【PAPERMOON】/ 【STARISH】

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DATOS:

JINGUJI ULTEAR.

EDAD: 17 AÑOS.

RANGO: S.

HABILIDADES: TODO TIPO DE DANZA.

LE GUSTA: LA DANZA CALLEJERA; DORANBOLT.

NO LE GUSTA: QUE LA JODAN.

***

Se podían escuchar los aplausos por la obra, todos los que acababan de bailar respiraban agitados y una sonrisa se paso por sus rostros, se reincorporaron e hicieron una reverencia y el telón se cerró.

- ¡Juvia! ¡Muevete! ¡Siguiente cambio de vestuario! - ordenó Bisca y ella se crispó, debía bailar la zapatilla roja aún. Rápidamente corrió a los vestuarios y los encargados hicieron su trabajo. Luego de cinco minutos, exactos. Juvia lleva un vestido ligero completamente blanco con un cinturón rojo.

Su cabello recogido por un lazo rojo y sus labios pintados del mismo color, y las obvias...zapatillas rojas.

- Buena suerte - todos lo sabian, cuanto la peli-azul quería bailar ese solo, ella sonrió nerviosamente. Pero antes de salir, Gray le colocó el collar con la cruz y le dio un empujoncito, ella lo miro extrañada...pero luego tomó su posición.

Todos lo sabían, que la persona que interpretara la zapatilla roja tendría que ser la mejor, debido a que la persona que le interpretara... tenía que demostrar cada uno de los sentimientos reales de la bailarina, cada uno.

Juvia lo hacía perfectamente, casi como si se hubiera fusionado con el papel. Cada movimiento, cada mirada, los jueces la miraban sorprendidos porque la única persona que había logrado eso además de la compositora en Japón...había sido...

Kusama Nagisa.

Casi como si se esforzara para que todos notaran que era tan buena como su madre, incluso mejor que ella. Metalicana abrió sus ojos sorprendido, inclusive unas lágrimas se asomaron por la curva de sus ojos. Layla lo observó sorprendida, pero entendía que Juvia estaba transmitiendo todo lo que se había esforzado, y también...

...todos los adultos...

...veían a Nagisa...

Gajeel pudo jurar, que casi por un segundo una lágrima se desbordó por la curva de los ojos de su hermana. Esa era la pieza favorita de los Kurosawa, pero... Juvia había sido la única que lo hacía en un escenario además de su madre. Tomó la mano de Levy, que estaba a su lado, por los nervios y la apretó con fuerza.

Aunque todos sabían que Juvia no estaba cometiendo ningún error, estaban nerviosos por si algo salía mal.

La peli-azul cayó al suelo y ahí pudieron notarlo, lágrimas salían de los ojos de la oji-marino, todos se exaltaron y ella siguió llorando hasta el final. Quitó el brazo de sus ojos y lo noto mojado.

- ¿Eh? ¿Namida? - se preguntó algo confundida y sus lágrimas se hicieron más espesas. Cubrió su rostro con ambas manos, ¿qué era eso? ¡No lo entendía! Ella desde hace cinco años había solrado una lágrima desde su corazón, ¿por qué ahora...? - N-No lo entiendo...

Faltar a clases, estar frente a la tumba de su madre se había hecho una costumbre de todos los días desde hace un mes, lloraba mientras su rostro se veía tan...¿apacible?

Academia de Música Fairy TailDonde viven las historias. Descúbrelo ahora