No habrá distancia que Cambie lo que siento por Ti

El significado de un "Te amo"

- Hice lo que tenía que hacer para que no te fueras, y tú también harás lo mismo. - dió la vuelta y contunuó caminando por el pasillo del Blake - Resístete, esfuérzate.

- Eso es un gran problema, me volví dependiente a tus besos, los necesito.

- Matteo, tienes que tratar, por mí, por nosotros, por nuestro futuro juntos.

- Lo entiendo, pero ¿al menos no puedo robarte algunos cuando estemos solos?

- Es arriesgado de todas formas.

- Luna.. - me aferré a su brazo hacíendola darse vuelta hacia mi. Le lancé una mirada de súplica, para que tuviera por lo menos un gramo de piedad.

- No Matteo, no te quiero perder nunca más. No estoy segura de si podría soportarlo nuevamente.

- Está bien, voy a hacer lo que tú quieras amor. - sus cejas fruncidas se relajaron, cosa que me encantaba. Le dí con el gusto, no quería verla mal por mi culpa. Coloqué ese mechón de cabello, que siempre terminaba en el medio de su cara, detrás de su oreja. - que tortura no poder demostrárle cuanto te amo.

Pestañeó tan naturalmente, saliendo del transe que le ofrecían mis ojos con insistencia.

- Voy a extrañarte más de lo que crees. Estoy pensando que tal vez puedes llamarme por las noches.

- Lo haré sin dudarlo. No me extrañes, ¿si?. Estaré cerca viendo como estás y si algún pretendiente se te acerca. - soltó una carcajada mirando hacia abajo y apoyándose la mano sobre su rostro.

- Hay, Matteo. No será necesario.

- Ya sabes que soy celoso. - puse cara de serio aunque realmente no lo estaba del todo y cruzé mis dos brazos.

- También posesivo, pero tenés razón en algo. Mi corazón es tuyo, así que sigue cuidándolo. - depositó un leve pero poderoso beso en la comisura de mi labio, dejándome con ganas de más aún - Te amo.

- Te amo. - Podía ver que días me esperaban sin ella y aguantándome las idioteces de Paulina. Acaricié su mejilla mientras daba media vuelta para poder marcharse del colegio. La ví caminando con mi mano en mis bolsillos y mi corazón en la mano.

Sus palabras retumbaron en mi cabeza, como un eco el cual quería que fuera eterno. Un "Te amo" es una expresión que solo debe ser nombrada cuando el sentimiento es verdadero, sino no es digno de quien la pronuncia. Esa misma frase salida hace pocos segundos de sus labios me perseguiría todo este tiempo para recordarme quién espera mis besos.

Al llegar a mi casa, me dí cuenta definitivamente que la suerte no estaba a mi favor después de todo. Paulina esperándome en un sofá y con su mirada fija en mí, genial. Nuestra relación siempre había sido tóxica y siendo sincero, nunca logré amarla de verdad. Recordé ese verano en el que pasamos juntos..

- Matteo, recoje mis maletas de una vez.

- No soy ningún esclavo.

- Vamos, tú eres el mejor en todo, él más fuerte, él más capaz. - Paulina se había acercado provocativamente jugándo con un dedo en mi pecho - Ahora, hazlo de una vez, quiero ir al spa.

- Puede ser que sea el mejor, pero a mí no me vas a manipular.

- Bueno, se lo pediré a alguien más. Si me disculpas, me voy al Sauna, ¿vienes?

- No, mejor me quedo. - recuerdo sentirme vacío. No me hacía bien.

- Olvido algo.

- ¿Qué? - se había abalanceado sobre mí para besarme, un beso sin sentido comparados a los que ahora si puedo percibir con Luna.

- Te amo. - Solía creer que Paulina me amaba a su manera. Tanto así que después de años, volvió como loca solo para buscar corresponderle otra vez.

- Yo también. - y volvemos a lo que me refería antes, lo importante de la frase. Si no es verdadero el sentimiento, esta no tiene importancia alguna.

Terminé de recordar y volví a la cruda realidad.

- Te estaba esperando. - miró sus uñas y luego alzó la vista.

- Mira que casualidad, ya llegué pero justamente estoy cansado y ya me voy. - me dí la vuelta desinteresadamente dando un paso en dirección a las escaleras que posteriormente daban a mi habitación.

- Espera, necesito hablar contigo. - la sentí pararse y paré de ignorarla, por el simple hecho de que deseaba saber por qué hizo lo que hizo. Un silencio recorrió la sala y procedió hablando. - Veo que has cambiado mucho.

- Ella me cambió mucho. Me hacía bien en muchos sentidos. Pero por tu culpa, la perdí. - o eso es lo que tu crees que pasó.

- Se nota, no eres el mismo Matteo que el de que me enamoré.

- Lo único que yo puedo sentir por tí es lastima, ya deja el pasado y sigue adelante.

- Lo intenté, pero no pude. Yo te amo.

- El problema es que tu crees que me amas, pero Paulina, yo comprendí que eso no es amor y es hora de que tu también lo hagas. - la fulminé con la mirada tratando de que por fín entendiera mi punto.

- Tal vez tengas razón, debería rendirme pero no lo haré. Te recuperaré para demostrarte que lo nuestro sí fué real.

- Es imposible, ¿sabes?. Ya no puedes robar mi amor, porque ya no está a tu alcance. Aunque no esté con ella, yo sigo correspondiéndole por si no te quedó claro y no me rebajaré a estar contigo. Te pido que lo olvides y qué te vayas, no vale la pena el esfuerzo en vano.

Dichas estas palabras continué mi camino hacia mi habitación, el refugio que me mantendría lejos de ella por lo menos por unas cuantas horas.
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Una hora escribiendo este capítulo larguísimo ufff 😂.

Hay Paulina es una obsesiva mal, osea vamo a calmarno. Pero busquen entender su desesperación, tal vez se sientan identificadas en algún punto.

Otra cosa: les quería pedir el favor de que si hay errores de ortografía avisen porque ME CAGAN y yo soy muy volada a veces, no pienso en lo que escribo 😌☺️.

Las quiero y muchisimas gracias por todos sus mensajes, no saben lo feliz que me hacen.

Un beso enorme, Sofi, @LutteoReina🙈