Cuando llegué a casa aquella tarde, lo primero que hice fue llamar por teléfono a mi mejor amigo. No acababa de entender la historia, era demasiado ficticia que digamos para ser verdad...¿Quién podía creer cosa semejante? ¿Y en la ciudad? Pensar así me dejó aún más anonadado, no podía comprender por qué todos apartaban a Cecilia como si fuera un chicle pegado en una acera.
-Buenas tardes,Maribel. ¿Está en casa? Le pregunté a la madre de mi amigo mientras jugueteaba con el cable del teléfono, bastante nervioso. Realicé alguna que otra onomatopeya esperando que mi mejor amigo dejara de hacer algo que estaba haciendo y corriera al teléfono. Sabía que si lo llamaba a una hora concreta de la tarde había sucedido algo "gordo". Y obviamente esto no era para menos...
-¡¿Fernando!?-Me preguntó extrañado y totalmente intrigado. ¿Qué habría pasado? Con total seguridad miró su reloj de muñeca y comprobó que no haría ni un cuarto de hora que yo había llegado a mi casa después de clase. ¿Qué habría pasado?-¿Eres tú no?
-¡Sí! No vas a poder creer lo que voy a contarte:-tomé aire cerrando los ojos y acto seguido proseguí-tengo una compañera cuyo padre, toda la ciudad dice que es un vampiro. Aunque estaba al otro lado de la línea telefónica vi con total claridad los ojos abiertos como platos de mi mejor amigo. ¿Qué le estaba contado Fernando? ¿Se había vuelto loco?
-Pero...Fer...Fernando-comenzó a reír desconcertado-¿Estás seguro de lo qué hablas? ¿Cómo va a ser el padre de nadie un vampiro? ¡Los vampiros no existen! Y no creo que tu compañera haya adoptado un quiróptero como progenitor. Volvió a reír.
-Sí,sabía perfectamente que todo esto iba a sonarte a broma sin gracia, pero tenía que contártelo. ¡Es que soy incapaz de creerlo!
-Ah...Lo oí susurrar al otro lado.
-¿Sigues ahí?-Le pregunté intrigado-Al igual que tú yo tampoco me creo semejante historia,pero Olga, otra compañera,nos ha dicho que media ciudad lo cree y a pies juntillas...Entonces ya no sé que pensar...Pero suena tanto a filme que...
-Lógico:no alcanzas a creerlo. ¡Pero ni tú ni nadie,Fernando! Algo más antes de dejarte,porque tengo cosas que hacer...-se detuvo tal vez dubitativo tal vez con mucha curiosidad-Ahora soy yo el que quiere preguntarte:¿y por qué te interesa tanto esa chica? ¡Al menos dime su nombre! ¿No?
-Cecilia:se llama Cecilia. Contesté y en ese mismo instante una risa irónica y breve salió disparada de mi boca, como quien no quiere la cosa. ¿Él también? -¿Tú me preguntas lo mismo qué Bruno? ¡Oh no! ¡Otra vez no!
-¿Bruno? ¿Ese nuevo amigo del qué me has hablado? Me interrogó mi mejor amigo intrigado y tal vez enfadado pues quería seguir siendo mi mejor amigo.
-Sí,el mismo. Bruno dice:¡que me gusta Cecilia!-Exclamé- Miento:lo ha insinuado. Decir...decir...Ha dicho que tengo interés en ella...
-Que al fin y al cabo es lo mismo. -Añadió él.-Pues que tengas suerte si tu suegro es un vampiro.
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La chica del banco.
JugendliteraturCecilia es una chica con la que nadie habla.La causa, una historia que circula en la ciudad:su padre es un vampiro que ha matado a su esposa,la madre de Cecilia. Todo es igual hasta que comienza la Facultad.Momento en que las cosas empezarán a camb...