Apuéstale a la vida

Capítulo 3

-Son muchas chicas –susurró Louis hacia los chicos- ¿estás seguro de que regalarás tu coche?

-Me duele mucho, pero… no lo sé

-Harry, prometiste regalar tu coche, ahora no te puedes arrepentir de ello –lo regañó Liam

-Lo sé, lo voy a hacer –giró su vista hacia sus fans. Se detuvo al notar una chica haciendo una seña no muy apta para una señorita. Aquella chica estaba vestida completamente de negro, tenía cierto parecido a su mejor amiga de la infancia, ____.

<<No puede ser ella -pensó Harry- ella está muerta>>. Bueno, al menos eso le había dicho su madre hace cerca de dos años. Su madre le había contado que cuando regresó de Londres, la casa de su amiga estaba desecha, quemada por completo. Nunca más volvió a ver a ____, por eso consideraron que había muerto en el incendio. Harry lloró su pérdida.

-Hola –dijo Liam por un micrófono- ¿Cómo se encuentran chicas?

-¡Bien! –gritaron todas y ____ se cubrió los oídos. Vio a Harry paseando su mirada por todas las chicas y prefirió ponerse sus lentes negros. Se acomodó un poco el cabello para ocultar su rostro. La tarde para ____ fue aburrida. Todas las chicas se la pasaban gritando y haciendo preguntas a los chicos.

-Tres horas aquí encerrada y no hacen la maldita dinámica –susurró ____ para sí misma

-Bien, el momento ha llegado –dijo el castaño de verde mirada-. ¿Ven esta llave? –Harry mostró la llave hacia sus fans-. Esta es la llave de mi coche. Necesito que esperen un tiempo más. Iré a esconder la llave y ustedes tendrán que decirme el lugar donde se encuentre.

Las sacaron del lugar y él escondió la llave a algún lugar de la cafetería. Cuando volvieron a entrar los guardias de los chicos se colocaron alrededor de la cafetería para que no hicieran trampa.

-¿Están listas? –preguntó Louis.