Fue demasiada coincidencia para mí, pero ¿Quién más sería que me hablara en español y me "conociera"
-Y sí, que coincidencia. -dije extrañada- ¿No será que me vienes siguiendo?
-¿Cómo sería posible? Si apenas me quisiste decir a dónde venías. Además ni que fueras tan indispensable -rió
- Pues hasta ahora soy la única que conoces -hice una mueca
- Es verdad, pues... tendrás que ser mi amiga.
-¿Tengo? -reí- Vaya, vaya. ¿No debería ser una opción?
-¿Tienes una mejor?
-Pues... no. Tienes razón -tape mi cara con mis manos. -Bueno primero que nada te digo que solo amigos, nada más.
- ¿Acaso dije que algo más? -dibujó una suave sonrisa en su rostro.
-No, pero por si acaso más adelante. No sé, suelo causar ese tipo de cosas en las personas -alce las cejas y y voltee los ojos.
- ¡Que modesta! -dijo en un tono sarcástico
-Estoy bromeando -reí-
-¡Entonces te gustan las bromas he! No quieras bromear con alguien como yo, porque el que se lleva aguanta.
- Mira nomas, ¿me estás advirtiendo?
-Pues... algo así -sonrió- ¿Amigos? -extendió su mano
-Hecho -correspondí
Nuestras clases eran cursos para aprender mejor el idioma inglés. Al principio me fue complicado porque tenía muchísimos años que no estudiaba como se debe y me costaba entender en ocasiones, pero al menos sabía comunicarme. El día transcurrió rápido y las clases parecieron ser muy dinámicas. Los maestros ni hablar, buenísimos.
-Bueno entonces nos vemos mañana -dije a Eliseo
-Claro, pásame tu número. -me entregó su cel para que lo escribiera.
- En el primer día y ya me pides mi número, vas rápido -reí
- Pues, eres irresistible, no me pude contener. -alzó una ceja
-¿Qué? -me ruboricé inmediatamente
- Es broma -rió- Yo te advertí
-Hmm... Muy gracioso -dije sarcásticamente, anoté mi número y le entregué su cel.
-Muy bien Keila, ahorita te mando un mensaje para que tengas el mío. -hizo una sonrisa traviesa
-Bueno, me voy. Se hace tarde y apenas supe como llegar aquí, no vaya ser que se me haga noche y no encuentre el camino a la casa de mi tía.
-¿Quieres que te acompañe?
-No, se llegar yo sola. Gracias.
-Bueno, como gustes linda. Hasta mañana -se dió la media vuelta y empezó a caminar.
Me dirigí hacía la salida y traté de recordar el camino, caminé y caminé, y no me parecía nada conocido. En eso recibí un mensaje.
~ Número desconocido ~
¿Ya llegaste?
Era de esperarse que era de Eliseo, era al único que le había pasado mi número recientemente. Y me costaba aceptar su ayuda, pero ya empezaba a oscurecerse y como una tonta olvidé pedirle su número a mi tía, y la carga de mi celular empezaba a agotarse, no me quedó más que pedir ayuda.
Chat de Eliseo
-No, ayúdame, creo que me perdí :(
Al cabo de unos minutos alguien apareció por detrás y me tocó el hombro.
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Mi vida con Él
EspiritualMi nombre es Keila, y esta es mi historia de como fue que encontré el amor de la manera menos esperada, no solo hablo del amor de una persona que sería mi compañero de vida, sino el amor más puro e incondicional que hay, el amor de Dios. Como para t...