Vampire Academy (Un Nuevo Comienzo)

Capítulo 20

Día cuarenta.

Hoy es el día. Pensé

Robert me había dicho el plan hace semanas, este plan implicaba hacer que Lissa me temiera y robar el libro, había logrado ambas, solo que él no sabia que tenia el libro y no planeaba decírselo. Mitch realmente me había tomado por sorpresa el otro día y él se dio cuenta, ya que no volvimos a hablar de eso y él no intentó repetirlo, realmente sentía que era demasiado pronto y que una parte de mi aun esperaba estar con Dimitri. Mi corazón dolía cuando pensaba en todo lo que él me había dicho.

Hoy íbamos a ir a La Corte, a partir de hoy mi vida cambiaría, después de hoy comenzará mi nueva vida con Mitch y mi hijo. Él había escogido una casa que se encontraba en el bosque cerca de un del Lago Tahoe, Nevada. Mitch dijo entre mas lejos de La Corte, mejor.

-Vamonos, Rose - Mitch asomó su cabeza por la puerta de mi habitación -. Es hora.

Seguí a Mitch por el pasillo hacia las escaleras, vestía unos vaqueros negros con una camiseta blanca y una chaqueta de cuero negro, su cabello color arena estaba perfectamente peinado y su piel bronceada hace que sus ojos verdes resalten. Mitch es jodidamente atractivo.

-Vas vestido como un guardián - note -, no sabía que tú también irías.

Eso lo complica todo aún más. Pensé

Él puso su brazo en mis hombros- No te dejaría sola, Rose. Nunca.

Bajamos las escaleras para reunirnos con todos los demás, con la primera que me encontré fue con Alana, ella vestía igual que Mitch, a blanco y negro. Ellos no eran los únicos, la mayoría se encontraban vestidos como guardianes ya que era parte del plan. Hoy Lissa estaría fuera del castillo, ella y algunos otros estarían en el bosque porque se planeaba expandir La Corte y ahí será en donde los atacaremos, algunos de los nuestros se infiltrarían como guardianes para facilitar las cosas.

-Hora de irnos - Kirchner salió del estudio de Robert -, todos a las camionetas.

-Ellos se están tardando demasiado - dijo Miles, él también había venido y me imagine que a Robert lo había enviado para vigilarnos. El plan era que lo "guardianes" nos llamarían cuando Lissa y los otro estuvieran fuera de La Corte, así podíamos ir sin ningún problema. Aún no llamaban. -¿Como a estado Lily, Alana?

-¿Quién es Lily? - pregunte.

-Ella está bien - dijo para Miles y después se dirigió a mi - Lily en una Restablecida, al igual que nosotros y no debe sonar familiar el nombre para ti porque ella no esta con Robert,

-¿En donde está?

-Ella esta conmigo - Mitch me había dicho que Alana tenía un grupo de Restablecidos, y que después de esto Alana planeaba irse para estar con su grupo, no sabía mucho al respecto y justo cuando iba a preguntar el radio de Alana sonó.

-Todo listo - era Kirchner.

Los tres salimos de la camioneta e hicimos la caminata hacia el bosque, el camino era un poco largo pero afortunadamente cuando llegamos ellos aún estaban ahí, junto con varios de los nuestros, entre ellos Kirchner y Mitch.

Todo lo que había pasado en las últimas semanas se me vino encima.

¿Realmente esto esta pasando?¿Voy a terminar con todo hoy?¿Quiero hacerlo?¿Todo esto es real?¿Podría hacerlo?

-¿Rose? - me llamó Alana suavemente - ¿Estás bien?

-Claro que lo está - respondió Miles, en pocos días nos habíamos hecho amigos. Miles me extendió una pistola - Toma, ya sabes como usarla.

Di un asentamiento y comencé a caminar, Lissa se encontraba de espaldas hacia mi pero Dimitri no, sus ojos marrones se enfocaron en mí, su mirada reflejaba sorpresa, él sabía que no tenía nada que hacer aquí y no se imaginaba a lo que venía. Mi madre y Hans también estaban con ellos. Cuando me tope con la mirada de Dimitri me di cuenta de que esto sería más difícil de lo que pensé.

-¿Qué haces aquí, Rose? - Lissa se dio la vuelta en el momento en el que Dimitri se dirigió a mi.

-Rose, volviste - Lissa no parecía creerlo. Me acerque un poco más y Dimitri se posicionó delante de Lissa protectoramente. - Ella no va a hacernos daño, Dimitri.

-Te equivocas en esa parte - cargué el arma y apunte hacia ellos -. Vengo a acabar algo que comenzó hace tiempo.

-¿Vienen a matarnos? - preguntó mi madre.

-Si, tu no estabas incluida en mis planes pero podemos utilizar el; momento y lugar equivocado. - le dije

-¿Por qué, Rose? - preguntó Lissa, sentí el miedo a través del vínculo.

-¿Por qué? - repetí, incrédula - Por todo lo que me han hecho, no puedo creer que te parezca poco. Desconfiaron de mí, me mintieron y, si te parece poco todo lo que te he dicho, me torturaron.

-Y no sabes como me arrepiento de dejar que todo eso pasara. Pero todo esto es nuevo, no sabíamos lo que era y no podíamos ayudarte, ¿como esperabas que te ayudaramos si no sabíamos a qué nos enfrentamos? Entiende que nos equivocamos, pero lo sentimos y ahora que sabemos que es queremos ayudarte. Dejanos ayudarte, por favor, Roza.

Odiaba que sus palabras fueran ciertas, apenas hace poco yo me había enterado de que me pasaba. ¿Cómo podía esperar que ellos me ayudaran si no sabíamos que era?

-¡¿Cómo crees que fue para mi?! - le grité con lágrimas en los ojos - Me abandonaron en uno de los momentos más horribles de mi vida. Me traicionaron. La persona que creía mi hermana y el amor de mi vida. Nunca creí que fueran capaces de hacerme eso.

-Lo sentimos y te pedimos que vuelvas, podemos ayudarte. Investigamos y encontramos muchos casos como los tuyos. No te olvidamos, Rose, todo lo contrario, te amamos y por esa razón queremos ayudarte. - todos los sentimientos de Lissa eran de arrepentimiento, genuino arrepentimiento.

-No se si pueda hacerlo - les dije -. Dejen de confundirme.

-Es bueno que estés confundida, Roza, eso significa que nosotros aun significamos algo para ti. Te amo, Rose y no soporto estar un día mas sin ti. Te lo suplico, ven conmigo.

¡Ve con él! Gritaba una voz interior.....

....Y le hice caso.

Solté la pistola y corrí hacia los muy familiares brazos de Dimitri, inmediatamente me tomó sin dudarlo dos veces.

-Vámonos - les dijo Kirchner a los otros -. Vamos, Mitch, ella ya escogió su lugar.

-Llévame a casa - le susurré a Dimitri.

Lissa se acercó a nosotros, me abrazó y susurró

-Ya estás en casa, Rose.

Solo un comentario para esto:

¡¡¡Pobre Mitch!!!

Solo nos quedan dos capítulos y antes de terminar esta historia quiero hacer una última cosa. Un capítulo narrado por otro personaje.

¿Quien quieren que sea?

Dejenlo en los comentarios.
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