Supervivientes.

Capítulo 27: Curt.

¡Narra Luke!

Estamos a poco de llegar a la gran ciudad. Son alrededor de las diez de la mañana del día catorce después de que todo se haya ido a la mierda. En la noche anterior no páramos de conducir, y a pesar de las insistencias de Isabel y Jonny yo maneje toda la noche.

A pesar de mi condición de herido, no descanse. El día anterior Lorena había atendido mi herida de bala y los golpes. Desde que tengo memoria sano mas rápido de lo común y rara vez enfermo.

La falta de comida y sueño están haciendo estragos en mi organizmo pero, como con las enfermedades y heridas, a comparación de otras personas yo soporto mas esta falta de necesidades biológicas y no entiendo el como pero me sirve.

Hicimos una pequeña pausa en la conducción para conseguir gasolina y mas agua. Además adelante de nosotros el camino se divide a dos posibles entradas a la ciudad y entre el oficial Cárter, Rick, Shane y Conors están decidiendo por cual entrar. Estaría con ellos si en estos momentos no estuviera irritable y cansado, además ya es hora de que tomen sus decisiones solos.

Todos bajaron del deportivo dejandome solo, recline mi asiento y opte por dormir un poco para reponer fuerzas.

- Luke -la dulce voz de la tierna Jenny llamándome me arrebata de los brazos de Morfeo.

- ¿Qué sucede linda? -le dije acomodandome mejor en el asiento para hablar con ella, lo dije con una voz algo ronca esta todavía adormilado. Le hice una seña para que tomara asiento.

- Quería preguntarte -dijo con tono serio, o el más serio que puede hacer un niño a los ocho años-. Si ves que se acerca navidad -asentí-. Me inquieta que Papá Noél no nos encuentre este año, por que no estamos en casa. Luke -me miro de forma tierna y melancolica-. ¿Papá Noél nos encontrará y traerá nuestros regalos?

Una pequeña sonrisa se dibujo en mi rostro, me conmovía tanta ternura e inocencia, ella era completamente ajena a que el mundo estaba llegando a su fin. A mi mente vinieron los recuerdos de Cindy y Lilly, mis hermanas, cuando eran niñas y era el veinticinco de Diciembre, sus emoción que reflejaba su rostro en Noche Buena y su felicidad al abrir los regalos en la mañana de Navidad. También recuerdo la Navidad que pase con los Jones, el rostro y felicidad de la pequeña Nicholle. Además el año pasado estuve con los Bathory y las mismas expresiónes las ví en los pequeños rubios. Este año no cambiara, y haré todo lo necesario para lograr que los niños estén felices.

- No te preocupes -le dije sonriente-. Papá Noél siempre encuentra a los niños, no importa que no estén en su casa.

- Entonces ¿Papá Noél vendrá también este año?

- Claro que lo hará Jenny.

La niña me regalo una sonrisa de oreja a oreja y me abrazo. La apreté contra mi pecho y palmee su cabezita, este año tendría una Navidad como todos los años. Saco su rostro de mi pecho y con una mirada inocente me dirigió de nuevo la palabra.

- ¿Lo prometes?

- Lo prometo.

Después de eso la niña me pidió permiso de jugar con Saori, Nanci (hija de Marcos), Hally (hija de Curt Wilson) y Nicholle en la caravana, según la chiquilla Conors se los permitió y que Eli las iba a cuidar. Le di permiso sólo si Isabel las cuidaba también, por alguna razón desconfiaba de Elizabeth, mejor dicho temía que su primo estuviera ahí.

La niña fue felizmente con su hermana dejándome solo con mis dudas e inquietudes. Dimitri me daba muy mala espina, su mirada asesina, su extraño comportamiento, su misterioso pasado me inquietaba demasiado. Desde que mi padre me contó que tenia medios hermanos jamas volví a tener confianza en nadie tan fácilmente, siempre hay excepciones como Patty, Isabel, Mina y Jonny; y tal vez Rick y Barry.