Han pasado dos días desde mi no charla con Chris. Sigue evitándome, y yo no sé qué hacer. Me siento confusa. Sé que en parte es culpa mía todo lo que está pasando, por el hecho de que no me hable y de que me ignore. Pero no sé cómo remediar todo esto. Soy demasiado orgullosa como para pedirle perdón por todo lo que le dije, y sobre todo por el hecho de que él no se disculpase por pasar de mí durante la semana posterior a la proposición.
Paul sigue con su coqueteo habitual. Se ha convertido en mi sombra desde la cena del día de mi llegada, y no sé cómo poder librarme de él. Chris sigue poniéndose celoso. Cuando empiezo a hablar con Paul por cualquier cosa, automáticamente él empieza a hablar con Becca para que ella le haga mimos. Es insoportable.
Las chicas insisten en seguir con el plan original de darle celos a Chris, pero no está dando resultado, porque Chris me está volviendo loca. Creo que debería cambiar de táctica, pero tampoco sé que hacer.
Como diría mi abuela Michelle, salgo de un embrollo para meterme en otro.
- Deberías volver a hablar con él – me dice Nat por enésima vez mientras tomamos el sol en el jardín.
Los chicos están jugando al fútbol en el prado, por lo que nos hemos quedado las chicas solas. Para mi suerte y felicidad, Becca no se ha dignado en aparecer hoy por aquí.
- Nat, ¿no ves cómo me evita? No quiere hablar conmigo.
- Has pasado los últimos dos días diciendo lo mismo – dice Charlie tras tomar un sorbo de su limonada.
- Y sigues como al principio – remarca Penny mientras pasa las hojas de su revista.
Genial, ninguna de mis amigas me entiende.
- Lena, te juro que nunca he visto a personas más cabezotas que tú y mi primo. – dice Mona incorporándose de la tumbona.
- Verdad – completan a la vez el resto.
- Alguno de los dos tiene que ceder en esto. Si no lo hacéis, estaréis en esta situación eternamente.
- No puedo estar así siempre. Quiero solucionar las cosas con él, pero no me lo está poniendo fácil.
- Suerte que hoy no está ni Barbie ni Ken para molestarte. – suelta Nat entre risas.
A Becca le hemos puesto Barbie como apodo por motivos obvios. Y a Paul se lo pusimos para completar a la pareja de pesados.
- Por cierto, hablando de Paul, ¿cómo es que no está aquí? – pregunta Charlie con curiosidad.
- Creo que tenía que resolver algo en el pueblo. No estoy muy segura. – le respondo.
- Jerry le ha preguntado y le ha dicho que no volverá hasta esta noche. – comenta Nat limándose las uñas.
- Aprovecha, tienes vía libre hasta esta noche para hablar con Chris. – me sugiere Mona.
Debería hablar con él hoy mismo. Si no lo consigo esta noche, lo mejor será que vuelva a Los Ángeles y me olvide de todo esto.
- Hablando de la noche… tenemos que hacer planes. – continúa Mona.
- ¿No vamos a ir a la fiesta de Sarah Vanderville? – pregunto extrañada.
Sarah Vanderville, vecina de Chris en los Hamptons y conocida mía en Nueva York, va a organizar una fiesta esta noche pre cuatro de Julio, y nos ha invitado a todos los de la mansión. Las fiestas de Sarah siempre se han caracterizado por empezar tranquilas y terminar de manera desfasada. Realmente me apetece pasármelo bien esta noche y olvidarme durante unas horas de mis problemas.
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St. Peter College
Romance¿Qué harías si tu novio te engaña con tu mejor amiga?¿Si tus padres se divorcian? ¿Si tu padre se vuelve a casar con la mujer con la que engañó a tu madre? Pues eso es lo que le pasa a Lena Williams. Tiene dos opciones para su último año en el insti...