Pase lo que pase [DETENIDA]

Capítulo 2: El vestido negro

Una vez entré al depa y cerré la puerta, me dediqué a tomar un gran respiro; era mi forma de despreocuparme de todo, vivir a mi ritmo- hogar...- me quité los zapatos tirándolos a donde fuera- dulce...- rápidamente me quité el bolso y la chaqueta colgándola atrás de la puerta- hogar –terminé en un dulce tono de voz y en puntas de pie. Mi departamento no era para nada grande, tan solo tenía un dormitorio, un baño un living comedor y una estrecha cocina que usaba sólo los fines de semana; no todo era malo, porque a pesar de tener un depatan pequeño había un lujo impagable... la bañera, tenía una tina que resultaba ser el mejor lugar para meditar, cantar, llorar, etc.

-Vamos a comenzar...- me restregué las manos con suavidad, ya tenía todo planeado, el baño, depilarme, arreglar mi cabello, maquillaje, vestido, los tacos negros de todas las fiestas y listo. En medio de mi organigrama mental sonó mi teléfono, un mensaje.

"Adam está soltero y busca diversión... I'm just saying"

Reí al ver el mensaje, cada vez que Dev podía trataba de conseguirme una aventura amorosa. Antes de responderle fui al baño y di el agua, había que preparar la bañera

"Ya veremos... quizás se parezca a Vedder"

Me desvestí cuidadosamente en el dormitorio ordenando de inmediato mi ropa para hacer el tiempo de llenado de la bañera, até mi larga cabellera castaña en un moño alto y envolviéndome en mi toalla blanca fui hasta el baño- Una mordidita... una mordidita- me moví un poco recordando la canción de Ricky Martin y dejé de lado la toalla. Metí un pié primero para confirmar la temperatura- perfecta- murmuré mientras ingresaba con el otro pié y lentamente me acomodaba en la bañera- qué sería de mí sin ti... bañera amada- exclamé cerrando los ojos y reposando mi cabeza en uno de los bordes de la tina.

Tras pasar una hora al fin había terminado con el ritual del baño, ahora estaba cubierta con la toalla escogiendo mi ropa interior. Me decidí por un conjunto negro con delicadas aplicaciones de encaje que lo hacían ver femenino y elegante- perfecto- murmuré al mirarme en el espejo de cuerpo entero que tenía en una de las puertas del closet- definitivamente el vestido negro es el escogido...- abrí varias puertas de mi cajonera hasta que en el fondo de una de ellas había una caja con un vestido elasticado negro, tenía las mangas largas, escote profundo en la espalda y me llegaba hasta unos dedos sobre la rodilla, era un vestido que me había regalado mi madre para cuando finalicé el colegio. Me lo puse y entonces me encantó lo que vi- que guapa Andy- bromeé y lancé un beso al espejo para dar media vuelta, soltar mi cabello castaño e ir por el peinado y maquillaje.

Opté por una cola de caballo alta, no quería arruinar el escote de la espalda y me maquillé sobriamente, un delineado de ojos con lápiz negro, mascara de pestañas y bálsamo labial, ¿El resultado? Una guapa mujer de cabello castaño ojos café y labios rosa estaba lista para subir a sus tacos de diez centímetros, coger una chaqueta y esperar a Dev- ¿Hora?- murmuré mirando de inmediato al reloj de pared en la cocina. 21.30 de la noche, quedaban treinta minutos para la llegada de mi mejor amigo ¿Qué hacer entonces? El viejo truco, comer algo.

Me preparé un pan con jamón y queso, me senté en el sofá y cogí mi celular- la... mordidita- busqué en youtube y mastiqué alegre mientras sonaba la canción que hace un rato había recordado. Para cuando terminaba la canción y yo mi pan sonó el timbre, seguramente era Dev, abrí la puerta.

-woaa...- Dev abrió la boca y los brazos mirándome de pies a cabeza, tomó mi mano y me hizo dar una vuelta- estás estupenda, siempre sabes cómo impresionarme- Dev vestía un jeans oscuro con una camisa a cuadros en tonos naranja arremangada en los brazos, siempre era de ese estilo, tenía un sinfín de camisas a cuadros.