Capítulo 1

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Quiero entrar, lo deseo con todas mis fuerzas pero ¿qué le diría? , no es como que entrara y le dijera : ¡Oye David! ¡Estoy enamorada de ti! y viniera corriendo hacia mí y me besara. Sé que ya no tengo nada que hacer aquí, que mi amor jamás será correspondido , que de su boca nunca saldrá un : Yo también estoy enamorado de  tí Rayna. 

Miro el edificio , la grandes puertas esperan mi gran entrada y mi acto de valor, pero ahora me siento como la chica más cobarde que pueda existir. Se supone que hoy sería una noche inolvidable pero no como yo hubiera querido. Me levanto y salgo de la fuente en la que caí, estoy toda mojada y mi vestido está completamente arruinado,  me pongo a buscar mi bolsa, la encuentro a orillas de la fuente, me siento totalmente avergonzada, ya quiero irme de aquí.

Los taxis en Ámsterdam son carísimos pero con tal de que nadie me vea así, pido uno.

Al llegar al hotel,  las miradas de todos los que están en el lobby están sobre mi, intento no darles mucha importancia, subo al elevador y oprimo el botón 5. Camino por el pasillo  y entro a mi cuarto. Todas las lágrimas contenidas empiezan a correr por mis mejillas. Entro al baño , me quito el vestido y me doy una larga ducha.

Suena mi celular tantas veces mientras me baño , seguramente me marca David y Alice, preguntándose porque no estoy en el gran salón disfrutando la magnífica noche con ellos.

Me pongo la bata, abro mi bolso y reviso mi celular. David me ha marcado más de 20 veces , y tengo muchos mensajes:

¿En dónde estás?
Rayna, ¿por qué no estás aquí?
No entiendo.

                                               No pude entrar, surgió una emergencia y me tengo que ir de Amsterdam.

¿Está todo bien?
Platiquemos Rayna.

                                              No creo que pueda.

Vamos Ray, sabes lo importante que eres para mi.

Quisiera hablar con él por última vez pero no creo ser lo suficientemente fuerte. Me pongo mi ropa de dormir  y empaco todas mis cosas, realmente ya no quiero estar aquí ni un día más. Me tiro rendida a la cama, llena de tristeza , sabiendo que es mi última noche es en este lugar, sabiendo que soy una cobarde y que todo ha terminado.

Por la mañana me despierto, lista para despedirme de lo que fue el mejor verano de mi vida, le doy un último vistazo a mi cuarto, que me acompaño durante estos dos largos meses. Me pongo a recordar que si no hubiera sido por mí hermano Peter, no habría podido conocer ésta ciudad.

 Justo cuando estoy por quitarme del lobby, veo que David me está marcando:

-Rayna , estoy yendo a verte a tu hotel.

-David, ya no estoy ahí. 

-Esperame , por favor , necesitamos hablar.

-Ya es tarde ¿recuerdas que hoy regreso a casa?.

-Pero me prometiste que lo cambiarías para estar una semana más

-Lo siento por no decirte, pero era lo correcto

-¿Por qué dices eso?

Le cuelgo la llamada.

Espero a que pase el autobús y me subo para ir al aeropuerto.  Miro una vez más 

Comienzan a vocear el número de mi vuelo, con todo mi ser deseo que David aparezca, estoy apunto de entrar por la puerta y lo veo, esa mirada sincera, su cabello café ondulado y esos tenis horribles que son sus favoritos por alguna extraña razón. Camina hacia mi.

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