Imposiblemente posible [Príncipe Harry fanfic]

Capitulo 38

Una semana pasó y con Harry sin viajes largos o discusiones ¡la vida familiar era una delicia! Incluso estábamos planeando pasar todo enero en mi casa en Argentina con mi familia ya que Georgiana acabaría sus estudios como pupila en Escocia poco antes de año nuevo.

Yo me encontraba tejiendo una bufanda azul eléctrico que Philip necesitaba para una obra teatral de la escuela mientras Harry estaba organizando por mensajes con sus amigos para un partido de polo a beneficencia de una fundación que tenia con William mientras mirábamos TV.

Una de las panelistas del programa que estábamos viendo dijo algo como "realmente son fuertes las fotos que tenemos de la Duquesa" –como ellos me llamaban despectivamente.

Yo: ¿Qué fotos? –Le pregunté a Harry-

Harry: Ni le des importancia, seguro alguna foto de esas con photoshop de broma

Yo: Eso espero –Dije haciendo a un lado la bufanda a medio tejer-

Todos comenzaron a hablar de lo arpía que era y de que no entendían que Harry, que era tan dulce y adorable, pudiese permanecer en un matrimonio conmigo por diez años y luego lanzaron al aire un montón de fotos de Tom y yo tomando el té en el club de polo y abrazados a la salida del hospital, ellos le estaban diciendo al mundo que yo le era infiel a Harry, y todos tenían una nueva razón para odiarme.

Corrí al baño a vomitar, otra vez Harry era la víctima y yo era la villana ¿cuántas veces el me fue infiel? ¡Cientos! Y yo jamás en la vida le fui infiel a él, ni de pensamiento –aunque se lo mereciera- mi fidelidad y mi lealtad se mantuvo para con mi familia y ahora nadie creía eso.

Estuve muy deprimida por meses, nadie excepto mis padres, Kate y Harry me creían que Tom y yo no habíamos tenido nada, pero era muy tragicómico porque nadie jamás creería lo que realmente sucedió, tenían una imagen tan mala de mi por el mundo que era más fácil pensar que yo engañaba a mi esposo con un actor mundialmente famoso a pensar que yo había trabajado duro para convencer a un actor mundialmente famoso para que visitase a una fan que estaba a punto de morir. Evidentemente la gente no conocía a mi verdadero yo, y juzgaban sin piedad alguna.

Me abucheaban en los compromisos oficiales, cuando salía al balcón del palacio de Buckingham todos al unísono me abucheaban, nadie iba a mis compromisos y los diarios y revistas tenían como hobbie atacarme despiadadamente.

Todos mis amigos famosos me dieron la espalda, de repente ellos aparecían en los medios ratificando que durante todo mi matrimonio yo le había sido infiel a Harry. Mi vida se convirtió en un infierno, estaba demasiado deprimida para levantarme de la cama, para comer, no podía darle de comer a mi bebé, y debía ser alimentada por vía intravenosa. Mis padres se enteraron de mi estado tan horrible y le suplicaron a Harry que me permitiese pasar todo el enero sola con ellos, para que los niños no debieran ver a su madre en este estado, y él a duras penas aceptó.

Como un paquete de encomienda y con una despedida muy dolorosa, Harry me abrazó profundamente antes de que subiera al avión mientras yo no paraba de llorar, Georgiana que estaba enojada conmigo por adoptar esta actitud justo después de 7 años que ella volvía a vivir en Kensington con nosotros, la entiendo, así son los adolescentes. Phil que era muy unido a mí se negaba a soltar mis brazos huesudos y pálidos, Arthur estaba asustado por mi imagen tan demacrada, sentía asco incluso de tocarme, y John, él sólo tenía 5 meses, le di un pequeño besito y lo cargué en mis brazos con ayuda de Harry hasta que el avión despegó.

Para mi desgracia siempre fui una persona que se fijaba mucho en el qué dirán, y ese tipo de personas no pueden vivir una vida pública porque uno nunca puede complacer a todos, siempre es criticado, y yo no podía vivir con la crítica y mucho menos con el odio que la gente me enviaba.