10 things i hate about you.

Capítulo seis.

"No te rindas solo porque las cosas están difíciles."

 El sol entraba por la ventana, al parecer había amanecido temprano hoy. ¿La mala noticia? A pesar de que ayer fue el baile de bienvenida en la escuela. Hoy, viernes, había clases. En mi opinión, creo que lo hacían como modo de tortura. Ayer había tenido la peor experiencia con los bailes, jamás admitiré que disfruté el evento hasta que tenía todo el almuerzo de Caleb encima de mí. Ugh.

Un brazo pasó por mi cintura, estrechándome contra el dueño del brazo. Salté en mi cama, al darme cuenta de que el hombre con el que estaba compartiendo cama era Justin.

— ¿Qué demonios tienes, Bunny? Aun es temprano, regresa a la cama —dijo entre dientes.

—Te dije que te quedaras en el sofá, idiota. ¿Hace cuanto estas en mi cama? —pregunte alarmada.

—Malas noticias, tu sofá es el más incomodo en el mundo entero. ¿Siempre te despiertas tan temprano? —preguntó sentándose bien, apoyándose del respaldar de mi cama.

—Tenemos escuela. Es mejor que te vayas. Ahora. Antes de que Lorette se despierte y comience con la charla de sexo de nuevo —le dije tirándole una almohada en la cara.

—Yo estaría encantado, Bunny. Te ves caliente cuando te sonrojas —dijo acercándose a mí.

—Es hora de que te vayas de aquí, amigo —lo empujé, pero eso hizo que tocara su pecho desnudo.

Oh dios, estaba muy bien antes, cuando no me había percatado que lo único que traía encima eran sus pantalones. Su pecho se encontraba totalmente desnudo…Esto no era nada justo. Mientras las mujeres amanecíamos como ogros en las mañanas. ¡Ta ran! Aparecen los hombres despertando como dioses griegos.

—¿_______________? ¿Estas despierta? —escuché la voz procedente de mi padre.

Oh demonios. De todos los días que hace como si no tuviera una hija, ¿hoy quiere hacer el papel de buen padre? Además, ¿Cuándo había llegado? Pensé que iba a estar de viaje el resto de la semana.

—Mierda. Tienes que irte. Ahora. Mi papá va a matar a Lorette si te encuentra en mi habitación, desaparece —le grité empujándolo y dándole algunos golpes para que se apresurara.

—¡Auch! Ya entendí —dijo abriendo la puerta de mi habitación.

—¡No! —grité— No puedes salir por la puerta. ¿Estás loco? Ven aquí —dije jalándolo del brazo, hasta llegar a la ventana.

—¿Es broma, no? En realidad no piensas que voy a saltar hasta la primera planta por tu ventana, ¿verdad?

—Ah… sí —dije mientras la abría.

—Puedo romperme una pierna, ¿lo sabías? —dijo atrayendo mi cara, para que lo vea a los ojos.

—Enterada, debiste de pensarlo antes de meterte en mi cama. Ahora… salta —dije apartándome totalmente de él.

—¿Te han dicho que te ves sexy como chica mandona? —preguntó con su típica sonrisa torcida.

—Salta —grité haciendo que se riera.

—Aquí voy —se subió al marco de la ventana para después dejarse caer, la altura no era mucha y cayó de pie en el suelo con las rodillas flexionadas, Justin se dio vuelta y levanto un pulgar en el aire. Rodé los ojos y cerré la ventana un segundo antes de que mi papá entrara a mi habitación.

—¿todo bien bebé? —preguntó sentándome en mi cada. Si bebé, como si ahora le importara— no sabía que te movieras tanto en las noches.

—si te interesara o podrías un poco de atención en mi, tal vez lo sabrías. Ahora, si no te importa, ¿podrías irte? Tengo que arreglarme para ir al instituto —sonreí falsamente. Papá sonrió desganado y salió de la habitación. Me aleje de la ventana suspirando y fui a cambiarme.