-Hola Vicky.-Dijo tímidamente, es raro que me diga Vicky pero está bien.
-¿Cómo estás? Si sabes que decidí adelantar el chequeo para esta semana, ya que tal vez haya una posibilidad que por las pasantías no pueda asistir a la otra.- Dije emocionada, ¿Por qué me emociona hablar con él?, Claro niñata, es alto, de ojos avellanados, ¿Quién no se derretiría?
-Bien gracias, así es, mi secretaria me aviso del cambio, ahora te tengo una pregunta, ¿Irá tu novio?-Dijo un poco inseguro, la verdad es que no sabía cómo se había enterado. Ah pues claro Victoria, la forma en la que te trato delante de él.
-Si estoy lista. Y no te preocupes, no irá, tiene cosas que hacer.- Le dije de manera amable, la verdad es que todavía resuenan en mi mente las palabras que Ignazio le dijo a Jose antes de salir del hospital.
-Bueno bonita, te veo mañana- Y se despidió.
No tarde mucho en caer en los brazos de Morfeo, pero fue una mala noche, tenía muchas pesadillas y todas acerca de Jose y una chica que no conocía, y eran terribles, pero en la última pesadilla, un chico cuya forma no lograba diferenciar tomaba en brazos y me alejaba. Era muy confortable.
Al día siguiente, luego de ir a la universidad me dirigí al hospital y llevaba todo el expediente por si preguntaba algo, aproximadamente tardo cinco minutos en atenderme
-Pasa bonita- Y me abrió la puerta de su oficina, la verdad es que no puse mucha atención estuve aquí, su oficina era impecable, todo se encontraba debidamente organizado, y el gusto para la decoración era sorprendente.
-Es agradable- murmuré.-Traje todo mi expediente clínico por si lo necesitabas.-Dije amablemente.
-Bien, te agradezco el haberlo traído, eso demuestra que eres buena abogada siempre con los documentos pertinentes a la mano, bien entonces, veamos cómo vas,- Dijo con una gran sonrisa, si señores ESA S-O-N-R-I-S-A.
Me hizo chequeo y todo parecía estar bien, tomó algunas hojas en su escritorio y me las mostró, en las primeras había resultados de análisis, los cuales indicaban que mis niveles de glucosa habían incrementado desde la última vez que nos habíamos visto y no corría peligro alguno ahora, pero la última hoja, estaba escrito a mano. Estaba escrita una nota con una caligrafía impresionante.
"Dulce chica, sé que llegue tarde, dame una cita, donde tú quieras, prometo no faltarte nunca el respeto eso va en contra de mi ética, por favor, solo es una cita, además quiero aclarar ciertas cosas contigo, pero no es nada malo, así que ¿Quieres ir por un delicioso té?"
Lo vi. La verdad es que quería hablar con él, no por nada malo, se nota que es un increíble chico.
-Entonces bonita, que me dices, solo pido una oportunidad- Me dijo sonriendo, como negarse a esa oportunidad y hermosa sonrisa.
-Bueno, con una condición- le dije chistosamente
-Sí, dime cual es- Dijo algo preocupado, hay Ignazio, reirás al saber mi condición.
-Que me lleves a Starbucks, muero por té de sabor a churro-Dije sonriendo, la verdad es que tenía muchas ganas de tomar eso allí, pero mi novio hermoso decidió ir por algo más elegante.
-Si eso pide tu corazón, con muchísimo gusto- Dijo riendo, lo sabía, le había causado gracia mi petición.
-¡Me parece!- Dije aplaudiendo, le agradecí y acorde con el que hablaríamos del día por teléfono y quede feliz, ahora solo faltaba contarle a mi novio lo que me había dicho de que estaba bien.
Salí de la consulta muy feliz, pero mi sonrisa se deshizo al recibir una imagen que resquebrajo mi corazón. Nuevamente era el número que había agendado como "DESCONOCIDO" y era Jose nuevamente con una chica, pero de cabello rubio, pero esta vez en una foto más comprometedora, ambos estaban abrazados. Debajo de la imagen estaba escrito un mensaje:
"Esta foto fue de hoy, chica, abre tus ojos, es por tu bien"
Me puse a llorar, y sentí unos brazos que me rodeaban y cuando eleve mis ojos llorosos, era Ignazio.
-Perdona, no quise incomodarte, pero ¿Por qué lloras?- Dijo Ignazio claramente alarmado.
-Ignazio, solo te pido un favor, el día que salgamos necesito hablarte de un asunto que me tiene dando vueltas en la cabeza desde hace unos días.- Dije aún mas nerviosa.
-Claro, estoy aquí para aclarar cualquier duda.- Dijo con esa hermosa sonrisa
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Mi doctor y yo
Roman d'amourQuien diría que una cita con el médico, cambiaría todo en mi vida, el cambió mi mundo de pies a cabeza. Puesto #76 en Romance 26/11/2016 Puesto #97 en Romance 29/11/2016