Capítulo 15:

10 3 0
                                    

7 de la mañana. El despertador no había sonado hasta esa hora pero él ya se había levantado hacía rato.

Minutos antes había intentado establecer la conversación que tendría con Sandra, como ayer. Desistió a la sexta vez.

Escuchó un sonido y creyó que sería el despertador pero era el teléfono.

-Amor, Tomas ha tenido un accidente- dijo María preocupada.

-¿Dónde estás?- Daniel se había alterado.

-En el hospital pero tranquilo, está estable- le tranquilizó ella.

-Cojo el bus y llego en un momento- afirmó cogiendo la chaqueta rápidamente mientras salía de casa.

Bajó hasta la parada del bus y encendió un cigarrillo. Hacía tiempo que lo había dejado pero necesitaba tranquilizarse.

El bus venía lleno. Se sentó en una de las sillas que quedaban libres. Una chica con mechas rubias le saludó desde el otro lado pero Daniel escuchaba música mientras iba metido en sus pensamientos. No la vio acercarse.

-Buenos días eh! Ya ni saludamos- dijo la chica mientras se sentaba a su lado.

Daniel se quitó los cascos y le saludó. No esperaba encontrarla allí.

-Sandra...¿Qué tal?- no sabía si la conversación que tanto había ensayado se produciría allí. No estaba de humor.

-Me he enterado de lo de Tomas e iba al hospital ahora mismo-hablaba calmada- aunque esperaba encontrarte ya allí.

-Yo me he enterado hace pocos minutos- dijo el chico sin decirle quien le había informado de lo ocurrido.

-¿Qué tenías tan importante que decirme?- preguntó su amiga.

Daniel se quedó callado. No iba a contárselo allí, así no era como lo había pensado.

-Creo que no es plan- dijo mirando para otro lado.

-Y la confianza que teníamos antes, ¿Se ha esfumado?- preguntó Sandra molesta.

-No es eso joder- Daniel empezó a alzar la voz. Le molestaba que dijera aquello- solo quiero ver a Tomas ahora.

- Bueno pues yo si te tengo que contar algo- hizo una pausa levantándose para bajar en la parada correspondiente, enfadada.

-¿ No ibas al hospital?- se extrañó Dani.

-Eso era lo que quería decirte. Me lleva Raúl, mi novio- se bajó del bus con paso firme.

Daniel no podía creer lo que acababa de escuchar. Aquellas palabras le dolieron más que nunca. No podía aguantar la presión que se acumulaba en su pecho. Ahora lo tenía claro, le gustaba Sandra y la quería de verdad.

Bajó del bus al llegar al hospital y se acercó a un lugar alejado del aparcamiento. El hospital quedaba situado en lo alto de la colina.

Se aproximó al borde del precipicio,cogió aire y gritó. Gritó como nunca antes, mientras notaba como la presión del pecho se hacía más pequeña. En ese momento, perdió el equilibrio.

stdmDonde viven las historias. Descúbrelo ahora