A Dangerous Love . [EDITANDO]

Capítulo N °29

–¿Te has metido al baño para pedir una Pizza? – pregunta con extrañeza y suelto una carcajada.

–No exactamente – respondo y le miro con nostalgia,  pero me detuve en seco al ver al final del pasillo la silueta de Andrea, nos mira por unos eternos segundos,  segundos en los que prácticamente me había congelado, ella alza ambas cejas con una expresión de incredulidad y dirige sus ojos a mi brazo que rodeaba a Jessica,  rápidamente lo quité y di un paso lejos de ella.

–Wow, pero que confianza se han dado,  ¿no? – dijo con algo de amargo y sarcasmo en su voz, luego miró a Jessica inquisitiva en busca de respuestas.

"Parece un padre celoso", pensé .

–Keith ha pedido pizza – dice Jess ignorando su comentario y pasa de largo por su lado, Andrea se queda con la boca abierta y me mira con el ceño fruncido antes de dar media vuelta e ir tras ella hacia la cocina,  me quedé mirando desde el pasillo como Jessica sacaba platos y vasos del estante de arriba mientras Andrea le hablaba sin parar con ambas manos en su cintura.

Suspire y me acerqué a la ventana para ver como el sol se escondía lentamente, la luz de a poco se iba y entonces vi el lujoso coche de Ryan aparcar fuera del edificio,  hice una mueca y me alejé de la ventana para asomar mi cabeza por la puerta de la cocina.

–¿Que, que es lo que me pasa?,  tienes que estar bromeando – oí a Andrea furiosa antes de darle un golpe a la encimera desgastada,  Jessica la mira con expresión molesta y se cruza de brazos – ¿es que se te ha olvidado todo lo que hemos pasado?,  quizás tu memoria falla Jessica, pero, ¿olvidas quién es él y todo lo que nos ha hecho?,  ¿olvidas quien es su padre?  –

–¡Claro que no! ,  no he olvidado nada de eso,  pero lo he tratado y sé que no es quien yo creía que era en un principio – el hecho de que Jessica me defendiera me toma por sorpresa y finalmente me decido por salir de mi escondite,  ya que Jessica se estaba poniendo a la defensiva y sabía perfectamente que eso no terminaría bien.

–Sé que no te fías de mí,  ¿vale?– mi voz sale relajada y ambas se giran para mirarme – pero no soy como él,  he cometido errores y metido la pata una infinidad de veces, pero intento solucionarlo, las cosas no has salido como lo planeaba, pero de a poco he comprendido que lo que Matthew hizo no fue mi culpa,  sólo intento hacer lo mejor para Jessica... –

–¿Porque?, es que aún no lo entiendo, ¿porque de pronto tanto interés en protegerla? – pregunta y da un paso hacia mí.

–Yo, yo les podría demostrar que mis intenciones son buenas, pero, ni siquiera me das el beneficio de la duda – ella frunce el ceño y suelto el aire – quiero que me concedan 3 meses –

–Pero, ¿de que estás hablando? – preguntó Andrea y Jessica me miraba con la misma expresión de extrañeza.

– Quiero decir que...  – tomo aire y humedezco mis labios – quiero que me den 3 meses...  3 meses para conquistar a Jess  –  ambas se quedan en silencio y me miran atónitas,  los bellos de mi nuca se ponen de punta y de pronto mi estómago se siente pesado, ella separa sus labios, pero puedo notar que su voz se niega a salir, así que decido terminar de una vez y soltarlo todo.

–Sé que esto suena loco y algo desconcertante, pero Jessica, me gustas,  me gustas mucho,  y no lo había notado hasta que recibí un puto disparo por ti,  no lo sabía hasta que vi tu rostro lleno de miedo cuando fui a buscarte a ese maldito lugar, hasta que te vi llorar en sueños por tus recuerdos del pasado... y por favor,  no me mires así,  sé que no sientes nada por mí,  me lo has dicho tantas veces que oirlo una vez más no cambiaría obsolutamente nada, deja que lo intente,  ¿si?,  deja que me gane tu corazón y déjame que intente hacerte olvidar todo lo malo que has pasado por culpa de otros,  yo podría, podría ser feliz contigo a mi lado y sé que tú quizás llegues a sentir lo mismo, no eres tan dura como quieres hacer creer y yo tampoco soy tan idiota y ególatra como todos creen,  pero es que solo hasta ahora puedo decir que tengo una verdadera razón para mostrarme como realmente soy,  y esa razón eres tú...  –  doy un paso hacia ella y me siento quedar sin aire,  ella está completamente congelada,  extiendo mi mano para  tocar la suya.