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El mundo deja de moverse y sus pies nuevamente permanecen firmes en el suelo mientras mira hacia todos lados para ubicarse, a pesar de haber hecho esto tantas veces sigue sin acostumbrarse y se ve obligado a incarse mientras entre arcadas trata de recuperar el aliento. El viento recorre el ambiente con los rayos de sol golpeando fuertemente sus cuerpo.

Está parado a mitad de un desierto, no hay nada a su alrededor más que plantas secas y rupturas en el suelo, sin duda esta en el lugar correcto, solamente necesita encontrarlos quedan algunas horas antes de que comienzo y el tiempo comienza a sentirse más rápido, la oscuridad se vuelve más difícil de controlar.

Teletranportase ha sido útil en los últimos años pero el viaje ya consumió demasiado de su energía e intentarlo podría terminar en algo catastrófico entonces comienza a caminar sin saber si el rumbo que toma es realmente el correcto, al cabo de uno minutos la arena calienta la suela de sus zapatos y siente sus pies quemarse mientras a lo lejos observa un par de coloridos árboles rodeados por agua cristalina.

Al llegar y arrojarse al líquido sólo puede sentir como sus manos tocan cada grano de arena caliente, los árboles se esfumaron y el agua se convirtió en polvo, el sol parece aumentar su intensidad, su boca se siente reseca y la energía se le esfuma con lentitud, tambaleante y con la vista forzada se pone de pie para continuar su camino.

Tras un par de oras más siente sus pues arder, su boca seca y su energía agotada, su cuerpo ya no da más y termina por desvanecerse, mientras su mente aún consciente se pregunta se esto termina aquí, ¿después de tanto?, ¿Después de todo lo sucedido así es como termina?, se niega a creerlo mientras escucha pasos acelerado acercarse a su posición, intenta reincorporarse pero le es imposible.

-¿Está herido?-

-Parece que solo está deshidratado-

-Bien súbelo al caballo y larguémonos de aquí antes de que anochezca-

Fue todo lo que Drake pudo escuchar antes de perder por completo el conocimiento. Los caballos galopaban toda velocidad, el sol estaba a minutos de terminar su turno y descender entre las altas colinas, la luna está noche no aparecería ya sea por naturalidad o por deseo de un extraño poder fuera del entendimiento de los jinetes.

Las luces de un pueblo comenzaban a brillar dando la bienvenida a los viajeros que uno a uno se detuvieron en la casa más grande, bajaron de los caballos y un par de hombres se encargaron de escoltarlos al establo donde descansarían a salvo, el resto se preparaba para entrar.

-Jack trae a nuestro invitado-

El sujeto realizó un movimiento con su mano derecha y el cuerpo de Drake comenzó a levitar dirigiéndose hacia la puerta, la casa hecha de madera era bastante cómoda, había algunos sofás rojos y una mesa de madera en el centro, algunos cuadros y cabezas de animales colgaban de las paredes, debajo una chimenea que permanecería apagada durante toda la noche a pesar del frío

Jack coloco a Drake sobre una silla, hizo algunos gestos con sus manos y llegó hasta él una cuerda que se envolvió de inmediato en Drake dejándolo inmóvil, el hombre había do terminado su trabajo pasó a sentarse en el sofá acompañando a sus compañeros, que estaban destapando una botella de licor y repartiendo el alimento que habían cargado.

-Por qué no le volamos la cabeza desde un principio-Dijo una mujer mientras se levantaba de su lugar con un vaso de alcohol en su mano

-No es precisamente mi estilo-

-Yo puedo hacerlo si es lo que te molesta-

-Por qué no traes algo de agua para nuestro invitado Abby-

-Lo haré pero el hecho de que seas el líder no significa que puedas darme órdenes Bill-respondió mientras caminaba a la cocina.

-Bien, Sam y Molly tomen la primera guardia los demás a descansar mañana será un día largo aún no hay nada que celebrar-

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