La clara diferencia || Osomatsu-san

Capítulo 3

Nota: He dividido el fanfic en cinco capítulos, tendrán otras dos dosis de ChoroIchi. Esto  lo he hecho por cosas un poco personales.  -El adelanto del anuncio anterior es del último capítulo-.

Agradezco a Fer Vielma por su ayuda para el inicio de este capítulo.

Eres la mejor, alma gemela.

¡Advertencia!

La historia puede llegar a ser incómoda para personas que no estén de acuerdo con las relaciones amorosas entre hermanos. El fanfic contiene relaciones sexuales, que si bien no acaparan toda la historia, ocupan un lugar importante dentro de ella.

Recomiendo que, si no eres de este tipo de gustos (si es que vienes a juzgar los proyectos de otros), cierres el fanfic, que desde sus inicios dio una insinuación amorosa entre los dos hermanos.

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Capítulo 3

—No... No tienes que seguir porque crees que tienes que ocultar la verdad. —Ichimatsu puso mala cara. —Sé qué piensas que soy un asco por haberte dicho que me besaras en primer lugar, y que te sentiste obligado en regresarme el beso sólo por "no querer lastimarme". Pero no necesito la compasión de nadie, Choromatsu—niisan. Así que por favor, si vas a besarme sólo por compromiso... aléjate de mí. —Choromatsu sólo lo vio incrédulo y asintió sin más. En realidad nunca habían pasado esas ideas por su cabeza, y se sentía disgustado con Ichimatsu por hablar así sin más.

—No. No me siento así, y no pensé de esa manera. —Se puso de pie y le miró desde arriba. —No sé por qué lo hice, no tengo ni la más mínima idea del por qué te besé. Pero se siente jodidamente increíble, sólo he pasado el rato pensando que quiero volver a hacerlo al llegar a casa, y sonaré como un maldito pervertido, y lo soy, pero realmente estoy ansioso por besarte de la misma manera sobre esta banca. —Ichimatsu sólo le miró por unos segundos un poco impactado. —Así que... deja de decir que lo hago por compromiso. Deja de pensar que creo eres una basura. Joder, sólo dejémonos llevar esta vez sin tener que partirnos la cabeza. Ni tú ni yo sabemos el por qué sucedió. Pero si es bueno para los dos,... si los dos simplemente nos enamoramos de eso, entonces está bien, ¿no?

Choromatsu

—Choromatsu-niisan... yo... —Me miró anonadado. Y yo también lo estaba. Había dicho las cosas sin pensarlo mucho, sin creer que podría desencadenar muchos sentimientos en mi o en él. Pero no importaba ya, quería pasar mis tiempos con él. Un beso en una noche no era suficiente para mí en estos momentos. El simple hecho de pensar que sería algo de un rato de curiosidad me hizo sentirme furioso, ahora quería esos besos cada maldita noche. Ichimatsu miró a sus lados nervioso y con un leve rubor en sus mejillas, volteo a verme y abrió su boca para decirme algo, pero no lo hizo, simplemente volvió a cerrarla. Miró al suelo y comencé a ponerme ansioso. No tenía si quiera idea de la respuesta que yo quería escuchar. Ichimatsu chasqueó su lengua como de costumbre y cuando levantó la mirada hacia mí no esperé más.

Tenía tantas ganas de besarle de nuevo, que ni siquiera pude esperar una respuesta después de los eternos segundos de silencio que me dedicó. Le apretujé contra la pared y comencé a depositar besos en sus labios como un loco desesperado y él ni siquiera se molestó en alejarme, en vez de eso, deslizó sus manos por mi cuello, entrelazando sus dedos con mi cabello. Siguió mis besos en un ritmo calmado, haciéndome sentir extraño, pero... bien. El problema era que teníamos que llegar pronto a casa. Me separé un poco de él, para mirarle y sonreírle. Esta era la única forma de aceptación que necesitaba. No palabras, sólo un beso.