Russian Boy •Editando•

Capítulo 50

-Gracias, Marie. Realmente gracias por todo- Nelly agradeció al terminar de comer el último bocado de la comida que les había traído. James pasó su mano por mi muslo concordando con su madre.

-No hay de que- sonreí amable.

-Iré a hacerle compañía a Ashley- ésta informó antes de retirarse.

En el momento en que llegué, con lo primero que me encontré fue con la noticia de que Ashley ya había despertado de su estado de coma.

Esto había traído una oleada de alivio para todos nosotros.

-James- pronuncié.

-¿Sí?-

Nos encontrábamos solo nosotros dos en la sala de espera, lo que era perfecto para hablar del tema de la universidad.

-He sido aceptada en la universidad a la que solicité- dije sin nada más.

-Eso es una muy buena noticia, Marie- una espontánea sonrisa cubrió su rostro magullado. -¿Cuál universidad?-

-Es una universidad de Manchester-

Sus labios se abrieron para decir algo, pero estos nunca terminaron de formular ni una sola palabra, hasta a un par de segundos después.

-¿Manchester?-

Al caer en cuenta de que no iba a decir nada más, continúe a decir: -Necesitamos hablar de ello-

-Desde luego-

-Me iré a estudiar idiomas modernos a Manchester-

-Nunca me lo dijiste- frunció el ceño.

-Lo siento, se me pasó por alto-

-¿Cuánto tiempo?-

-¿Qué?- dije sin entender.

-¿Cuánto tiempo te queda en Londres?- interrogó

-Solo un par de semanas- ambas manos se deslizaban de arriba a abajo sobre mis muslos, tratando de calmar mis incesantes ganas de querer desaparecer. Él no decía o expresaba algo en lo absoluto y eso me exaltaba aún más.

-¿Seguiremos...?- alargó.

-Si- respondí sabiendo a que se refería.

-No me gustaría de esa manera-

-¿Qué quieres decir?-

No quería imaginarme que estuviera refiriéndose a que no podríamos seguir juntos cuando me fuera, eso me consternó, incluso llegaba a molestarme.

-No sé si podría estar con alguien que nunca estará- no terminaba de entender la inexpresividad de su rostro, ¿Acaso le molestaba?

-¿No hay manera de que puedas cambiar de opinión?- sus facciones se suavizaron levemente.

-¿Que estás queriendo decirme?- dudé -No, no hay manera de que me quede aquí. Todo ya estas más que planeado-

Un suspiro largo y pesado brotó de sus menudos y rojizos labios. Giré para observarlo, no obstante este nunca levantó su cara.

-¿Crees que haya alguna posibilidad de que tú puedas irte también?- bisbiseé.

-Tal vez sea difícil. Sabes mi situación- afirmé con la cabeza. -Sin embargo no sería una mala idea. Alejaría un poco mis problemas con Yeezus. Sería todo mucho más seguro-

-¿Lo intentarías?-

-¿Me ayudarías?- finalmente alzó su cara encarando la mía.

Mantuve el silencio por una largo tiempo antes de concretar mi respuesta. No tenía duda de que lo ayudaría solo pensaba que podría hacer.