A Dangerous Love . [EDITANDO]

Capítulo N° 30.

Unas risas me desconciertan y con un quejido me revuelvo en mi cama, abro los ojos y un suspiro sale de mis labios al notar que ya no podría volver a dormir, me quito las sábanas de encima y me siento en el borde de la cama.

-Keith... - oigo su voz y rápidamente me giro hacia ella, estaba con una mano en la manija y entonces se detiene - Oh, ya estás despierto - dice y le sonrío, asiento una vez y me pongo de pie.

-¿Que ocurre? - pregunto y paso un brazo sobre sus hombros para caminar con ella fuera del cuarto.

-Hicimos el almuerzo - me mira hacia arriba y sonríe - iba a despertarte antes, pero parecías un tronco, ¿te has tomado algo para dormir? - pregunta con una mueca, niego con la cabeza y beso su coronilla.

Al llegar a la cocina veo a todos sentados en la isla, parecían divertidos y las carcajadas me calaban hasta la parte trasera de mi cabeza, sisee por el incómodo chillido y dejé que jess se sentara para yo ir por un vaso de agua, al beberlo me acerco a la isla y me siento junto a Ryan.

-¿Se te ha acabado la ropa limpia? - pregunta Lau con un aire burlón me miro y noto que solo estaba en bóxer, me encojo de hombros y con el tenedor pincho la pasta para llevarla a mi boca.

-No tengo nada que no hayan visto ya - vuelvo a comer y todos ríen, siento que mi cabeza quiere explorar, mis cienes palpitan y sus risas se me hacen completamente insoportables, respiro repetidas veces, el tenedor se resbala de mis dedos y rápidamente me encojo cuando este hace un estruendoso ruido al chocar con el plato, llevo mis manos a mi cabeza y mi garganta emite un gruñido - dios , ¿podrían hacer UN minuto de silencio? , me están matando - mi voz sale más fuerte de lo que debía y rápidamente un silencio total se instala a mi alrededor.

-¿Que te sucede?, sólo estábamos riendo - suelta jess con el entrecejo fruncido.

-Lo siento - niego con la cabeza y suelto un bufido - tomaré una siesta - me pongo de pie y camino por el suelo de la cocina arrastrando los pies.

-Pero, acabas de levantarte Keith - dice con tono preocupado, ella se pone de pie y camina hacia mí mientras todos nos miran, Jess pone una mano en mi frente - estás ardiendo - le miro con cara pícara y una sonrisa.

-Gracias, pero ya lo sabía, me lo dicen seguido - digo con arrogancia y Jess voltea los ojos mientras quita su mano de mi cara.

-Lo digo en serio, tienes fiebre - bufo y dejo caer mis hombros mientras ambos caminamos hacia mi cuarto.

-Le quitas lo divertido a todo - me quejo y ella sólo se ríe, así me la pasé todo el día, recostado, a veces en mi cama y otras en el sofá de la sala, al final del día Ryan ya se había ido a su casa y las chicas estaban sentadas a mi alrededor comiendo chucherías y viendo una película de acción en el plasma puesto en la pared.

Al cabo de 15 días ya había vuelto a la normalidad, había decidido que Andriu se quedase aquí por un tiempo y los días se iban rápidamente cuando se trataba de la partida de Lau, casi no habíamos pasado tiempo juntos y es que Jess y yo estábamos como niño con juguete nuevo, cada vez que nos mirábamos nos compartíamos sonrisas cómplices y casi no nos separábamos el uno del otro.

Lau me había dicho varias veces que me extrañaba y quería pasar conmigo como en los viejos tiempos, porque aunque estuviese alojándose en mi apartamento ella sentía que casi no me había visto en estas últimas 3 semanas.

¿Qué podía decir?, Jess me tenía en la palma de su mano, y podía tenerme como y cuando quisiera.

-¿En qué piensas? - su voz me sacó de mi ensimismamiento, me volteo y veo a Andriu apoyada en el marco de la puerta.