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Después de los días que llevo, no es que esté muy fresca en clase. De hecho, después de ver la cara de cansancio de Maddie, creo que ninguno de nosotros está como una rosa. La emoción de algo nuevo y el café me mantienen despierta, pero no por mucho tiempo. En el holograma de pizarra aparecen esquemas que debería copiar. Rinna los está copiando, así que ya se los pediré. Se mantiene tranquila, concentrada en lo que dice la profesora de filosofía. No sería muy adecuado que se transformase aquí mismo, a la vista de todos. Por otro lado, yo estoy deseando decirle a todo el país que soy IronWoman. Todos me han pedido unas máscaras, no quieren ser reconocidos, pero yo, la única que va cubierta de pies a cabeza, quiero que sepan que valgo la pena. Alguien llama a la puerta y Al se gira, intrigado.

-Buenos días. Estos son los alumnos nuevos.

Al me hace un gesto con la cabeza, indicándome que mire. Me giro yo también, cansada y aburrida. En la puerta está la directora con una chica y un chico de nuestra edad. Ella tiene la piel muy blanca y el pelo castaño brillante. Él también es pálido, con el pelo tan rubio que parece blanco. Ambos tienen los ojos de un azul intenso que llama mi atención. Ella va con un vestido blanco que le llega un poco más arriba de las rodillas y una chaqueta granate muy bonita, mientras que él lleva una sudadera azul eléctrico y unos pantalones vaqueros. El chico está serio, observando la clase con frialdad, mientras que la chica busca algo, o a alguien. Miro a Al, que se encoge de hombros. La directora termina de hablar con nuestra profesora.

-Stark- me sobresalto.

Me vuelvo a girar hacia ellos y veo a la chica nueva, que me dedica una sonrisa escalofriante. Me agarro los vaqueros y me pongo de pie.

-Seguro que no te importará enseñarles el instituto, ¿verdad?- dice la directora.

-¿Yo?- sonrío. Dejar de dar clases es lo mejor que hay-. Encantada de presentarles cada uno de los rincones.

Me acerco a la puerta con seguridad. No sé quiénes son, ni sé por qué están aquí, pidiéndome a mí que les de una ruta turística por el centro, pero deben saber quién manda. La directora cierra la puerta detrás de nosotros y luego se va.

-Creo que ya sabéis quién soy.

-Sí- dice la chica. Tiene un acento extraño.

-Pero yo no sé cómo os llamáis. ¿Rojiblanca y Azulado?

El chico suelta un bufido. No habrá entendido el chiste.

-Azulado porque vas de azul y estás a su lado... Si lo explico no tiene gracia.

-No la tiene aunque lo expliques- su acento es todavía más marcado que el de su hermana. Vamos caminando por los pasillos, pero no prestan mucha atención a lo que nos rodea.

-Disculpa a mi hermano. Me llamo Magda, y él es Pietro.

-Encantada.

De repente algo choca contra mi espalda y me empuja hacia delante, haciéndome perder el equilibrio y cayendo al suelo. Me giro, enfadada.

-Lo siento- dice Maddie-. No sé qué me pasa.

-¿Qué haces aquí?- pregunto mientras me levanto.

-He visto que pasábais y he pedido "ir al baño"- responde haciendo comillas con las manos-. ¿Quiénes sois?

-Magda y Pietro, los nuevos- digo yo-. Les estoy enseñando esto.

-¡Qué guay! Amigos nuevos. ¿De dónde venís?

-De un pueblo de Rusia- responde Pietro sonriente.

-¿Y qué os ha traído hasta aquí?- Seguimos caminando. Maddie está entre Magda y Pietro, sonriendo y moviendo mucho las manos. El chico la mira embobado. No puedo evitar reírme.

The New Avengers/ TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora