A la Luz

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Por fin mañana me dejarán volver a casa, luego que el doctor se fuera de mi habitación, me pase las siguientes horas llorando con mi madre y Abby.

- Lo bueno que no descansarán de mi - quise poner un poco de humor - estaré hasta el fin jodiendo sus vidas.

- hazlo las veces que quieras - dijo sonriendo Abby.

En ese momento mi madre caminó hasta la puerta de la habitación.

- Alan por fin llegó! - dijo con una sonrisa en su rostro - le diré que puede pasar.

Antes de hablar, mamá ya había salido a buscar a Alan, pero no quiero verlo.

- ¿Qué pasó? - preguntó seria Abby.

-¿con qué?

- Pues con Alan - dijo frustrada - hubieses visto tú cara cuando Lisa lo nombró.

Miré hacía mis manos, las cuáles estaban pálidas y una lágrima cayó al recordar la foto que me llegó en aquel mensaje.

- Aliciaaa.....

- Alan me engañó - dolía decir aquellas palabras.

-¡¿Qué?! - miré su rostro, no lo podía creer - ¿Qué rayos le pasa?

Empezó a caminar de un lado a otro.

- ¡Le dije claramente que cortaría sus partes si te hacía daño! - me miró a los ojos y continuó diciendo- ¡y juro que lo haré.!

Empecé a reír por las cosas que dice Abby, no se que haría sin ella. En ese momento Alan entró a la habitación y mi risa desapareció en el acto.

-¿Qué te pasó Alicia? - tenía una expresión temerosa.

De inmediato se acercó a mi lado como si nada hubiese pasado, me abrazó y sentí su cálido cuerpo, sintiéndome protegida por él.

Pero cuanto lo odio.

- Bien hermanito - dije seria, apartandolo.

Agradezco que mi madre este cerca de mi, por que sino Alan me haría un escándalo aquí mismo.

Alan me miró sin entender nada, traté de evadir su mirada, que estaba centrada en mi.

- Alicia lo siento mucho - dijo Alan tomando con delicadeza mi mano y un cosquilleo invadió mi cuerpo - Estefan me explicó todo.

Sin pensarlo lo miré a los ojos y no pude apartar la mirada, al ver sus lágrimas caer por sus mejillas.

- Estaré bien - dije en seco.

- Claro que lo estarás - dijo dulcemente Alan.

- Alan - interrumpió mi madre - ¿Donde estuviste todo el tiempo?

Me quedé en silencio esperando a que Alan le respondiera a mi madre.

- Tuve una Urgencia que hacer y mi celular se rompió - se excusó.

- Mamá, quiero descansar - no quería escuchar más las mentiras de Alan - mañana quiero estar perfecta para regresar a casa.

No me EnamoresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora