Capitulo 2: "La Valla"

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Aquí el verano está finalizando, y la humedad es baja, lo único negativo es que no corre ni una gota de viento y me está saciando el calor, sólo estoy a dos prendas interiores, una bikini bastante vieja pero cuidada, tendría que de todos modos conseguir otra, después de ubicarme en algún trabajo, la Universidad no me dará dinero, me lo quitará. Hoy empezaré con mi búsqueda de empleo, ni pienso pisar un grasoso suelo de McDonald’s, además de admitir que soy vegetariana y esas cosas me consumen el alma. 

-¿Janis?—Alguien llamaba a mi puerta, era una voz femenina pero no sabía si era Olivia o Barbara.

-Puedes pasar—Dije acomodando mi cama.

-Buenos Días, ¿Has dormido bien?—Dijo Barbara.

-Claro que sí, es muy cómodo aquí. Y las sabanas también, suaves. Gracias—Dije, no debía dejar de agradecer de tener un techo y muy acogedora casa.

-No agradezcas más, estarás un tiempo largo aquí, ¿Piensas seguir agradeciendo todo?—Me preguntó pero lo tomé bromista.

-Lo siento—Me miró pícara—Oh, tampoco debo disculparme seguido, es una costumbre—Reímos.

-¿Quieres ir de compras?—Ella leyó mi mente.

-Adivinaste que necesito ropa—Rió

-Después tenía planeado ir a la playa—Dijo

-¿Aquí hay playa?—No sé si sonó ofensivo.

-Claro. Está algo alejada, pero hay. Gracias al cielo uno puede refrescarse, sufrimos mucho calor—Dijo.

-Me encantaría ir—Dije, pero prefería ir a comprar una nueva bikini, para no ser la nueva burla de este condado. 

-Te esperaré, estoy en mi habitación, cuando estés lista, ya sabes—Dijo saliendo de mi habitación. Y luego asentí.

“Bien” dije a mis adentros, estaba algo desordenada mi cabeza, pero un detalle milésimo no se me borró de esta, ayer alguien me miró cuando me cambiaba, era aterrador ver fijamente a esos dos puntos esmeralda. ¿Es común la onda de asesinatos por aquí? Me estoy convirtiendo en una desconfiada y nunca fui así, pero cualquiera me entendería.

Esta vez cerré los ventanales y me cambié al bikini usado, luego unas prendas al azar y salí a buscar a Barbara.

-Vayamos a desayunar a King’s—Me dijo, desconozco el lugar pero estoy a la disponibilidad de ella.

Era un lugar algo <adolescente>, sí, esa es la palabra. Muchos chicos de mi edad o un poco más, era muy notable. Barbara no dejó de saludar chicos y algunas chicas, me sentía patética a su lado porque sólo la saludaban a ella, y yo era un punto invisible que seguía su falda, incómodo.

Nos sentamos en el centro y ella ordenó una ensalada de frutas, para mí gusto es poco, puedo desayunar como un oso luego de invernar, la comida es un punto débil en mí. Quedé algo <obesa> a comparación de Barbara, una chica refinada, un pelo cuidado y colorido, un rubio platino intenso que llegaba hasta su cintura, unas piernas firmes y trabajadas, y tras su blusa notabas sus redondos pechos a la perfección, y un trasero parado y también trabajado, adoro ser una chica no envidiosa, pero seguro Barbara es el odio de muchas de aquí, su nariz pequeña parecía operada, indudablemente era perfecta, y sus ojos verdes, bueno, era un prototipo Barbie, los labios siempre color rosa, gran error, maquillarse tanto. Al fin y al cabo, ella pidió algo que no duraría en hacer una digestión, siempre su vientre se vería plano y bronceado. No deja de mirarse al espejo y “acomodarse” su rostro. Esto hace quedar mal a la mayoría de las mujeres. 

Ordené tostadas, café, y galletas. La mesera trajo gran cantidad, lo que me dejó con una sonrisa el resto de mi vida, soy un poco egoísta con la comida, un poco.

Obsession (Harry Styles)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora