Capítulo 8 (+18)

847 41 5
                                    

Llega la noche y con ella una cena en un restaurante bastante importante en los Hamptons, las tres chicas se arreglan cada una en su habitación; Lanie no sabe qué hacer, los chicos irán a cenar con ellas y dado que Kate ya tiene pareja para la boda...será un poco raro encontrarse de nuevo con Rick después de ver cómo terminaron.

- Oye, ¿estás bien?- le pregunta Jenny mientras las dos bajan por las escaleras para dirigirse hacia la puerta.- Sí claro, ¿por qué lo preguntas?

- Es que te veo bastante distraída desde que Beckett nos contó lo de Sam, ¿qué piensas sobre eso?- las amigas aprovechan para compartir opiniones y lo que está claro es que no les apetece ver cómo Rick y Kate se distancian de esa forma.

- ¡Chicas ya estoy!- Kate baja con un vestido rojo bastante escotado dejando ver sus largas piernas, los tacones permiten que la chica pueda lucirse todavía más; su pelo suelto y ondulado cae por los hombros. 

- ¡Joder Beckett, estás deslumbrante! ¿Es qué piensas ligar esta noche? Recuerda que tienes a Sam, ¿eh?- pero la abogada no se molesta por ese comentario, ella es consciente de que Sam sólo es una tapadera, un chico que utilizará de pareja para la boda y nada más pero claro, es algo entre Sam y ella.

- No voy a negar la posibilidad de enrollarme con alguno, necesito desahogarme y si Sam no se entera, ¿qué más da?- y la Kate de siempre ha vuelto, o al menos eso piensan sus amigas, les tranquiliza ver que ha vuelto al sexo sin compromiso; por extraño que pueda parecer.

Las tres salen bien guapas para cenar, el camarero les lleva amablemente hasta su mesa dónde, para sorpresa de Jenny y Kate, les esperan tres hombres.

- ¡Kevin!- Jenny corre hacia su prometido y le besa con pasión.- ¡¿qué estáis haciendo aquí?!

- Lanie quiso que viniésemos para cenar todos juntos.- la novia abraza a su amiga con efusividad, Javier también le da un fugaz beso a la dama de honor culpable de esa grata sorpresa.

Sin embargo, Rick y Kate no tienen muy claro si eso debería hacerles feliz, hace dos meses que no saben nada el uno del otro y ahora tienen que cenar juntos por obligación.

- Hola Katherine, estás muy guapa.- comenta él intentando aliviar la tensión que allí se respira.- Hola Richard, tú tampoco estás nada mal.

Las parejas se sientan en la mesa para disfrutar de una agradable velada, luego les espera una buena fiesta en la mejor discoteca de aquel lugar. Todos hablan y ríen, excepto Kate, que se limita a beber y a comer sin dirigir la mirada al hombre que hay en frente de ella.

 Todos hablan y ríen, excepto Kate, que se limita a beber y a comer sin dirigir la mirada al hombre que hay en frente de ella

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

- Anda que menuda noche de chicas, ya te vale Lanie.- comenta Kate mientras se vuelve a pintar los labios, las dos damas de honor han ido al baño.- ¿qué pasa? Yo no sabía que ya te habías echado un rollo para la boda, Rick es un padrino, no puedo decirle que no venga.

Engañando al amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora