𝗘𝗟 𝗖𝗢𝗥𝗔𝗭𝗢́𝗡 𝗗𝗘𝗧𝗥𝗔́𝗦 𝗗𝗘 𝗟𝗔 𝗠𝗔́𝗦𝗖𝗔𝗥𝗔 || 𝐊𝐚𝐤𝐚𝐬𝐡𝐢

Parte 2

En cuanto Ayane terminó de acomodar sus pertenencias en el cuarto, miró el reloj que marcaba las 6:00 pm en punto. Le pareció que la hora era perfecta para salir a conocer la aldea. 

Ayane caminaba por las calles, observando todo a su paso. Hasta que alguien la sacó de su trance. 

¿?:  ¡Pero mírate, cuánto has crecido! - Decía aquella voz en un tono alegre- 

Ayane dio un giro sobre su propio eje y encontró al dueño de aquella voz. 

Ayane: ¡Jiraiya! ¿de verdad eres tú?

Jiraiya: El único, querida. 

Ayane: ¡Demonios! la última vez que te vi no estabas tan viejo. - sonreía- 

Jiraiya: Y tú no estabas tan bue....¿cuánto tiempo de eso? 

Ayane: -sonrojada- Veo que sigues siendo el mismo pervertido de siempre, sólo que ahora más viejo. Y bueno, de eso hace unos 15 años, tal vez. 

Jiraiya: ¿Cuántos años tienes ahora?

Ayane: 26, dentro de 2 meses cumpliré los 27, el 3 de abril para ser exacta. (cambien la fecha por la de ustedes :'v)

Jiraiya: Si que has crecido... ¿Te gustaría comer algo? Iba de camino por unos dangos, quizá quieras acompañarme.

Ayane: Claro, será un placer. Ahí podremos seguir hablando. 

En cuanto llegaron al restauran, Ayane y Jiraiya continuaban hablando, poniéndose al día acerca de la vida del uno y del otro. A la edad de 7 años, Ayane había quedado huérfana, unos ladrones habían atacado a su familia mientras caminaban por el bosque, cuando estaban por atacarla a ella, Jiraiya apareció y la salvó de morir. En cuanto derrotó a los ladrones, decidió que no la dejaría sola, así que estuvo con ella y la entrenó. Hasta que a la edad de 12 años, Ayane se separó de él por decisión propia. 

Jiraiya: Dime, ¿a dónde fuiste aquél día que decidiste irte de mi protección?

Ayane: bueno, es algo bastante complicado... Sólo diré que encontré una aldea bastante "extraña", dónde me recibieron y terminaron de entrenar hasta lo que soy ahora.

Jiraiya: ¿ A qué te refieres con extraña?

Ayane: Quisiera decírtelo, pero no puedo. No tengo permitido hablar de mi aldea. 

Jiraiya: -pensativo- Ya veo, entiendo a que te refieres con extraña. 

Ayane: -casi para si misma- no tienes una idea...

Jiraiya: Pero bueno, dime ¿qué haces en konoha?

Ayane: Eh, vine para servir de apoyo a la aldea, a Tsunade principalmente y para reunir o mejorar mis habilidades, así seré más útil en mi aldea. Aún no sé por cuanto tiempo estaré aquí. 

Jiraiya: Ya veo. Me alegra que estés aquí, será un buen hogar para ti. Estoy seguro que te llevarás bastante bien con el equipo que te asignen. 

Ayane: oh dios, no. No me agrada trabajar en equipo, me hes difícil interactuar con las personas, prefiero trabajar sola, espero que la Hokage confíe en mis habilidades y me deje actuar por mi cuenta...

Jiraiya: Dudo mucho que eso pase, para que eso suceda tendrá que ver tu desempeño en misiones de equipo. Entiendo perfectamente como te sientes, todo por lo que has pasado no ha sido fácil, no dudo en que te hayas endurecido un poco. 

Ayane: Creo que lo hice demasiado... en verdad, mientras menos contacto tenga con los demás, mejor. No soy de demostrar sentimientos, a veces dudo de detenerlos.