Capítulo 30: Navidad Post-Apocaliptica.

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¡Narra Luke!

A pasado un tiempo desde que nos instalamos entre las colinas. El incidente de la primera noche no se volvió a repetir y ha estado todo en paz. Los podridos no se acercan al campamento, la comida es abundante por el momento y nos vamos acostumbrando a este mundo.

Son alrededor de las cinco de la mañana y el sol todavía no hace acto de presencia en occidente. Gracias al cielo no ha nevado y el clima, aunque frío, es estable. Frente a la fogata me sumerjo en mis inquietudes.

Como le dije a Barry hace tiempo ya no volveré a arriesgar la vida por los que no sean de mi familia, sonara egoísta pero es lo que he hecho estas últimas semanas. Pero ahora recuerdo sobre una pequeña promesa que debo cumplir: Que los niños tengan una navidad.

"- Entonces ¿Papá Noél vendrá también este año?
- Claro que lo hará Jeny.
- ¿Lo prometes?
- Lo prometo".

Curiosamente lo recordé hoy, 24 de Diciembre, en víspera de Navidad. Y no pienso en romper otra promesa, así que volveré a arriesgar mi vida por traer la navidad al fin del mundo.

Barry aparece en el lugar, se le veía fresco y despreocupado. Tomo asiento junto a mi persona y tarareaba una canción de la fecha. Me dio algo de gracia ya que meneaba su cabeza de una lado a otro, de manera sutil, al ritmo de la tonada.

- Felices fiestas Luke -dijo finalmente embozando una sonrisa-. ¿Como va tu mañana?

- Bien -dije de manera entrecortada mientras trataba de tragarme la risa que me provocaba ver a Barry así-. Pero al parecer no tan bien como la tuya. -No soporte mas y solté una carcajada, no se inmuto y siguió tarareando "Santa Claus is coming to tawn ".

- ¿Qué te puedo decir? -dijo con emoción en su voz-. Amo la Navidad y todo lo que trae consigo. Es mi época favorita del año y la que mas celebro.

- Veo tu emoción amigo -dije con cierta felicidad, una gran idea se me vino a la mente-. Así que te propongo algo.

- ¿Qué?

- Ya hace tiempo Jenny me dijo que si San Nicholas, Papá Noél o Santa Claus -mencione todos los nombres que recordaba con los cuales conocían al alegre y regordete hombre de traje rojo-, vendrían a esta navidad, le prometí que tendría una Navidad como las de antes. Y no pienso defraudarla. Así que Barry, ¿me harías el favor de ayudarme a traer la Navidad al campamento?

- Solo por ser Navidad -sonrió y continuo con su tarareo por unos segundos para volver a hablar-. ¿Cuál es el plan?

- Si mas no recuerdo -expuse-, hay una "Aldea Navideña" cerca de la ciudad. Con un auto podemos traer un árbol, decoraciones e inclusive regalos para los niños. Y si se puede para los adultos también.

- Buen plan -dijo poniéndose de pie mi interlocutor-. Pero ¿solo iremos nosotros dos?

- No, sólo nosotros tres -la voz arrogante y suave de la rubia Conors se hizo presente de un momento a otro. Barry yo dirigimos la mirada a la chica, que tan solo vestida con un diminuto short y una blusa de tirantes blanca estaba parada frente a nosotros. Al verla en esas ropas abrimos los ojos como platos "¿Qué no le da frío?" me dije al instante.

- ¿P...por que traes esas fachas? -dijo el castaño.

- Estaba dormida -dijo este bostezos, era mas que obvio que dormía-. Es cómodo dormir así. Voy a cambiarme y nos vamos.

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