Capítulo 46: Adiós Amigo.

805 53 19
                                    

¡Narra Jonny!

El opaco sol de invierno caía por el poniente pintando de matices púrpuras, anaranjados y rojos el cielo​, el viento soplaba con fuerza y hacía que el follaje de los árboles danzarán​​ con un ritmo lento y armónico. La sinfonía compuesta por el cantar de las aves, el ronroneo de los motores y murmullo del viento, musicalizaban
a la perfección el silencio de nuestras voces.

Miraba por la ventanilla del viejo Cadillac, uno más nuevo que el modelo del 69 donde la niña pelirroja se había ocultado. Solo nos habíamos quedado con la Van, este Cadillac que habíamos conseguido en la carretera hace dos semanas y la motocicleta que Barry había tomado en el pueblo de King. Los tres vehículos viajaban en sintonía rumbo a la gran ciudad, con una velocidad algo baja para una carretera. Estaba sentado en el asiento del copiloto del Cadillac, el auto iba entre los otros dos vehículos, estando la Van a mi izquierda y la motocicleta a mi derecha. Luke conducía el vehículo y detrás nuestro estaban Steven y María, ninguno hablaba.

En la Van, conducida por su dueño, viajaban el presidente, Isabel, Mina y todos los niños. Luke lo había decidido así alegando que los pequeños estarían más seguros en ese auto. Mientras que Barry y Patty iban en la motocicleta, estaban constantemente a lado de mi ventanilla para evitar adelantarse.

Mis ojos se posaron en el rostro de mi hermano, su cara delgada palideció​ demasiado, su largo y fuerte cuerpo había adelgazado, sus ojos habían perdido el brillo de alegría y jovialidad. Había cambiado de manera impresionante, era más frío y callado de como lo recordaba, tan solo el recordar lo pasado el día anterior en la ciudad me dejaba claro que tan lejos podía llegar ahora por su familia.

Él noto mi mirada y al instante la aparté de su persona, no podía describir lo que sentía al ver sus pupilas, era... ¿miedo? Sí, eso era lo que sentía. Tan solo con ver sus ojos un extraño temor me invadía, eran oscuros como la noche y fríos como el hielo, como los de un podrido. Luke tenía en momentos esa mirada que me atemorizaba, esa mirada que podría dejar frío a cualquier enemigo, esa mirada sin vida. Pero solo la tenía por momentos.

Miré de nuevo por la ventanilla, quería apartar esos pensamientos de mi mente, entonces fijé mi mirada en Barry. El ex miembro de SWAT conducía la motocicleta con total experiencia, una sonrisa cálida se dibujaba en sus labios rodeados de una corta y desalineada barba. Su mirada era lo contrario a la de Blake, tenía un brillo de esperanza y felicidad, acompañadas de su sonrisa de orgullo, nostalgia y satisfacción. Al parecer Barry había encontrado lo que tanto añoraba, tal vez con eso le bastará para vivir el resto de su vida, y eso era una familia.

Luke y Barry eran grandes amigos, eran muy iguales: fuertes, valientes, competitivos y tenaces. Pero sus diferencias eran igual de notorias, mientras que Barry mantiene una actitud positiva y amigable en todo momento, Luke perdía el control y la cordura con facilidad. Y a pesar de todo ello, seguirían siendo grandes amigos y aliados, protegerán a los suyos y lo harán con sangre, sudor y lágrimas, arriesgando su vida en todo momento para cumplir con su tarea.

La voz del oficial por la vieja radio de policía que usaban, le pedía a Luke informarle de su estado, él respondió con seriedad y luego comenzaron a charlar de los planes para llegar al CDC. No puse atención a su charla y simplemente me perdí en mis pensamientos y recuerdos mientras miraba el parabrisas con total indiferencia. No presté atención a nada por un largo rato.

(...)

El sol había caído y el manto oscuro de la noche nos abrigaba con su pasividad, hacia tiempo que no veía una noche tan clara como la de hoy, la luna estaba en lo alto en su cuarto menguante, y las estrellas la secundaban en la iluminación. Los ronquidos de Steven y María hacían dueto con el motor, mientras que el silencio entré mi hermano y yo era sepulcral; Luke no apartaba ni un solo instante la mirada del camino, y yo solo me limitaba a admirar las constelaciones, no era un experto en ello pero conocía el nombre de unas cuantas.

Supervivientes.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora