Al día siguiente, fuimos al Blake. Todo fué como antes, totalmente normal, y me gustaba. Se me ocurrió la genial idea de invitar a mi novia a almorzar, en un bar parisiano cerca del Blake, admito que siempre lo observé cuando pasaba prometiendome a mi mismo que la llevaría ahí algún día. Esta era la ocación perfecta, así que ella aceptó, confiando en mis gustos y llegamos.
- Es hermoso, Matteo. - dijo mientras cruzabamos la calle para ir al bar. Me agarró de la mano y colocó su cabeza en mi hombro.
- sabía que te gustaría.
- que considerado el chico fresa, gracias. - le coloqué la silla en posición para que se sentara y la empujé a la mesa. Me sonrió con esa sonrisa, de la cual soy capaz de mover cielo y tierra solo para observarla unos segundos. Me senté y ella observó el lugar detenidamente, yo solo la veía. Su naturaleza, su forma de ser ella, eran una de las cosas que más me gustaban de mi novia definitivamente. Se percató de esto y sus mejillas se tornaron de un color rosa.
- ¿Por qué me ves tanto? Me haces sonrojarme Matteo.
- Que quieres que te diga, si sos hermosa.
- basta, no soy tan hermosa como para que me andes mirando todo el rato.
- cuando veo tu rostro, no hay una sola cosa que yo cambiaría. Y tu no sabes lo hermosa que eres, ese es el gran problema. Cree en mí cuando te lo digo - sonrió y agachó la cabeza. Me miró de reojo con esa ternura característica de ella y se levantó hasta donde yo estaba. Se sentó en mis piernas.
- seguramente el Chico Fresa le habrá dicho todo esto a sus otras novias - dijo haciéndose la graciosa y tomando mi rostro con ambas manos.
- no, en realidad, eres la primera a la que se lo digo y ¿sabes por qué?
- ¿por qué? - dijo acercandose a mí casi tocando mis labios.
- porque tú fuiste la única que me descubrió debajo de este chico fresa y además, porque eres la única que merece este tipo de halagos.
- te besaría, pero ya te dí muchos besos ayer, y no quiero ser tan empalagosa.
- me encanta que seas empalagosa. - sentí su calor de inmediato en un abrazo. Dicen que son la cura del alma, una muestra de cariño que puede sanar las heridas que quedaron ahí sin cicatrizar. Y este definitivamente era la prueva de ello. Su olor se había impregnado en mí, ya era parte de mi ser. Acarició mi espalda, la recorrió como si tuviera el mapa ya estudiado. Cerré mis ojos y simplemente era como si solo estuvieramos ella y yo. - ¿qué hice para merecerte? - mis pensamientos se volvieron palabras y sentí su sonrisa mientras continuaba su cabeza en contacto con mi trapecio, hombro y cuello.
- la pregunta en realidad es ¿que hice yo para merecerte? - el abrazó dió su ultimo tramo de tiempo cuando se separó para mirarme. - ¿tú sabes que - simplemente tomó los rizos al borde de mi rostro y jugó con ellos mientras los observaba - le das luz a mi vida? - al terminar la frace desvió sus ojos para que tomaran contacto con los mios.
- no sé que habría sido de mi si no hubiera vuelto.
- contunuaríamos viviendo necesitandonos.
- puedo hacerte tantas promesas ahora Luna, pero solo el futuro elijirá si se cumplen. Por eso solo desearé tenerte siempre. Eso es suficiente seguridad para mí.
- y también puedes tener la seguridad de que te amaré hoy, mañana, el mes siguiente, y en cincuenta años. - me abalancié sobre ella sin dejarle tiempo se reacción, no podía negarme un beso, sería demaciado cruel para mí. Y cedió, gracias a dios, necesitaba sentirla más que nunca. Decirte que la deseo es poco. El contacto se tornó mas apasionado y pues, nos olvidamos que estabamos en un lugar público. Nunca creí ser de esos idiotas enamorados que andan besuqueandose donde sea, ahora lo entendía. Paré y me controlé un poco, y ella trató de continuar el beso, solo logrando un roce.
- ¿olvidas donde estamos chica delivery?
- hay - dijo tocandose el labio de la vergüenza - estamos locos.
- puede ser.
- que puedo decirte, esos labios italianos son mi debilidad, y no es ningún secreto.
- Ti amo, cuore. Le tue labbra sono la mia dipendenza anche - me miró derritiendose de ternura, ya puedo ver cual será mi táctica para que me bese mucho más seguido.
- Vuoi tu vuole conquistare me? - dijo con su tonito y me sorprendí.
- ¿por qué hablas italiano?
- tengo mis secretitos, en realidad, era una sorpresa. Empecé a ir a clases de italiano diciéndote que me iba a ver a Nina antes de que perdiera mis recuerdos.
- yo intuía que me ocultabas algo, pero decidí confiar en tí, no eres muy buena para mentir mia bella Luna.
- lamentablemente, para nada. - miró su reloj en la muñeca izquierda y se levantó de repente. - ¡Matteo! ¡Llego tarde al trabajo! Adios, ti amo. - no me dejó emitir una palabra, me dió un fugaz beso y se fué corriendo. Mio dio me Chica Delivery!
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Primero que todo, si no entendieron, les traduzco mis amores.
👉🏼 "Ti amo, cuore. Le tue labbra sono la mia dipendenza anche" quiere decir "Te amo, corazón. Tus labios son mi adicción también"
👉🏼"Vuoi tu vuole conquistare me?" Quiere decir "¿va a querer conquistarme?
👉🏼"mia bella Luna" quiere decir "mi hermosa/bella Luna
👉🏼 "Ti amo" quiere decir "Te amo".
👉🏼"Mio dio me Chica Delivery!" Quiere decir "¡Dios mío, mi Chica Delivery!"
Segundo que todo, quería avisarles que estamos en el TOP 5 chicassss! No lo puedo creer, gracias por tanto 💖
Eso es todo, ¡muchas gracias! Hasta el proximo, los quiero,
Sofi
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No habrá distancia que Cambie lo que siento por Ti
FanfictionLuna Valente es una simple chica cuyo novio, Matteo Balsano, tuvo que irse a Italia. Pero a su regreso, las cosas se complican a tal punto que les causan un dolor inevitable. ¿Su destino será chocar a pesar de todo? Genero: romance/ drama. Basado...