El secuestro

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Viernes, día favorito para todos en especial para Drake, un chico que vive su vida de la manera más normal que puedan imaginar, cursando el primer grado de preparatoria con excelentes calificaciones el lleva una vida feliz y tranquila.

Ahora junto con Cristian y Jack sus mejores amigos, Drake espera el momento de la salida, después de una semana de estudio todos merecían un gran fin de semana y que mejor que pasarlo en el nuevo local de videojuegos con tus mejores amigos.

El timbre sonó y mientras el salón se transformaba en una gran estampida
humana, se escucho la voz del profesor de fisica a espaldas de todos, haciéndoles recordar que no tendría un fin de semana del todo libre.

-No olviden sus conclusiones de la actividad de hoy para el lunes, esto tendrá valor del cincuenta por ciento de su promedio final-

Para cuando el profesor terminó, más de la mitad de los alumnos ya se habían retirado del salón y buscaban la salida principal para escapar de la escuela.

Al contrario de la mayoría Drake se tomaba las cosas con más calma y aunque a Jack no le agradaba tanto la idea de no salir corriendo, se veía obligado a espera a Cristian y a Drake.

Los tres caminaron a través de los estrechos pasillos de la escuela, era como estar en un laberinto gigante, aunque ellos ya conocían perfectamente la salida así que no tardaron tanto en llegar a ella.

En la parte de afuera la madre de Cristian estaba esperando por el, Jack vivía muy cerca de la casa de Cristian así que su madre iba casi todos los días por ambos.

-Te veremos mañana a las tres en los videojuegos-dijo Cristian ofreciendo la mano a Drake.

-Si, los veré mañana-afirmó el chico estrechando la mano de su amigo.

Drake observó por un momento como el auto se alejaba, su casa no quedaba demasiado lejos de la escuela, a decir verdad solo quedaba a cuatro esquinas.

Antes de que Drake empezara a caminar escucho la voz más linda que provenía tras su espalda, el chico dio la vuelta y pudo ver a esa chica que le quitaba el sueño y por la cual suspiraba.

-Hola Drake ¿te ibas a ir sin mi?-preguntó la linda chica dándole un beso en la mejilla al joven.

-Por supuesto que no Emma-respondió Drake.

Además de todo lo que tenía de especial un viernes este era el momento por el que Drake esperaba toda la semana, el pasar un poco de tiempo con su mejor amiga era muy satisfactorio.

El había estado enamorado de Emma desde que ambos cursaban la secundaria pero jamás se lo había confesado.

Los padres de Emma eran divorciados así que ella pasaba toda la semana con su madre a excepción de los fines de semana, estos los pasaba en casa de su padre que por mera casualidad vivía a lado de Drake. Así que todos los viernes sin falta los dos se retiraban de la escuela juntos.

-¿Nos vamos Drake?-apresuró Emma.

Ambos comenzaron a caminar, cuando avanzaron algunos metros Drake tenía la sensación de que alguien los estaba siguiendo, por más que trato de averiguar qué era, no pudo ver nada. Al cabo de varios minutos llegaron a su destino.

-Te veré después-se despidió Drake cuando se encontraban frente a la casa de Emma.

-Drake ¿quería preguntarte algo?-empezó la chica.

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