¡¡Llegamos a 1K!!
Ajskflgmfkflf no puedo creerlo, de verdad 😿 cuando vi me puse muy feliz, tan feliz que para agradecerles hoy haré actualización doble, denme amor (?) 😽 ¡Gracias por leer y votar esta cursi historia! Espero que les siga gustando 💕🌹
¡No se diga más! ¡Vamo a leer!🐹🐼🐑
A Kim Minseok su madre siempre le prohibió muchas cosas: Ver la televisión durante más de quince minutos, sacar su bicicleta fuera del gran patio que había obligado a su padre a agrandar para él, salir de la casa sin avisarle e irse a dormir después de las diez.
Por supuesto que conforme fue creciendo también fue aprendiendo a saltarse algunas de las normas, su mamá caía dormida poco después de las diez treinta y él podía continuar despierto en su celular, mensajeándose con Lu Han. Además había conseguido tener un teléfono, y eso ya era mucho logro, pero por sobre todas las reglas que jamás se atrevió a quebrantar, antes de ese día, Minseok nunca se paró frente a la última casa del fraccionamiento.
La calle en que vivían era una privada de casas muy similares, aunque algunas más lujosas que otras, pero ninguna como la mansión al final de la calle. Desde que podía recordar, Taeyeon siempre bufaba cuando la veía, y siempre le decía a Minseok que cuando creciera y fuera millonario gracias a su ingenio, jamás construyese su enorme casa en una manzana de clase media, pues lo único que conseguiría además del odio de sus vecinos, sería malos deseos por parte de éstos.
Kim Taeyeon detestaba a los Huang, los odiaba y no solo porque fueran chinos pretensiosos, como solía llamarlos a la hora de la cena, sino porque la esposa del matrimonio era su jefa y su mamá simplemente no podía soportar a las personas más exitosas que ella.
A lo largo de su corta vida, la mujer siempre fue sumamente selectiva para con las amistades de su hijo, pero si le prohibió algo en específico, eso fue entablar amistad con alguno de los hijos de los Huang. Y Minseok nunca tuvo problema con ello porque siempre estuvo encerrado en su casa, pero ahora estaba ahí, parado frente a la puerta que siempre se le prohibió tocar, a sabiendas de que si su madre se enteraba de dónde había estado toda la tarde metido, seguramente estallaría más de un volcán.
Y quiso retractarse, por supuesto, pero para cuando se hubo dado media vuelta, ya alguien había abierto la puerta.
ㅡ¡Hola! Eres Minseokkie ¿verdad?
El adolescente giró sobre sus talones, haciendo una reverencia perfecta para el hombre de preciosa sonrisa frente al que estaba. ㅡ Mucho gusto, señor Huang.
ㅡAigo, Yeri no mintió cuando dijo que eras muy educado. Pero pasa, pasa, no te quedes ahí. ㅡ Dijo el hombre alto y delgado forrado con un traje aparentemente de etiqueta, era muy guapo y olía a la elegancia que su sola presencia irradiaba. Cerró la puerta tras ellos y pasó una de sus manos por los hombros de Minseok, conduciéndolo por un lujoso pasillo hasta la que debía ser la primera sala del hogar. ㅡ ¿Crees que estarás bien cuidando a nuestros niños por hoy? Sinceramente ya no sabemos qué hacer con ZiTao, han sido tres niñeras de la agencia en la última semana.
ESTÁS LEYENDO
Enamórate de mí, Hyung || XiuHarem
FanfictionCuando sus padres no le dejan más remedio que conseguirse un empleo para ganar dinero, la Sra. Kim le abre las puertas de su casa para que se haga cargo de cuidar a sus hijos por una paga considerable y Minseok, a sus trece años recién cumplidos, nu...