Sun and Moon

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Escuche que Naruto regresó hoy en la mañana a Konoha-comento Kiba mientras acariciaba el pelaje de Akamaru.

N-Na-Naruto-Kun regresó?!!-preguntó la joven Hyuuga mientras se sonrojaba-Q-Quiero verlo...-esto último lo susurro, como si hablara para si misma.

Hmp Ojala pudieras, Naruto de seguro va estar con el Uchiha, ese chico siempre ha estado acaparandolo todos estos años-soltó un gruñido de molestia al final el Inuzuka.

FlashBack...

Un rubio miraba de lejos al grupo de niños que jugaba en el parque cerca de un bello estanque en donde patos y gansos nadaban tranquilamente. Este se encontraba un poco distanciado junto con un azabache que disfrutaba del sabroso tomate y Onigiris que su Oka-San le había empacado en la cesta de Picnic. Nuestro Kitsune comía el Ramen casero de Kushina, quien había ayudado a Mikoto con la cesta, mientras seguía observando a los otros niños jugar con un perrito de pelaje blanco llamado Akamaru.

Sucede algo Naru?-preguntó el ojinegro al notar que su Dobe tenía la mirada puesta en esos niños.

No-dijo volviendo su mirada al delicioso platillo de la pelirroja, Sasuke sonrió al notar que el Uzumaki se estaba acostumbrando a estar solo con él ya que en otras ocasiones se escapaba para jugar con los Hyuuga o con el Inuzuka, y no es que fuera posesivo ni nada pero prefería que estuviera solo con él.

Pero no era posesivo.

O al menos eso pensaba cuando tenía 10 años, aunque ya había demostrado serlo en varias ocasiones.

Kiba había notado a la pareja que al parecer tenía un día de campo debajo de un enorme roble que les brindaba una sombra extensa y debido a la posición del árbol, un lugar tranquilo y quieto.

También había cruzado miradas con el rubio y notó la ansiedad de este por unirse al juego.

Pero ya sabía que el menor no iría a ningún lado por culpa del Uchiha. En veces el Uzumaki llegaba al barrio Inuzuka para jugar con el y con Akamaru, Kiba disfrutaba la compañía del energico rubio y pasaban horas y horas jugando, hasta que llegaba Minato u Obito para recoger al menor.

También visitaba el barrio Hyuuga con su Otou-Chan, ahí jugaba con Neji e Hinata mientras el Namikaze bebía té y conversaba con Hiashi.

Por eso, conociendo lo social y activo que era el rubio, le entristecía que se viera restringido por el Uchiha.

Pero algún día jugarían libremente.

Fin del FlashBack...

Aunque ya estaban grandecitos para juegos, Kiba sabía que el Kitsune era fácil de tentar, podría retarlo a una carrera o a un combate de Taijutsu.

El chico perro sonrió ante la idea.

Pero luego recordó que Sasuke ya debería estar con el rubio.

Acaparandolo como siempre.

Soltó otro gruñido de molestia, mientras que Hinata pensaba en ir a ver a Naruto.

Shino no dijo nada, a pesar de que estaba de acuerdo con Kiba de que el Uchiha acaparaba al Kitsune, conocía la razón por la que lo hacía y la respetaba.

De todos modos no es fácil encontrar-comentó al aire dirigiendo su mirada al cielo, confundiendo a sus compañeros de equipo que le miraron con duda.

Mientras tanto con Sasuke y Naruto...

El pelinegro estaba punto de juntar sus labios con los de su amado Kitsune cuando...

Naruto cuanto tiempo-saludó una pelirrosa que se acercaba a la pareja junto con Ino Yamanka. El mencionado volteo a ver de donde provenía el llamado y se encontró con un par de esmeraldas que le miraban con aparente ternura, Sakura sabía que el Uchiha sentía algo más que amistad por el rubio y no podía evitar estar celosa del Uzumaki.

El bebé de MinatoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora