♥Traición Mestiza♥ #Dramione

9. Serpientes VS Leones

Después del encuentro con Cormac, Hermione se sentía sumamente incómoda (a pesar de que sólo se lo había dicho a Ginny). McLaggen tampoco había contado nada sobre lo sucedido y se mantenía furioso con Granger.

—¿Qué quería Cormac anoche? —Le preguntó Ron a la mañana siguiente antes de ir a desayunar.

—Solo quería decirle que me deje en paz.

—Ah... entiendo.

—¿Qué entiendes? —Le preguntó Hermione, seria ante ese comentario.

—Bueno, que él es un idiota para ti.

—¿Y tú qué sabes quién es mejor o peor para mí? ¡Estás saliendo con Lavender Brown!

Ron la miró, parecía ofendido.

—¡Ella no es... no es tan idiota cómo crees!

—¿A no? Pues lo parece demasiado—Dijo Hermione con palabras que parecían espinas.

—¡Que no puedas encontrar el amor no significa que los demás tengan que ser infelices como tú! —Dijo Ron, enfadado. Hermione rio con un sarcasmo exagerado.

—¡Por favor, Ronald! ¡Sabes muy bien que no la amas y además tú empezaste diciendo que McLaggen era un idiota!

—¡Tú misma lo dijiste! ¿Ahora lo defiendes?—Remató el pelirrojo.

—¡No lo defiendo! ¡Solo... solo digo que te comportas como si fueses mi cuidador hermano mayor mientras que en realidad y muy en el fondo sabes que estás enamorado de mí! —Sentenció Hermione, mirándolo con extrema furia.

Ron pareció enojarse mucho más que ella, tenía las orejas coloradas y los ojos penetrantes como una fiera, y estaba a punto de contestarle pero Harry (por suerte) intervino.

—Hola Hermione, Ron, vamos al campo de Quidditch, falta una hora y media para el partido y repasaremos la estrategia, desayunaremos allí—Dijo Harry, aunque ni Ron ni Hermione parecían escucharlo, solo se miraban fijamente, como dos lobos salvajes dispuestos a atacarse.

—Está bien—Dijo Ron sin dejar de penetrar a su "amiga" con la mirada, y se marchó junto a Harry por un camino diferente.

Hermione bajó enojada al Gran Comedor y desayunó unos pastelitos de canela junto a Ginny, y pese a que la pelirroja le preguntó que qué le pasaba, la castaña no quiso contarle nada acerca de la discusión que tuvo con Ron, ya que era su hermano.

—Si es por McLaggen no te preocupes, no ha dicho nada sobre que te besó, quedaría humillado si se enteran de que lo golpeaste—Le dijo Ginny mientras tragaba rápidamente un trozo de tarta. —¡Nos vemos, Mione! Tengo que ir al campo de juego, estoy llegando tarde—Y la menor de los Weasley se levantó y desapareció por la puerta, ignorando los abucheos de los de Slytherin.

Los segundos de tranquilidad que tenía para desayunar no duraron demasiado.

—¡Y ahora...—Dijo la voz de Malfoy—...brindemos por la nueva pareja de leones: la sangre sucia y el rechazado por el equipo de Quiddicth! ¡Granger y McLaggen! —Contó en voz alta mientras sus amigos se partían de la risa.

Hermione, que había contenido la rabia desde el beso con Cormac y su pelea con Ron, se levantó bruscamente y corrió hacia la mesa de Slytherin, donde apuntó a Malfoy (que estaba con el uniforme de Quidditch, ya que él era buscador) y lo apuntó con la varita. Draco puso primero cara de incredulidad, pero pareció más asustado cuando vio la furiosa mirada de Hermione.