CAPITULO 25

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Me quede ahí en la escalera llorando, mirando como mamá consolaba a Valeria, como trataba de consolarse a sí misma, a su corazón roto, acababa de perder al amor de su vida para siempre, si es que en algún rincón de su ser ella conservaba la esperanza que algún día él vuelva a nosotros, a ella, ahora era imposible, se había ido para siempre.

Cuando me miró y me llamo con gesto de su mano, casi sin fuerzas para que me uniera a ellas, así también pudiera consolarme a mí, me negué con la cabeza y subí corriendo a mi cuarto cerrando la puerta al entrar y me derrumbé en mi cama. Todo esto era mi culpa. Como iba a poder vivir con esta carga el resto de mi vida? Le había deseado la muerte a mi propia sangre! Había perdido a mi papá! Era demasiado para poder soportarlo, el dolor era físico, sentía que alguien estaba sentado en mi pecho aplastando mi corazón y no me dejaba respirar. Era un nudo en mi cama que no dejaba de llorar cuando mi puerta se abrió y Lucas estaba delante de mí con Roma en brazos preguntándome que me pasaba. No podía.... Solo mire sus ojos mientras seguía llorando y no podía, tenía delante mío a mi hermano de tan solo 4 años, que nunca iba a tener a su papá para que le enseñe a jugar a la pelota, que lo vea izar la bandera, que le hable de mujeres, Lucas ni siquiera se iba a acordar de papá en unos años... No podía!

_ MAMAAAAAAAAAAAAA!!!!!- grité con las pocas fuerzas que tenia y tragando mis lágrimas, grite tan de repente que Lucas se asustó y tropezó con la silla cayendo al suelo, mientras Roma salía corriendo.

Mamá llego corriendo no sabía qué pasaba.

_ Mamá, no puedo, no puedo... yo no puedo... tu... tu... tú eres la madre.... Yo no puedo.- y continúe llorando mientras me hacia un ovillo cada vez más chico en mi cama.

_ Esta muy enferma mamá?.- Preguntó Lucas.- Le duele mucho su pierna?

_ Ven amor, vamos a mi cuarto, tenemos que hablar, si?.- dijo mamá llorando y se lo llevo, dejándome sola y cerrando la puerta al salir. Al escucharlos partir el dolor fue cada vez peor, me imagine a mamá explicándole a Lucas lo que significaba que papá nunca más iba a volver, me imagine su pequeño rostro confundido, lleno de lágrimas, y pude sentir el dolor de una madre diciéndole a su hijito que su papá se había ido al cielo, no....no.... ellos no deberían pasar por esto... porque... fui yo por desearle la muerte...fue Sofía por apurarlo a volver... fue el destino... fue dios...vale la pena culpar a alguien? Va a hacer que este dolor se vaya que sentencie al acusado?

Ese día nadie me consoló, pero no puedo culpar a nadie, mamá tuvo que encargarse de muchas cosas, cosas horrendas. En cuanto mamá se fue a hablar con Lucas, Valeria corrió a los brazos de su amiga Lourdes, y por supuesto ella estuvo ahí para consolarla, pero yo no tenía a quien llamar, Ezequiel no estaba y mi celular estaba roto como para hablar a Micaela.

Más tarde en el día César y la Sra. Posse fueron los que llevaron a mamá y Valeria al lugar del accidente de donde había que recoger las pertenencias y hacer el papeleo para trasladar el cuerpo, no quiero ni imaginar lo que debe haber sido ese viaje. Y aun teníamos que organizar un viaje para el velorio. Volver a buenos aires para reencontrar a tu familia en un entierro, y todo por mi culpa.

Mientras armaba los bolsos, miraba a Lucas no dejaba de sentirme mal por haberle quitado a su papá. Que había hecho? Como pude borrar todos los buenos momentos que pase con él solo por la persona que eligió tener a su lado? Ezequiel ya me lo había hecho ver una vez, y no aprendí la lección, tenía que pasar esto para que lo perdone? Me derrumbe nuevamente y caí en mis rodillas llorando y diciendo constantemente:

_Te perdono papá, te perdono, por favor papi...por favor... por favor volvé... que esto sea un sueño... PERDOOOON.- y ahogada en mis lágrimas no me di cuenta que Lucas me abrazaba desde mi espaldas llorando también.

Una mirada al amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora