Capítulo 28 (+18)

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N/A: Habéis esperado lo suficiente como para obtener ahora un regalo de mi parte para todos/as vosotros/as. No, no fue una gran idea el dejarlo de esa forma pero merecerá la pena, ¿no? Mil gracias por los votos y comentarios. ¡A disfrutar!

En un bar de la ciudad...

Jim Beckett se toma su taza de café humeante con lentitud. Mira su reloj por cuarta vez y acto seguido observa la puerta; no le gusta nada tener que esperar pero nadie dice que no si te dicen por teléfono frases como "es por su hija" "¿sabes dónde ha podido ir?"

- ¡Jim, lo siento mucho!- Castle se disculpa varias veces, un atasco le ha impedido ir antes, fue él mismo el que quiso reunirse con el padre de la abogada ahora desaparecida.

- Quieres hablar sobre el paradero de mi hija, no sería justo negarte la posibilidad de poder encontrarla. Por cierto, me enteré de tu atraco, ¿cómo te encuentras?

- Estoy bien, por favor Jim, ¿sabes dónde se ha metido Kate? Es importante que hable con ella, hubo un malentendido y sé que se ha marchado por mi culpa. O más bien porque mi madre no sabe contener su genio.

El hombre escucha con atención todo lo que la pareja de su hija le cuenta, parece preocupado de verdad; ¿tendría que ayudarle? Su hija es la que sufre ahora pero si Rick fuese a buscarla...quizás todo quede en una anécdota sin importancia.

- Mira Richard, Katherine no lo pasó nada bien cuando su madre murió. De hecho, se distanció un tiempo de mí; necesitaba tiempo para estar sola. Le hice caso y la dejé en paz pero no tendría que haberlo hecho. Nadie nace para estar solo y ella tampoco. Sé dónde puede estar y te suplico que vayas a por ella.

- No lo dudes Jim, jamás volveré a dejarla sola, tienes mi palabra.

Rick apunta la dirección en el móvil para después ponerla en el GPS del coche. Le pilla un poco lejos pero por Beckett iría hasta el fin del mundo; es evidente que no puede vivir sin ella, se siente fatal por todo lo ocurrido y tiene que decírselo en persona.

Mientras tanto, en una cabaña en mitad del bosque...

Kate deja la taza en la mesita para relajarse con los sonidos que la madre naturaleza le proporciona. Es una tranquilidad que no había experimentado desde que comenzó a trabajar en la ciudad; debería quedarse allí para siempre.

Su mente vuelve a traer la imagen de Rick para traicionarle y provocarle más dolor. Martha tiene razón, no es buena para él y por eso es necesario alejarse durante un tiempo.

El sonido de un motor lesorprende y asusta a la vez por lo que entra para coger su arma; nunca se sabequé o quién puede aparecer en mitad del bosque. Un coche aparca justo al lado del suyo y el hombre que sale del vehículo es Castle.

- ¡Menos mal, he ido visitado otras dos casas antes de acertar! Tienes unos vecinos muy simpáticos ¿lo sabías?- Kate no se mueve, apenas parpadea y continua con la pistola en la mano.

- Esto es un sueño, tengo que estar soñando o quizás seas producto de mi imaginación.- Rick se detiene al pie de las escaleras, no ve a Beckett muy dispuesta para recibirle con cariño.

- Soy yo Kate, Richard. No es un sueño, he venido para hablar contigo ya que me parece que estos últimos días todo ha sido muy raro ¿no te parece?

- No tenemos nada de qué hablar Castle. Tu madre dejó muy claro lo que en realidad piensa de mí y tendrías que escucharla alguna vez.

Castle ignora el hecho de que la abogada está armada y sube los escalones para quedar pegado al cuerpo de ella.- mi madre puede dar sabios consejos muy de vez en cuando pero ¿sobre ti? Se equivoca completamente.

- ¿Y eso cómo lo sabes? Bailé en ropa interior con otro hombre en tu casa Richard, motivo suficiente para romper conmigo y olvidar que existo.

- ¿Renunciar a la mujer más maravillosa porque quiso volver durante unos minutos a su antigua vida como modelo? No es un motivo, lo siento.

La boca de Beckett se abre al escuchar esas palabras del hombre que no se ha movido del sitio.- veo que ya conoces la historia, no sé qué me pasó Rick. Estábamos hablando del pasado y sin saber cómo empezamos a bailar tan sólo con la ropa interior.

 Estábamos hablando del pasado y sin saber cómo empezamos a bailar tan sólo con la ropa interior

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- Lo que no logro entender Kate es por qué me ocultaste eso. ¿De verdad pensaste que te dejaría por eso? ¿O sentiría vergüenza? Todo lo contrario, me excita todavía más.

- ¿Hablas en serio? ¿Sigues sintiendo algo por mí?- Rick acerca su rostro todavía más.- jamás has dejado de gustarme Beckett, quiero demostrarte todo lo que significas para mí ahora mismo.

Beckett lleva a Rick hasta la habitación con la enorme cama de matrimonio, la chimenea ha calentado el cuarto y ninguno tiene problema en deshacerse de la ropa.


Ella acaricia el rostro de él para asegurarse de que es real, ese hombre ha ido hasta allí para demostrarle que sigue enamorado, que nunca dejará de amarla y siempre estará a su lado. Kate se deja caer en la cama ya desnuda, su vello se eriza al sentir el cálido de aliento de Rick en su cuello; su sexo ya reclama lo que tanto a anhelado, lo que deseaba desde hace mucho. Quiere sentir a ese hombre dentro de ella, recibir cada embestida con un placer que sólo él puede conseguir.

Castle succiona sus pezones, juega con ellos, les da pequeños pellizcos hasta endurecerlos y Kate se agarra a su cintura con ambas piernas; no quiere dejarlo escapar nunca más.

- ¿Preparada?- pregunta él mirando los hermosos ojos de Kate que le transmiten amor e inmensa felicidad.- siempre.- consigue responder ella jadeando.

Kate siente el miembro de él y sus paredes vaginales responden muy bien ya que se cierran para atraparlo y recibir las embestidas, el ritmo se va acelerando. Beckett opta por colocarse encima esta vez, sus perfectos pechos suben y bajan al igual que el resto de su cuerpo mientras que Castle cumple y no deja de regalarle la pasión.

¿Cómo han podido alejarse de esa manera? Lo que tienen entre ellos es una química especial que no pueden desperdiciar por nada del mundo; es cierto que rechazaron mil veces el amor pero cuando una persona te hace sentir tan especial...no puedes renunciar a ella tan fácilmente. Además, el sexo es increíble.

Ambos se quedan tumbados en la cama intentando recuperar una respiración normal.- Bueno, me parece que con esto ya queda todo olvidado, ¿no?- pregunta Castle antes de levantarse para ir al baño.

Kate se fija en su perfecto culo, no piensa compartirlo con nadie. Ese hombre será sólo suyo; no tiene suficiente con lo que acaba de pasar, necesita más, ¿un segundo asalto quizás?

- Esto...Castle...

Engañando al amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora