Punto de vista de Nina
Xabi y yo nos encontramos en la plaza. Me esperaba allí, sentado en un banco. Lo miré y él me miró.
- Hola Nina, ¿cómo estas?
- Hola Xabi, ¿todo bien y vos?
- bien, gracias. Voy a ir al grano directamente.
- Como quieras.
- Nina, te he extrañado mucho. Perdoname por no escribirte, mi telefono se rompió y ahí estaba tu numero. La verdad es que he estado pensando en tí desde que me fuí. - tragué con nerviosismo. ¿Qué me quería decir con todo esto? ¿Que me quería? - Pero cuando llegué, me dí cuenta que ya tenías novio y lo tonto que fuí al no aprobechar mi oportunidad contigo.
- Tu eres un chico muy dulce y bueno Xabi, encontrarás a alguien que te corresponda, porque yo amo a Gastón, y lamento que te tenga que decir esto, pero yo ya lo amaba desde antes de conocerte - la decepción y la tristesa invadió su cara.
- lo entiendo.
- gracias - lo tomé de la mano mostrandole mi apoyo y me fuí.
Punto de vista de Gastón
Pasaba por el parque cuando ví a Nina. No me había dicho a donde había ido, y ahora entiendo porqué. Estaba con ese chico de quien gustaba antes.
Ya con solo mirarla me dió coraje. Ví que le tomaba la mano y los celos eran incontrolables. Patiné lo más rapido que pude. ¿Me dejaría por ese idiota? Tal vez su historia con él era mas profunda de lo que creía. Me sentí traicionado, dolido. Pasaron 5 días y no tuve el valor de enfrentarla. Así que la estuve evitando. Obviamente, me llamó mil veces pero yo no daba señales de vida. Quería estar solo, y me dí cuenta de lo mucho que necesito a Matteo. Fuí a visitarlo varias veces y se estaba recuperando. Me hacía sentir mejor, esa es una de las cosas que más me gustan de mi mejor amigo. Y él además tenía sus problemas "no resueltos" con Luna. "El amor es complicado hermano" era nuestro lema durante esos 5 días. A muchos les parecerán pocos, pero para nuestros corazones era una eternidad. Daba justo la casualidad que esa semana eran vacaciones de invierno, así que no teníamos que ir al Blake, ni ver a las chicas. Matteo ya podía caminar y su cadera ya estaba casi recuperada. Los medicos le dijeron que sí podía patinar, lo cual fué un enorme alivio para nosotros.
- Hoy me dan de alta.
- que bueno amigo, ¿vamos a ir a patinar?
- seguro van a estar Luna y Nina en la pista, ¿no te molesta?
- no importa, lo unico que quiero hacer es patinar con vos, hay que estrenar esa cadera renovada. - nos reímos y ese mismo día Matteo salió del hospital. Nos fuimos directo al Jam and Roller.
Entramos a la pista, y para Matteo era como entrar al cielo nuevamente. Las vimos patinando pero no se percataron de nuestra presencia. Nos apoyamos en la barandilla.
- Matteo, ¿cómo vamos a hacer?
- amigo, vos no te preocupes. Patinamos juntos por primera vez desde hace una semana mas o menos. Tenes que ser fuerte. - me sonrió y yo seguía preocupado, pero me ayudó que él estuviera ahí.
- vamos. - salimos a la pista y haciendo como si no estuvieran, patinamos, hicimos trucos que solo nosotros podíamos hacer. No nos importó nada, ya qué mas dá, no todo en la vida son ellas.
Punto de vista de Luna
Estabamos patinando, tratandonos de olvidarnos de todo. Le enseñaba un truco a Nina. Despejarnos era lo mejor para nosotras. De la nada, nos dimos cuenta que todos miraban a algo, pusimos atención, y que "Buena onda", eran justamente Matteo y Gaston haciendo unos trucos increibles. Actuaban cómo si no les importaramos, ni nos miraban, pero sabíamos muy bien que se habían percatado de nuestra presencia en la pista. Había miradas de tristesa estaba en nuestros rostros. Me cansé de sufrir.
- Nina, no les prestes atención.
- pero Luna, lo extraño. Y no entiendo porqué no me habla, tal vez está enojado o simplemente lo aburrí. No me quería tanto como yo creía.
- No digas eso, tal vez debas hablar con él - Nina trató de patinar hacia él y yo la detuve. - pero no justo ahora, está con Matteo y no puedo verlo.
- Lo cuidaste y estuviste ahí para él, ¿no te ha perdonado?.
- Al parecer no del todo. Lo había llamado y me dijo que no fuera a verlo al hospital, necesitaba despejarse. Sigue enojado porque me vió con Felipe, estoy segura.
- Bueno, nosotras patinemos y ya. - dijo ella en voz baja y yo comencé a patinar con ella. Yo iva de espaldas para poder verla y ella iva de frente. En un momento me hizo una seña para que parara pero me dí cuenta demaciado tarde. Me choqué y caí.
- Ash, ¿qué pasó?
- ¿qué más Chica Delivery? Nos acabamos de chocar. - me dí la vuelta y ahí estaba Matteo en el piso sentado también y tocandose la cabeza. - ¿estas bien?
- si, yo si. ¿Pero tu? Matteo, tu cadera.
- más que mi cadera, me golpee la cabeza, pero no es nada, tu tranquila.
- bueno, perdón. - me levanté y le ofrecí mi mano para que se levantara, pero lo hizo solo. Cuando lo hizo perdió el equilibrio y lo atrapé.
- eeh.. Gracias. - me dijo mientras me miraba nervioso, luego de un segundo su mirada cambió completamente. Me miró con ternura, como una suplica para que lo besara.
- no me mires así, Matteo.
- ¿cómo?
- así, como si me quisieras obligarme con la mirada a que te bese. No puedo resistirlo, así que para porfavor. - continuó haciendolo y no me quedó otro remedio que irme antes de que mi corazón saliera de control.
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No habrá distancia que Cambie lo que siento por Ti
FanfictionLuna Valente es una simple chica cuyo novio, Matteo Balsano, tuvo que irse a Italia. Pero a su regreso, las cosas se complican a tal punto que les causan un dolor inevitable. ¿Su destino será chocar a pesar de todo? Genero: romance/ drama. Basado...