Capítulo 12

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Liam.

Me ha costado una vida no volver a tomarla entre mis brazos cuando se ha ido. Llevaba los labios rojos, y saber que yo he causado eso me vuelve loco. Eso es lo que me hace Emma, me vuelve loco. Me desespera, me hace hacer cosas que nunca pensé que haría.

Su beso me deja pensando hasta que llego a casa de Jake, donde me sorprendo al encontrar al idiota de Connor sentado en el sofá con mala cara. Cuando entro me mira, y vuelve a dirigir su mirada a la televisión.

Voy hacia la cocina ignorándolo, y me preparo un sándwich cuando él aparece y se para frente a mi.

-¿Qué ha sido eso?- pregunta mirándome intentando ser desafiante. Pobre niño.

-Nada, así es el fútbol.- contestó sirviéndome un vaso de zumo.

-No soy idiota Liam. Solo mantente alejado de ella. No te diré nada más, espero no tener que volver a repetirlo.- dice y se va.

Me hierve la sangre y pienso en seguirlo y decirle que hace diez minutos atrás, estaba besando a Emma como una bestia. Pero respiro hondo, pienso en ella y en lo mucho que le afectaría que hiciera algo así.

Pero ¿quién se cree que es Connor para reclamarme sobre mi chica?

Termino mi sándwich de muy malhumor, y me voy a acostar. Hoy no estoy para fiestas, pero quizás mañana sí.


Emma.

-¡Felicitaciones Connor!- digo abrazándolo por el cuello.

Estamos en la universidad contemplando la lista de los que quedaron el equipo de fútbol universitario. Y el nombre de Connor aparece entre los seleccionados.

Él me abraza por la cintura sonriente.

-Al parecer ni Liam ha podido tirarme abajo.- dice mientras me abraza y todo mi cuerpo se tensa.

Como si lo hubiera invocado, Liam aparece con Jake caminando, llevando unos libros en sus manos. Puedo observarlo, pero Connor no porque esta de espaldas a él y aún no deja de abrazarme.

Liam nos ve y frunce el ceño fulminándome con la mirada. Como si lo sintiera, Connor me suelta y se gira encontrándose con su mirada también.

-Vayamos a almorzar.- dice Connor y me toma la mano para que nos dirijamos al comedor de la universidad. Cuando una voz, esa voz tan ronca y sensual que me pone el bello de punta nos detiene.

-Chicos, hoy habrá una fiesta en casa de Jake. Deberían ir, ya saben, para festejar.- dice Liam con una sonrisa irónica.

-Por supuesto.- responde Connor afirmando su agarre a mi cintura y Liam mira allí donde su mano se posa sobre mi con llamas en los ojos.

¿Es normal que hasta con cara de mala leche me parezca guapo?

-Hasta entonces.- dice Jake antes de seguir a Liam que se ha marchado segundos antes.

En el comedor, Amanda insiste para que vayamos. Connor ha quedado con su familia para cenar, y yo no tengo ganas de fiestas. Así que ambos nos negamos y dejamos a Amanda refunfuñando antes de dirigirnos a nuestra siguiente clase.


Liam.

A las once de la noche el departamento ya esta lleno de gente ebria. Estoy sentado con Jake y Dakota en el sofá bebiendo una cerveza. Aún no estoy ebrio, pero estoy en eso.

Una rubia teñida se pasea por delante mío y me dedica miradas provocativas. No le hago caso aunque me doy cuenta de sus intentos por seducirme.

El chico de las notas // #DIAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora