Devuelveme El Alma (Victor Frankenstein)

Capítulo 9

Al día siguiente, en la casa de Finnegan, se encontraba el detective Roderick Turpin, investigando acerca de la misteriosa muerte de Finnegan la noche anterior

Con paso seguro y mirada neutra se acercó a una de las sirvientas

-¿Podría decirme todo lo que recuerde de ayer señorita?- preguntó

-Recuerdo que un hombre vino ayer y preguntó por el amo- dijo la joven

-¿Recuerda su nombre?-

-El amo lo llamó Victor-

-¿Como era físicamente?- preguntó una vez más Turpin interesado

-Era medianamente alto, bastante atractivo, cabello oscuro, piel blanca, tenía barba y vestía muy elegante- contestó la joven mientras veía como Turpin escribía en una pequeña libreta

-¿No recuerda algún otro dato? ¿Una discusión por ejemplo?-

-Ese hombre, Victor, hablo algo acerca de un proyecto que tenía con el amo-

-Muy bien, muchas gracias- Turpin se guardó la pequeña libreta en el saco y salió de la enorme casa

Caminó por la calle con un solo sospechoso en mente; Victor Frankenstein, ya lo tenía en la mira desde hace tiempo, se le había acusado de robar partes de animales muertos pero Turpin jamás se lo comprobó

Llegó a la casa de Victor para interrogarlo

Cuando tocó la puerta Jane fue quien abrió, dejando asombrado a Turpin por la belleza inigualable que poseía

-Buenos días ¿puedo ayudarle en algo?- preguntó con una tímida voz, sólo entonces Turpin salió de su trance

-Detective Roderick Turpin, quisiera hablar con el señor Frankenstein- dijo entrando a la morada sin que lo hubieran invitado a pasar aún

-Temo que está indispuesto ¿puedo saber la razón?- preguntó asustada, ¿la policía en su casa? ¿para que querían hablar con Victor?

-Estoy investigando el asesinato de Finnegan ¿sabe algo de eso?- la miró con una mirada acusadora

Jane se tensó cuando escuchó el nombre de Finnegan, ¿muerto?

Cuando Victor salió el día anterior le dijo que sólo fue a tomar aire

-No estaba enterada- respondió con sinceridad, ¡no sabía nada!

-Señorita si está encubriendo a Frankenstein lo voy a descubrir y usted será arrestada por complicidad ¿le queda claro eso?- dijo Turpin mirando a la chica, era hermosa pero si vivía con Victor debía ser igual que él y no podía confiarse de tan hermosas facciones que seguramente eran sólo un truco, o al menos así pensaba él

-Muy claro señor- dijo la chica

-Traeme a Frankenstein- dijo inspeccionando el lugar

Jane se dirigió a la habitación de Victor para avisarle sobre el incómodo invitado que recién había llegado

-¿Que se te ofrece Jane?- preguntó con el ceño fruncido

Jane cerró la puerta tras de sí

-Victor ¿que fue lo que realmente hiciste ayer?- preguntó asustada por la respuesta

-No hice nada, ya te lo dije-

-Está aquí la policía y quiere hablar contigo-

-De acuerdo, voy para allá- murmuró Victor tratando de ocultar su nerviosismo

-Supongo que ya encontraron el cuerpo- pensó

Jane salió de la habitación con Victor y mientras éste último se acercaba al sofá para sentarse Jane se quedó de pie en una esquina de la pequeña sala

-Señor Frankenstein. Agente Turpin- le extendió su mano en un gesto amable pero Victor no le respondió

-Victor Frankenstein- dijo serio

-Supongo que ya se ha de haber enterado de la muerte de Finnegan- dijo sentándose en el pequeño sofá

-Si, me acabo de enterar, un echo bastante lamentable- respondió imitando la acción del agente tomando asiento

-Una de las sirvientas dijo que usted fue a su casa ayer ¿Eso es cierto?-

-Es cierto, lo invité a tomar una copa- Jane frunció el ceño ante eso ¿como pudo invitar a tomar una copa a su violador?

-Señor Frankenstein, ¿Que clase de proyecto tenía usted con Finnegan?

Victor se puso nervioso pero no lo demostró demasiado, que era una gran ventaja para él

-Bueno, ambos estudiabamos en la Escuela Real de Medicina, estábamos haciendo una investigación sobre el cuerpo humano- mintió

-Después de tomar esa copa ¿Hicieron algo más?- interrogó

-No- respondió secamente -el se dirigió a su casa y yo vine a la mía-

-Señor Frankenstein si me llego a enterar de que está mintiendo lo arrestaré por obstrucción a la justicia y a la hermosa chica de la esquina también, por cómplice- al decir eso último Victor sintió como la ira invadía su pecho, juró que no dejaría jamás que alguien tocara a Jane y claro que lo iba a cumplir

Victor miró amenazadoramente a Turpin y advirtió

-Escucheme bien oficial, usted se atreve a tocarle un solo cabello a ella y le juro que no me tentaré el corazón con usted- Jane se acercó lo mas rápido que pudo para calmarlo, sabía que si Victor se enojaba iba a decir cosas de las que se arrepentiría después

-Victor, tranquilo ¿si? Cálmate- dijo Jane mientras ponía una mano en el hombro de Victor cosa que funcionó, pues Victor comenzó a calmarse poco a poco

Turpin sonrió con suficiencia

-Usted algo esconde y le juro por Dios que no descansaré hasta descubrirlo-

-¿Por Dios dice usted?- sonrió con ironía -Oficial debo informar que ésta es una casa de personas de libre pensamiento, si quiere averiguar algo aquí tendrá que venir con una orden y Dios no tiene autoridad aquí-

-Cuidado Señor Frankenstein, puede insultarme a mi si quiere pero nadie puede insultar el poder del Señor-dijo con una expresión seria mientras que Victor luchaba por contener la risa

-¿Es oficial de policía o un teólogo?- dijo sarcásticamente -ya se lo dije y se lo repito muy, muy lento, ni usted ni su Dios tendrán autoridad en esta casa mientras no haya una orden, ahora me veo en la necesidad de decirle a mi compañera que lo acompañe a la puerta. Buenas tardes- dijo y Turpin sonrió

Turpin y Jane se dirigieron a la puerta de entrada y justo antes de salir dijo

-Volveré con una orden, mucho cuidado Señor Frankenstein, yo se que usted tuvo algo que ver con el asesinato de Finnegan, y me hará enormemente feliz verlo a usted y a la señorita detrás de una celda. Buena tarde- dicho ésto cerró la puerta

Jane se veía muy asustada mientras que Victor empujó el sofá de coraje, eso asustó aún más a Jane

Victor se encerró en su habitación todo el día y ni siquiera bajo para la cena

Jane definitivamente estaba muy preocupada por él, sintió una fuerte opresión en el pecho

-¿Que es ésto que siento?- se preguntaba -¿Será que me estoy enamorando de Victor?-