CAPÍTULO 58: DUELO MÁGICO

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El auto se apartó a unas cuadras atrás, más allá del horizonte se podía ver dos autos estacionados con dos hombres allí. Eran Damián y Peter esperando a los muchachos. Sebastián les mandó un mensaje diciendo que se alejaran más del lugar junto con los autos y se quedaran allí hasta que todos salieran.

Austin susurró al oído de Sebastián que al menos uno de ellos lo ayudara porque no eran suficientes contra todos los que habría dentro. Peter se ofreció para acompañar a Austin y ser una dupla que entraría por la parte delantera. Jacob y Amber se juntaron también para dar un círculo en todo el instituto y tirar el primer objeto mágico.

- Bueno tú irás conmigo, cero bullying lo prometo- dijo sarcásticamente Sebastián a Matías.

Matías forzó una sonrisa.

Austin y Peter se llevaron la ballesta con las 5 flechas, Jacob le explicó cómo tenía que hacer que funcionara. Jacob y Amber se llevaron el botón que hacía dormir a todos a su alrededor. Y Sebastián con Matías la pulsera de invisibilidad de 10 minutos. Damián los esperaría con el auto para huir. Todo estaba perfecto.

- Tenga cuidado, cualquier cosa. ¡Gritan!- dijo el líder Sebastián animando al resto que se hallaba impaciente de poder realizar la acción.

Los primeros en desaparecer fue Jacob con Amber caminando en cuclillas para primero despistar el lugar. Sabían que sí veían una nube blanca debía correr automáticamente para que el efecto no los dañara.

- Carajo se demoran tanto para tirar el botón de mierda- dice Sebastián a Matías.

- Mira por allá hay dos guardias- señala Matías escondidos detrás del auto de Damián.

Austin y Peter estaban más alejados escondidos por unos árboles, señalaron que también más allá había personas, al parecer correteaban a Jacob y Amber. De pronto, una nube blanca empezó a cubrir los alrededores del instituto. Era la señal de que todos los guardias ya los habían visto y los perseguían.

- ¡Bien! Ya es hora- grita Sebastián a Austin.

Austin y Peter ingresan por la principal entrada, el otro grupo por la parte trasera. El humo blanco va acercándose hasta Matías y Sebastián que no llegaban todavía hasta la puerta.

- Creo que no llegaremos, me estoy durmiendo- dijo Matías arrastrando los pies y Sebastián tocia.

Sebastián tuvo una idea y esperó a que funcionara. Hizo dos golpecitos en su muñeca donde llevaba la pulsera y automáticamente una capa invisible los cubrió, haciendo que el humo blanco no los chocara y menos los hiciera dormir.

- ¡Qué genio!- vociferó Matías- Por primera vez pensaste.

Damián desde a fuera se encargó de jalar los cuerpos soñolientos de Amber y Jacob para colocarlos en el auto.

Dentro...

- Ya quedan pocas horas para que tus amiguitos se decidan- dijo Benjamín con una navaja mojada en el aire.

- ¡Cuándo te rendirás! ¡Déjanos vivir!- dice atada a una silla con grandes cuerdas al redor de su cuerpo- No es posible que hasta ahora sigas con esto, Benjamín- exclama Flavia.

Se oye los gritos de ayuda de Amil.

Benjamín sigue concentrado en la navaja que alza con los ojos en el aire.

- Es tan gratificante tener poderes, no lo sabes. Y más gratificante hacerlos sufrir.

Flavia escupe en su rostro como hace un tiempo lo hizo.

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