Confesión

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Eran las 5:30hrs. Alex seguía dormido y me estaba empezando a dar frío.
Medio lo desperté para poder cubrirlo con las cobijas.

―¿Eres muy friolenta, cariño?

―Sí, perdóname por despertarte.

―Tú puedes despertarme cuantas veces quieras.

―Te amo.

Lo besé y volví a cerrar los ojos. El despertador sonó una hora y media después, pero no fue eso lo que me despertó.

―Buenos días, Elinor. Te traje el desayuno. ¿Cómo amaneciste?

―Dormí excelente, Lexy. ¿Y tú?

―También. Iré a ver a Ron. Hay algo que quisiera consultar con él.

―¿Es sobre la colaboración?

―Sí, pero también sigo intrigado con quién sería la musa de Bob.

―Alex, creo que eso no debe de importarnos. Bob lo dirá cuando sea necesario.

―Tienes razón. Solo veré lo del álbum.

―Te quedó delicioso lo que preparaste para mí.

―Te amo. Me tengo que ir.

Kapranos me besó y se fue casi corriendo.
Mi teléfono empezó a sonar. Era Bob, no sé para que me hablaría tan temprano.

―¿Qué pasó, Bob?

―Hola Elinor, ¿Estás ocupada?

―Iré a la disquera para ver a Jacqui, pero solo será una hora. ¿Por qué?

―Necesito hablar contigo. ¿Crees poder a las 10:00hrs en el café?

―Claro, solo dime, ¿estás bien? ¿Sucedió algo malo?

―No precisamente. Mejor solo ve al lugar y hablamos con calma.

Colgó y arreglé rápidamente mis asuntos con Jacqui. Últimamente nos hemos llevado mejor, tal vez porque ya superé a Laurence y ella se ha dado cuenta de sus verdaderos intereses.
Llegué al café con Bob, se veía muy elegante y casual a la vez.

―Hola, cuéntame que pasó. Cuando escuché tu voz en el teléfono noté tus nervios.

―No me pasó nada grave. Discúlpame por preocuparte así.

―Me voy a tranquilizar en lo que pedimos nuestras bebidas.

El mesero tomó nuestra orden y Bob me miraba algo nervioso.

"Muy pronto estaremos juntos, eso me hace tan feliz y tan miserable a la vez, porque no será por el hecho de amarnos mutuamente."

―Llevo años tratando de hablar sobre lo que siento y no puedo.

―¿Estás enamorado de alguien?

―Sí, pero parece un imposible estar con ella.

―Vamos, deberías decírselo. Yo creo que ella te aceptaría.

―El problema es que ella tiene pareja. Te contaré como conocí a la musa. Ambos trabajamos en la misma disquera. Ella adora mis trabajos como pintor. Se casó con mi jefe y justo cuando creí que era mi oportunidad para confesar todo lo que provoca en mí, ella empieza una relación con mi mejor amigo. No lo culpo, porque nadie sabe quién es. Solo tú, porque apenas estoy hablando sobre este tema abiertamente.

Franz of PleasureDonde viven las historias. Descúbrelo ahora