Skater Y Tatuajes.

XIII

-Allison... -murmuro mientras su cabeza estaba apoyada en el pecho de la mayor.

-que pasa? -pregunto mientras jugaba con el cabello de Giana

-es malo el estar enamorada de una chica? -pregunto dibujando círculos imaginarios en la pansa de Allison.

-no lo es-susurro. Allison amaba acostarse con Giana.

-entonces porque esa señora decía que somos asquerosas? sera por el suéter de tela de color rojo?

Allison negó -tus suéteres son lindos.-dijo bajando un brazo a la cintura de la chica. -ella solo lo dijo por envidia, ellas solo son viejas chismosas están solas y parecían odiar todo a su alrededor.-Giana hizo una mueca.

-entonces no esta mal que te ame?-pregunto elevando su vista para observar los ojos grises de la mayor. Allison volvió a negar.

-tu puedes amar a quien quieras. no importa el genero edad o tamaño. no hay restricciones ni normas que te impidan amar.-dijo acariciando la cintura de su novia

     (....)

-se puede saber en donde has estado?- pregunto la madre con un tono cabreado al ver entrar a su hija tan tarde, sentada en el sofá con el papa y ceño fruncido. Algo andaba mal.

-estaba en la casa de Giana que hacen ustedes en casa? Hoy es martes .- Respondió confundida era bastante raro ver a sus padres en casa un día entre semanas.

-siéntate -dijo el padre señalando el sofá que esta al frenar de ellos.

-pasa algo malo?-cuestiono la menor observando la seriedad en los rostros de sus padres.

-no cariño, todo lo contrario. tenemos muy buenas noticias! -hablo la mujer cruzándose de brazos -tu padre y yo nos han ascendido!-exclamo finalmente con entusiasmo

-ah que bien... eso es todo? porgue estoy cansa-

-y eso no es todo...- interrumpió el hombre para que la mujer lo completara.- nos mudaremos!

Allison se acomodo en el sofá y pregunto.-se mudaran? que bien les deseo feliz viaje. - dijo con una sonrisa mala.

- mudarnos tu también te vienes con nosotros.-la corrigió-ya tenemos tu instituto nue-

-que?! yo no quiero mudarme, mama, papa! -Allison los miro con una mirada suplicante.

(sus padres hablan en serio?!) ella no podía mudarse, no podía, menos ahora. ella no podía dejar todo de un día para otro, todo, todo lo que ella había alcanzado acumulado será en vano.

-hija es una buena oportunidad para nosotros y para ti.-dijo con calma la mujer, intentando apaciguar a la  chica.

Allison se rasco la nuca, sin saber que decir.-pero que hay de Giana?...

la madre rodó los ojos y explico.- no tienes que preocuparte por ella, ambas son adolescentes, los adolescentes se olvidan de todo en cuestión de segundos.-aseguro la mujer, mientras Allison cerró los ojos y mordía su lengua para no comer a su madre de la impotencia que tenia.-ya veras que con el tiempo podrás hacer amigos y esas cosas.

-no quiero amigos, ni esas cosas.-gruño y el hombre dio un suspiro.

-es muy linda y todo pero ya esta tomada la decisión Allison. no me interesa si te gusta o no. tienes una semana para hacer tus maletas.- hablo el padre de la menor después de levantarse de golpe de su lugar, cansado de toda la escena. Allison quiso reclamar pero su padre la interrumpió. - sin peros anda a dormir.

la menor no dijo nada, simplemente miro hacia el suelo con una mezcla de angustia, enojo, impotencia y tristeza. froto sus ojos para darse cuenta de que no estaba soñando. y conocía a sus padres cuando se trata de trabajo hablan en serio y ella no podía evitar que cambiaran de opinión.

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Allison daba vueltas alrededor de su habitación quería gritar, quería llorar. se sentía frustrada.

lo que mas le preocupaba era Giana, no quería decirlo, no quería ver el rostro de la chica una vez se lo dijera. no quería decirle, pero tampoco podía desaparecer así sin mas. tenia miedo, miedo de perderla, de que la distancia las separara.

Allison temía al dejarla sola a Giana, porque a diferencia de ella, la menor no sabia como sobrellevar la soledad. no podía imaginar estar sin la chica.

la mayor nunca se imagino que ella dependería tanto de una chica, que se preocuparía tanto por una persona. quizás no debería haber hablado con Giana en un principio, simplemente, si la hubiera ignorado o destratado como las preocupada en esos momentos.

ella siempre había aparentando ser de esas flores con espinas, subiendo muros, para mantener alejadas a las personas. usando ropas negras, llevando tatuajes, piercing escuchando musica pesada para no escuchar a los demás. había logrado pasarlo bien.

no creyó que llegaría un día una persona que cortaría sus espinas o derribar los muros puestos por ella y lograra hacerla sentir cómoda con su compañía que estando sola, generándole nuevos puntos de vista, enseñándole a ser menos gruñona y mas respetuosa, enseñándole a valorar las cosas.

sin embrago. ahí estaba debatiendo que hacer.

no sabia decírselo, no podía pensar en que palabras utilizar. simplemente no se imaginaba como reaccionar. Gruño por la angustia.

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la de los tatuajes tomo una bocada de aire antes de tocar  la habitación de Giana.

dio dos golpes y espero unos segundos, antes de abrir la puerta.

-hola- dijo Giana con su clásica sonrisa.

Allison no dijo nada, simplemente sonrió y se acerco hasta ella para abrazarla.

-hola -finalmente respondió con melancolía contra el oído de la chica.

-Ali? -murmuro la menor al ser abrazada por los brazos de la mayor de una manera protectora. Allison no quería soltarla.- pasa algo?-pregunto preocupada, al notar la rara actitud de su novia.

la mayor finalmente se separo observando la mirada preocupada de Giana.- tenemos que hablar...-dijo con la voz temblorosa, no quería preocupar a la menor, simplemente no sabia como decirle.

-que pasa? estas rara.-pregunto observando las ojeras por debajo de los ojos de Allison.

-yo... -Allison tomo las manos de Giana. -me voy a mudar a otro país.

-te vas.. -Allison asintió con una sonrisa ladina y sus ojos vidriosos.- a mudar?

-si, ascendieron a mis padres. Te juro que yo no quiero irme, pero no tengo opción. yo me quiero quedar contigo.-Giana meneo la cabeza hacia los lados negando

-en-entiendo -dijo y Allison la abrazo, murmurando un "lo siento" contra su oído. Giana tenia su cabeza apoyada contra el pecho de la chica y Allison la abrazaba fuertemente, rodeando su espalda.

-perdón.-susurro la de los tatuajes quien intentaba contener las ganas de llorar que sentía en ese momento.-no puedo atarte a estar con alguien a quien no podrás tocar todos los días. no quiero que sientas que no puedes hacer cosas por mi, no quiero limitarte.

-no me importa que lo hagas, esperare. no quiero perderte.-hablo aferrándose a la ropa de la mayor.-la distancia no sera un problema Allison.