Capítulo 7

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Siento mucho haber tardado una semana entera en subir, pero en mi ciudad se celebró una convención y no pude resistirme en ir (casi todos los días que la hubo😳). Eso y que me costó escribir el capítulo😂. Pero nada, como siempre aquí esta.
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Capítulo 7

Me desperté a las cinco de la mañana, noté mi estómago rugir con fuerza y entonces me acordé, no había comido nada en todo el día por estar pensando en lo de Tate. Me giré, abrí los ojos todo lo que pude, empecé a respirar de manera irregular.

Él estaba ahí. ¡Él! Estaba durmiendo a mi lado, fue, si no, hasta en ese instante en el que noté que tenía una mano agarrando mi cintura y que su otra mano estaba agarrando la mía. Me quedé inmóvil, por nada del mundo quería que se despertará. Yo no tenía sueño pero sí unas ganas de comer inmensas. Tenía que librarme de él.

Bien, me decidí. Con todo el cuidado que pude fui alejando su mano de mi cintura pero cuando traté de soltar su mano de la mía, él la apretó aún mas, se removió un poco, acercándose más a mi y me volvió a rodear con su brazo libre. Sólo que está vez estábamos más cerca. ¡Dios! ¿Qué hago? Estuve unos minutos pensando pero no se me ocurrió nada, así que decidí entretenerme con lo que tenía más cerca. Su cara. Dormido hacía que los rasgos de su cara parecieran más infantiles pero eso no evitaba que me parecía el hombre más atractivo. En un atrevimiento pasé mi mano libre por su cara, desde sus cejas hasta su barbilla.

Tate pareció notarlo, suspiró y murmuró algo:- Violet...

Retiré mi mano rápido, no pude evitar sentirme furiosa. ¿Quién era esa Violet? ¿Sería aquella chica del ático?

Volví a mirar el reloj de mesilla: las siete. El tiempo pasó volando gracias a Dios. Estaba amaneciendo, al dejar la persiana abierta el día anterior los rayos de sol entraban por ella.

Un rayo de sol acabó en la cara de Tate, pareció notarlo y se giró de modo que no le diera el sol, de espaldas a mí. Soltó mi mano y mi cintura al moverse. Por fin estaba libre, pero no me movía, todavía sentía sus manos pegadas a cada parte de mi cuerpo que había tocado.

Fueron unos minutos que tardé en reaccionar, me levanté con cuidado de la cama y salí de mi cuarto hacia la cocina. Preparé mi desayuno y el de Tate, y lo subí a mi cuarto. Pero cuando llegué él ya no estaba.

Dejé el plato con la comida que sería de Tate en mi mesilla, mientras yo me senté en mi cama a comer la mía. Tenía tanta hambre que acabé comiendo parte de la de Tate también.

***

Después de ir a clases y llevar un castigo por parte de los profesores por no llevar los deberes, volví a casa directamente. Comí con mis padres en total silencio, se notaba la tensión que había entre ellos dos. Me preocupé, claro que lo hice, pero preferí no pronunciar palabra.

Subí a mi cuarto a hacer los deberes. Me senté en el escritorio y empecé. Terminé en una hora, guardé todo y me fijé en la pizarra. Me acerqué a ella y noté las marcas de lo último escrito a tiza.

- Te amo. -pasé mis dedos por cada letra borrada.

- Lo escribió Tate. -me giré para ver a la propietaria de aquella voz. Era una chica de no más de veinte años con el cabello castaño lacio y ojos grandes pero vacíos. Tenía una sonrisa socarrona pegada a la cara.- ¿A qué es adorable?

- ¿Quién diablos eres? -pregunté molesta. ¿Cómo es que se cuela todo el mundo en mi cuarto?

- ¡Vaya, qué actitud! Me gusta. -Dijo paseándose por mi cuarto como si fuera suyo.- Mi nombre es Hayden McClaine.

- Encantada, yo soy... -respondí con el ceño todavía fruncido.

- Se muy bien quien eres, __________ -pronunció mi nombre con un diminutivo pegado a él.- Sólo vengo a avisarte de que tengas cuidado con Tate.

- ¿Cómo que tenga cuidado...? ¿Por qué? -pregunté al instante.

- Ay, niña. Si te lo explicara no tendría gracia. -y sin decir más se marchó dejando la puerta cerrada.

Me tiré en mi cama mirando el techo, de repente noté que había una nota pegada al cabecero de la cama.

"Te espero a las 19:00 en el sótano. Tate"

Quedaba todavía una hora para las siete así que me fui a duchar. Me cambié y me puse una camiseta larga con el logotipo de mi superhéroe favorito, amaba esa camiseta, debajo me puse un pantalón de pijama y como calzado unos calcetines cortos.

Bajé así al sótano así al llegar al último peldaño sentí como una mano me tapaba la boca y la otra se enroscaba a mi cintura tirando de mi hacia el otro cuerpo de espaldas. Me sorprendí y en un intento de soltarme de mi atacante le pegué un codazo en el estómago. Oí su quejido ante el golpe y como su agarre se hacía menos fuerte.

Me separé de él y cuál fue mi sorpresa al encontrarme a mi vecino retorcerse en su sitio por el golpe.

- ¡¿Qué demonios?! ¡Tate! -corrí al interruptor que sólo encendió una pequeña lámpara, lo suficiente para ver un poco los alrededores.

- Admite que te asusté. -dijo triunfante.

- Disculpa, pero para asustarme a mí necesitas algo mejor que eso. -dije desafiándolo.

- ¿A sí? -respondiócon esa sonrisa chulesca que tanto había empezado a apreciar. Señaló detrás mío hacia algo.- En dos semanas es Halloween, ¿podrás aguantarlo? -me giré hacia donde señalaba, mis pupilas se dispararon, ¿qué era esa cosa?
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Por cierto a quien le interese😂mañana subo el primer cap de Kyle y Tú.
Y por último gracias a todos por leer la historia. Ya hemos llegado a más de 600 visitas😭que ilusión.

[Entre los límites] Tate y tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora