Capítulo 35 FINAL.

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—¿estas segura? —pregunte por décima ves.
—claro que si Aiden, esta casa es hermosa —dijo Paula con una gran sonrisa.

Sonreí al ver como ella daba vueltas en la habitación.

—bien, entonces esta decidido nos mudaremos aquí —dije con una sonrisa.

Hace una semana que había pasado el incidente de Edward y ahora tomo marchaba ala perfección, deje el negocio y se lo encargue a Dylan para que siguiera con el trabajo, lo admito extrañaba mi trabajo pero me importaba más estar con Paula y disfrutar cada momento juntos.

—¿entonces esto es lo que quieres? —pregunte tomándola de la mano.
—claro, una vida normal —dijo con una sonrisa.
—muy bien, tienes que prepararte mañana es tu primer día de clases —dije nervioso.

Tenia que controlarme para no decirle a Paula que se quedara en casa leyendo algún libro o algo por el estilo.

—si alguien se propasa contigo me lo dirás ¿verdad? —pregunte serio.

Paula río y me abrazo de una manera tierna como solo ella sabía hacerlo.

—ese es el Aiden que conozco —dice con una sonrisa tímida.

Afirmó con la cabeza y la tomo de la cintura para fundirnos en un apasionado beso, muerdo su labio inferior y bajo mis manos hacia sus glúteos para apretarlos contra mi.

Gimió en voz baja y eso encendió algo dentro mi.

—ven conmigo —susurre en su oído con voz baja.

Paula asintió y la tome en brazos hasta nuestra habitación, con sumo cuidado acaricie cada centímetro de su cuerpo y deposite besos en cada parte de su cuerpo.

Ella gemía en respuesta y lograba escuchar una vaga pronunciación de mi nombre, me desvesti rápidamente y entre en ella de forma suave pero firme.

—ah —Gimió Paula mientras se sujetaba de mi brazo.

Cada embestida que daba la disfrutaba gratamente, hacer el amor con Paula no tenía comparación, nunca me cansaría de ella, jamás permitiría que ella se fuera de mi lado.

—Aiden —grito con fuerza cuando los dos llegamos al borde del climax.

Nuestros pechos subían y bajaban de manera rápida y yo solo podía sonreír al ver a Paula cerrando los ojos.

—te amo, gracias por llegar a mi vida —dije en susurro.

Acaricie su cabello pero ella seguía durmiendo plácidamente, sus labios se encontraban ligeramente abiertos así que deposite un casto beso y la tome en mis brazos.

Sentía una felicidad en mi pecho que no podía explicar, sabía que Paula era la responsable de tal sentimiento, ella había iluminado mi mundo de una manera que ella quizás jamás logre entender, me hizo creer en el amor y saber que no estaba solo, que ella siempre estaría conmigo a pesar de todo.

—gracias Paula —dije en su oído mientras deposite un beso en su cabello sedoso.

Fin.

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