fue a una habitación mientras hablaba -¡Eso es Jane!, uno de mis primeros modelos del Gancho de Lázaro obtenía literalmente su energía de la tormenta. Tal vez podemos hacerlo más grande y...- Victor se detuvo y se abofeteó a sí mismo y caminó por la sala alrededor de Jane -¡No! Es el mismo problema, no aguantaría ni diez minutos vivo. ¡No tenemos los instrumentos para hacer órganos más grandes!-
-¿Y si le damos cuatro pulmones?- preguntó Jane, Victor se detuvo y la observó. Se acercó a ella y se arrodilló
-Sabes que eres brillante ¿no es cierto?- dijo observandola fijamente, el cumplido de Victor provocó que las mejillas de Jane se sonrojaran y tomarán un color rojo carmesí
-Bueno, es nuestro hombre podemos hacerle lo que queramos ¿no?- dijo tratando de evadir el nerviosismo que ahora empezaba a invadirla
-¡Si si! Y no solo eso, ¡dos corazones! Para que bombee bien la sangre en ese cuerpo más grande- dijo entusiasmado
-¡Por supuesto, lo va a necesitar!- lo alentó ella
-¡Si!- dijo Victor entusiasmado y comenzó a reír. Por su mente paso algo y su sonrisa se desvaneció un poco -Amm ¿Jane?- dijo y la chica volteo su mirada mientras asentía -Hace un rato, cuando mi padre estaba aquí...-
-Estaba leyendo, no escuché nada ¿Dijo algo interesante?- interrumpió Jane; obviamente era una mentira, lo había escuchado y visto todo, y de tan sólo recordarlo se le hacía un nudo en la garganta. Se sintió tan impotente cuando su padre se atrevió a golpearle, se sintió como si todo eso ya lo hubiera vivido y podía sentir el dolor y la agonía que sintió Victor en ese momento. Cuando Jane dijo eso Victor sólo calló y le sonrió
-No, nada- dijo sonriendo y Jane por su segundo podría jurar que los ojos de él se iluminaron
-¿Whiskey?- preguntó ella y la sonrisa de Victor se amplió más
-Si, si buena idea- respondió él y Jane se levantó a traer la botella de Whiskey mientras hablaban sobre ideas del hombre que harían
*********
Luego de un rato Victor y Jane se encontraban completamente ebrios, aún hablando de su "hombre"
-Tiene que inclinarse para que el líquido pueda llegar a cada parte del cuerpo- dijo Victor haciendo un movimiento con sus manos inclinándolas, Jane asintió
-¡Cabeza, cabeza plana!- dijo Victor dibujando la cabeza del hombre
-¿Por qué?- preguntó ella aturdida. Era buena bebiendo, aunque no era un vicio que tenía, pero sabía cómo beber
-¿Por qué? Por que así la quiero. Por eso- respondió él y ambos estallaron en carcajadas
Luego de un rato siguieron y siguieron tomando e incluso jugando entre ellos
Cuando discutieron lo suficiente acerca del trabajo se relajaron sentándose en los sofás de la sala
Victor ya un poco menos ebrio sacó su reloj de bolsillo, aquel que le había dado a Jane el día que se conocieron, aquel con el que le salvaron la vida a esa mujer, aquel que marcó sus vidas para siempre. Lo abrió y depósito un leve beso en él.
-¿Es valioso?- preguntó Jane inocentemente
Victor alzó un poco la mirada y después de un rato habló
-Tengo posesión de esto desde que tenía diez años, vivíamos en una casa apartada, era una época de mucho frío, eran tiempos felices. Recuerdo que salimos por la ventana de mi habitación, queríamos jugar en la nieve; estábamos bien hasta que llegó una tormenta...- hizo una pausa como recordando -casi muero- dijo alzalndo de nuevo la mirada a la chica, ella abrió la boca ligeramente en señal de sorpresa -Cuando pasó la tormenta, y el sol salió, seguía con vida y tenía esto en mi mano. Esto me ayuda a recordar-
-¿Recordar qué?- preguntó Jane
-Que Dios- sonrió con burla -si esque existe, nos mando a este mundo imperfectos, débiles, frágiles, destinados a fallecer. Esto me recuerda que eso no es suficiente-
Jane pensó un poco lo que Victor le había dicho y cayó en cuenta de algo
-¿Con quien estabas?- preguntó
-¿Mm?- Victor alzó su vista de nueva a ella
-Dijiste "salimos"- le recordó la chica
Victor cerró el reloj y se puso de pié
-Nadie importante Jane, anda, ve a dormir, has trabajado mucho por hoy-
-¿Y tu que harás- preguntó ella mirando directamente a esos ojos azul intenso
-Tambien iré a dormir, fue un día agotador- contestó él a lo que la chica asintió
Por supuesto que había sido un día agotador, en tan sólo menos de 24 horas se había enterado de que Finnegan conocía su verdadera identidad, había conocido al padre de Victor, el padre de Victor lo había herido profundamente aunque el no lo demostrara abiertamente y él se había abierto a ella para contarle parte de su pasado, cosa que Victor debía admitir, nunca había echo con nadie
Una vez ambos estuvieron en sus respectivas habitaciones durmieron profundamente
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Devuelveme El Alma (Victor Frankenstein)
FanficÉl. Un genio demente que sueña con crear vida a partir de la nada. Encerrado en su propio mundo, un hombre atractivo y sumamente inteligente, sin intenciones de crear lazos con nadie. Hasta que la conoce a ella. Ella, Jane Maslow, logrará lo que nad...