Capítulo 16

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Sé de una persona que querrá matarme cuando lea este capítulo, primero porque seguro que no se lo esperaba y segundo...bueno, tendréis que leerlo para averiguar el motivo de mi prematura muerte; espero que os guste. (FrozenGirl51) ¿Qué pondrás en mi tumba?

Varias semanas más tarde...

Kate repiquetea sus dedos sobre la mesa, es la primera vez, desde que empezó como abogada, que se aburre en su despacho. No es por el caso, la ausencia de Rick en la ciudad le ha afectado más de lo que pensaba.

Gracias al éxito de Alexis, el compositor organizó una pequeña gira por las ciudades cercanas, otros estados; Beckett le afirmó que estaría bien sin él pero es mentira, le echa muchísimo de menos, más y más cada día.

Las horas transcurren de forma lenta, es como si las manecillas del reloj fuesen en su contra, ¿cómo es posible que una persona tenga ese efecto en ella? Es decir, con Castle las horas pasan volando, y ahora que no está a su lado...es como si le faltase algo, le desea mucho, y no sólo por el sexo; aunque también piensa en eso.

Como tenga que aguantar otra hora más en ese angustioso cubículo le va a dar algo, busca el número de Lanie y no duda en llamarla; su amiga responde a la tercera señal.

- Kate, ¿qué pasa? No es propio de ti que me llames a estas horas, cuando lo hago yo sueles mandarme a la mierda.

- Lo sé y siento haberte hablado mal todas esas veces, no te lo vas a creer pero me aburro mucho, ¿estás muy ocupada?

- ¡Katherine Houghton Beckett, ¿te aburres?! ¡Eso sí que es nuevo! Pues estoy con una autopsia pero no me queda mucho para terminar, ¿quieres que quedemos para cenar?

- ¡Si por favor, no soporto más estar aquí!- por mucho que se aburra, la profesionalidad continua siendo vital en la abogada que trabaja para distraerse.

Esa misma noche...

Kate desea arreglarse, que Rick no esté en la ciudad no quita que ella vaya a cambiar de vestuario. Lanie y ella van a tener una noche de chicas así que es muy probable que terminen en alguna discoteca bailando.

Su teléfono suena cuando ella está terminando de maquillarse, es Castle.- Hola, ¿cómo va la gira?- Intenta no sonar muy desesperada o nerviosa, se ha considerado fuerte y va a seguir siéndolo.

- ¡De maravilla! ¡Alexis es fantástica! Está teniendo mucho éxito, sobre todo con los jóvenes.- Beckett sonríe al mismo tiempo que se mira en el espejo, así bastará para salir por ahí.

- Me alegro mucho, de verdad. ¿Tienes otra fiesta esta noche?

- En realidad...hoy no me apetece salir, llevamos días sin parar, ya no tengo veinte años, mi cuerpo suplica un baño y la cama en el hotel.

- Eres un viejo, yo salgo hoy con Lanie. Vamos a ir a cenar y después a bailar.- Kate quiere probar si él se ha puesto celoso, sabe que alguno querrá llevársela a la cama pero, desgraciadamente, esa Katherine Beckett ha desaparecido sin darse cuenta la misma abogada.

- ¿De verdad? Ya veo que no me echas de menos, yo anhelo tu cuerpo, tu perfume embriagador, tu cuerpo esbelto y perfecto. Sólo con pensar en ti ya me estoy poniendo cachondo.

La verdad es que Kate también desea tenerlo junto a ella, desnudo en la cama con ese culo tan prieto que tanto le pone, la temperatura corporal ha subido en ambos cuerpos; ¿sexo por teléfono? Jamás han hecho algo semejante pero tampoco sería malo probarlo, ¿no? Como bien dicen, hay una primera vez para todo.


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- Rick, ¿de verdad quieres que lo hagamos por aquí?- pregunta ella sentándose en la cama para ponerse los tacones, quiere esperar la respuesta de él.- ¿qué hagamos el qué, Kate?

- Me acabas de decir que te estás poniendo cachondo, si quieres quedarte con las ganas sólo dímelo, he quedado con Lanie dentro de media hora; tú sabrás.- y se produce un silencio extraño, no incómodo pero es evidente que los dos están un poco nerviosos.

- ¿Rick? ¿Estás ahí?- Kate comienza a preocuparse, no se escucha absolutamente nada tras el teléfono.- ¡¿Rick?! ¡Dime algo!- pero nada, nadie responde.

¿A quién puede llamar? No tiene el número de Alexis, lo mejor será llamar a Ryan, que busquen la ubicación del teléfono de Richard. Beckett busca el número del novio y enseguida le cuenta más o menos lo que ha pasado guardándose el tipo de conversación.

- Vale, no te preocupes, nos pondremos enseguida. Te llamo en cuanto sepa algo.- Kate llama también a Lanie.

- Cielo, voy para tu casa, no te muevas, ¿me oyes? No hagas ninguna idiotez.- ¿idiotez? Rick ha dejado de contestar de repente, no se ha escuchado ningún ruido, ¿qué cojones ha pasado?

No puede quedarse con los brazos cruzados, tiene la misma sensación, la sangre helada, los pelos de punta...entonces lo vio, el cuerpo sin vida de su madre en ese mugriento callejón.

Un par de horas más tarde...

Lanie intenta tranquilizar a su mejor amiga pero es imposible, siguen sin tener noticias de Richard y eso es mala señal, ¿y si lo han encontrado muerto? ¿Y si alguien lo mató mientras hablaba con Kate? Miles de situaciones y ninguna tienen final feliz.

- Cielo, seguro que estará bien, quizás le dio un bajón de tensión, es frecuente.- pero esas palabras no sirven de nada, Beckett no estará tranquila hasta ver a Rick, vivo o muerto.

El móvil de Kate comienza a sonar, aparece el número de Ryan, no se atreve a cogerlo así que es Lanie la que responde.

- Hola Kevin, ¿qué pasa?- la abogada es buena con las expresiones corporales, pero Lanie no muestra ninguna expresión hasta que lleva más de cinco minutos hablando.- ¿de verdad? ¿cómo ha sido eso posible? Entiendo.

- ¡Lanie! ¡¿Qué demonios le ha pasado a Rick?!- la forense deja de hablar para observar a su amiga.- Oye Kevin, enseguida vamos para allá, si yo se lo digo.

Beckett está hecha un manojo de nervios.- Lanie, por favor, no puedo más con esta angustia. Dime de una vez que le ha pasado a Rick, podré soportarlo.- pero sus lágrimas no le ayudan.

- Kate, cuando estuviste hablando con Rick, ¿notaste algo fuera de lo común?

- ¿A qué viene esa pregunta? Estaba feliz, no pasaba nada.- aunque...sí que parecía como si la voz la tuviese temblorosa pero lo relacionaba al cansancio.

- Kate.- Lanie coge las manos de su amiga y le mira a los ojos.- Richard ha tenido una sobredosis de cocaína, le van a hacer un lavado de estómago en el hospital. Cuando Ryan te ha llamado ya iban de camino.

- ¡¿QUÉ?! ¡ESO ES IMPOSIBLE! ¡RICK NO SE DROGA!

Engañando al amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora