Capitulo 10: La ida.

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-Al –Dijo al fin aliviado después de llamas 5 veces y que ella no haya contestado, pero a la sexta contesto. – Dónde estabas? Porque no me atendías?

-Estaba dormida

-Son las dos de la tarde Alma, uh sos re vaga –Rio Paulo mirando la hora en el reloj del living.

-Sí, me re dormí igual tampoco –Bostezo- Me despertaron los chicos

-Fíjate por ahí estas sola

-Sí, ahora me voy a fijar

-Te extraño –Soltó.

-Yo también te extraño Pau -Sonrió.

-Tengo muchas ganas de verte, pero en mi casa no se puede...

-Veni a casa –Dijo y después lo pensó- Bue casa, o sea acá, vos me entendes

-A casa? –Rio- me podría interesar eso sabes?

-Ah si?

-Si, muchísimo, puede ser que ahora agarre las llaves , o tal vez ya la tenga en mis manos y este abriendo la puerta para subir a mi auto -Se escuchó el sonido de la puerta- y te voy a pedir que me digas tu dirección viste porque todavía no sé bien donde es...

Alma sonrió, no sabía por qué, pero Paulo le generaba algo raro y lindo a la vez, aunque no quería dejarse llevar tanto por su pareja. Se dio cuenta que volvieron como si nada hubiera pasado, como si la última vez que se vieron no pasó nada igual lo prefería así.

-Y tus amigos? –Pregunto cuando le abrió la puerta, no sin antes darle un beso.

-Se fueron a pasear, ni idea, eso decía la nota del frízer –Sonrió.

-O sea que estamos solos? –Pregunto.

-Sip –El la beso.

-Te quiero tanto –Ella sonrió, a pesar de todo el sabía cómo hacer para hacerla feliz.

Toda la tarde estuvieron solos y solo se la pasaron hablando

Toda la tarde estuvieron solos y solo se la pasaron hablando

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Paulo le robaba besos, que pedían a gritos ser robados.

-Me encantas tanto –El le dijo acostados en la cama de la joven.

-Basta me haces sonrojar –Escondió la cara en su cuello.

-Me encanta cuando te sonrojas –La tomo de las mejillas- Alma te amo –Ella lo beso.

-Yo también te amo

***

Entro a su casa y no había nadie, Antonella debe estar durmiendo –Pensó. Mejor para él.

Se tiró en el sillón recordando la maravillosa tarde que tuvo con Alma, y la forma que lo recomponía, era como un descanso del jugador y podía ser el tranquilamente. Salió de sus pensamientos por un mensaje que recibió de la joven preguntando si había llegado bien y el le respondió que si mientras iba a cargar la nueva foto de Alma en WhatsApp, una vez que cargo se quedó mirándola como un tarado

Offside || Paulo DybalaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora