Capítulo 1.

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Estaba cansado, desde que había entrado a su turno había estado en una cirugía que había durado tres horas, el reloj marcaba más de las dos de la mañana el doctor Choi se disponía a dormir un momento cuando la sirena de la ambulancia le avisó que su descanso debía esperar, fue hasta la sala de urgencias y vio a los paramédicos entrar rápido, y colocaron la camilla para cambiarlo al paciente, el doctor Choi se apresuró a asistirlo mientras el paramédico le informaba lo que había sucedido.

Había saltado de un cuarto piso, los médicos procedieron a intentar estabilizarlo, después de un largo tiempo vio por primera vez el rostro del joven al que estaban asistiendo, se quedó estático, él conocía a aquel joven, de eso estaba seguro. Sus manos temblaron un poco y por un momento pensó que no podría separar lo profesional de lo personal.

Cuando estaba un poco más estable a pesar de que seguirían interviniendo en él uno de sus compañeros le pidió al doctor Choi que se retirase, estaba demasiado cansado había salido de aquella cirugía y ahora estaba ahí, se notaba el cansancio en sí y aunque se resistió un poco al principio terminó por convencerle al recordarle que ellos también eran médicos, asintió y antes de irse dijo que si algo se complicase lo llamaran de inmediato.

Recorrió el pasillo nuevamente, su rostro reflejaba cansancio pero a pesar de que después de haber salido de aquella cirugía quería dormir ahora todo su sueño se había esfumado, pensó que era por el frío de la noche pero eso iba más allá, era por el hecho de ser aquella persona, habían pasado seis años desde la última vez que lo vio y aunque quiso encontrarlo no pudo, nunca estaba en casa cuando intentaba contactar con él.

Se metió bajo las mantas para intentar conciliar el sueño pero su mente comenzó a recordarle el pasado una vez más, después de salir del instituto se dispuso a olvidar sus siete meses restantes después que él desapareciera por completo sin dejar rastro y ahora volvía a aparecer recordándoselos.

***

—¿Qué es esto? —mostró una de las fotos que circulaban por todo el instituto.

—Creo que está claro lo que es —siguió su camino.

—¡Detente Lee Taemin! —lo sujetó del brazo.

—¿Para qué? ¿Para qué me vuelvas a hacer daño? ¡Suéltame! —agitó su brazo intentando soltarse.

—Sabes que eso no es verdad, debes decirlo.

—Todo es verdad, todo sucedió el día que hubo la fiesta en mi casa —Min Ho no había esperado escuchar eso, él esperaba que dijera que no es verdad —idiota —susurró antes de alejarse.

Los alumnos que se habían detenido a ver lo que sucedía entre ellos dos comenzaron a murmurar, Min Ho lanzó las fotografías contra el suelo furioso, miró el pasillo por el cual se fue Taemin, corrió para alcanzarlo, pero no pudo hacerlo ya que ingresó a la oficina del director cuando él llegaba, y la secretaria no le permitió que esperara ahí ya que perdería clases.

***

Le pareció haber cerrado los ojos solo por un momento pero al abrirlos nuevamente el cielo era claro, comprobó la hora en su móvil tan solo faltaba media hora para entregar el turno, se incorporó de inmediato y fue hacia la sala de urgencias pero de camino se encontró con su compañero que le había dicho que podía irse con tranquilidad en aquella madrugada.

—¿Vas a la sala de emergencia por el joven de esta madrugada? —Él asintió —el joven ha sido trasladado a una habitación privada.

—¿Por qué?

We meet again.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora